Este breve ensayo, resumen de lo expuesto por mí en varias obras, intenta presenta una crítica exhaustiva y radical al orden internacional liderado por Estados Unidos desde 1945, argumentando que este está en un proceso terminal de agonía, comparable a la de un enfermo que en sus últimos momentos causa desgracia a su entorno. Se estructura en varios ejes de análisis:
1. El orden de posguerra y el papel de la URSS:
Tras la derrota del III Reich en 1945, Estados Unidos impuso su Pax Americana, pero de forma incompleta debido al contrapeso soviético. Se destaca el papel crucial de la Unión Soviética en la derrota del nazifascismo en Europa y en evitar una Tercera Guerra Mundial inmediata contra las potencias angloamericanas, a un coste humano enorme. La URSS creó un "Segundo Orden Mundial" que aglutinó a países en descolonización, contrarrestando las pretensiones universales estadounidenses.
2. La ideología como instrumento y el concepto de "totalitarismo":
En mis textos desmonto la primacía de la ideología en el análisis geopolítico, presentándola como un factor móvil y utilitario. Señalo que el capitalismo imperialista anglosajón financió inicialmente a regímenes como los de Hitler y Stalin, demonizados luego como "totalitarios" una vez estalló el conflicto. El concepto de "totalitarismo", elaborado por intelectuales como Hannah Arendt, es analizado como un arma conceptual del Occidente liberal. Su función real no es describir similitudes estructurales entre nazismo y bolchevismo (regímenes diferenciados como opuestos separados por espacios abismales), sino estigmatizar como "totalitario" a todo régimen no liberal y no sujeto a la hegemonía estadounidense. Esto es tramposo, Esta sinonimia es clave para entender la Guerra Fría y su continuación.
3. La evolución tras la caída de la URSS:
Con la desaparición de la URSS (1989-1991), el "Hegemón" liberal (la Primera Teoría Política, en términos de Aleksandr Dugin) perdió su contrapeso socialista (Segunda Teoría Política). Entonces, el arsenal filosófico-político acumulado se redirigió para presentar al fascismo (Tercera Teoría Política) como la única alternativa al mundo "libre", simplificando el discurso a "liberalismo o barbarie (fascista)". Cualquier país que no se alinee con Estados Unidos es susceptible de ser etiquetado de "totalitario" o "autocrático", como se hace hoy, según el texto, con la democracia rusa multipartidista o con el sistema político chino.
4. La decadencia y el carácter depredador de Occidente:
El capitalismo occidental, especialmente en su versión tardía financiarizada, se describe en fase de agotamiento. Es un sistema improductivo, basado en la deuda y parasitario, cuya crisis de 2008 reveló su naturaleza "genocida e inviable". Estados Unidos, como deudor máximo, somete a otros países mediante este sistema. La "globalización" no fue la creación de un crisol mundial, sino la imposición del american way of life, un proceso que, junto con la "religión holocáustica" (la elevación del Holocausto judío a religión civil universal que otorga impunidad moral al sionismo), ha servido para adoctrinar y dominar.
El mito de la superioridad moral, tecnológica y militar de Occidente se está desmoronando. Moralmente, Estados Unidos viola el derecho internacional; tecnológicamente, se queda atrás frente a Asia, especialmente China; militarmente, carece de la capacidad combativa terrestre y de la resiliencia de potencias como Rusia, cuya experiencia en guerras defensivas por supervivencia se contrasta con las campañas imperialistas fallidas de Estados Unidos (Vietnam, Afganistán).
5. La OTAN como instrumento agresivo y peligroso para Europa:
La OTAN, creada en 1949 como alianza "defensiva", se ha convertido en una organización agresiva y expansionista que compromete la soberanía y seguridad de los pueblos europeos. El bombardeo de la República Federal de Yugoslavia en 1999, con miles de civiles muertos y uso de uranio empobrecido, marcó un punto de inflexión, mostrando que la OTAN ataca países soberanos europeos. La guerra en Ucrania (iniciada en 2014 con el Euromaidán) es otra manifestación. Estar en la OTAN no da seguridad, sino miedo, porque obliga a los países miembros a remilitarizarse y enredarse en conflictos (como Ucrania) que sirven a los intereses de Washington, no a los de Europa. La OTAN y la UE han perdido toda autoridad moral para dar lecciones sobre derechos humanos.
6. El nuevo modelo de dominación: Estados artificiales-terroristas ("portaviones estáticos"):
Ante su declive y su incapacidad para guerras convencionales exitosas, el Imperio occidental está adoptando un modelo de "guerra híbrida" que se asemeja al terrorismo de estado. El modelo es Israel: un estado artificial, altamente militarizado y agresivo, que funciona como un "portaviones estático" incrustado en una región estratégica. Este modelo se está replicando con entidades como Kosovo, la Ucrania post-Euromaidán o el "Gran Marruecos". Son "Estados-basura" o "Estados fallidos" creados o instrumentalizados para sembrar el caos, confrontar a enemigos (Rusia, China, Irán) y servir como plataformas de agresión. Marruecos, con el respaldo de Estados Unidos, Francia e Israel, se presenta como una tenaza junto al "portaviones" Israel para estrangular el Mediterráneo, siendo una grave amenaza para España y Europa del Sur.
7. La autodestrucción cultural y social de Europa Occidental:
Europa occidental ha sido víctima de un gigantesco cambio cultural orquestado por Estados Unidos: la "americanización" o "globalización". Esto ha llevado a:
a) Cese de la actividad productiva: Deslocalización industrial, dominio de la financiarización (fondos como BlackRock) y una economía basada en la deuda y el turismo cancerígeno (caso de España).
b) Cese de la actividad reproductiva: Invierno demográfico, sustitución poblacional mediante inmigración masiva (a veces utilizada como arma contra España, así ejemplo, por parte de Marruecos), tráfico de seres humanos y pérdida de identidad cultural.
c) Cese de la capacidad defensiva: Dependencia militar de la OTAN, ejércitos nacionales debilitados y abandonados a misiones ajenas, mientras se desprotegen las fronteras reales (como Ceuta, Melilla o las costas mediterráneas frente a la presión africana).
El "alma" europea ha muerto al romperse el trípode fundamental: producir, tener hijos y empuñar armas para la defensa nacional legítima.
8. Conclusión y perspectiva:
El orden mundial unipolar está terminando. Frente a la decadencia occidental, emergen modelos alternativos (como el capitalismo planificado o socialismo de mercado de China) y un bloque potencial como los BRICS. Europa debe despertar, rechazar la sumisión a Estados Unidos y la OTAN, y recuperar su soberanía, su capacidad productiva, su identidad cultural y su defensa nacional. Debe dejar de ser "Occidente" y redescubrirse como una civilización entre otras, con derecho a su historia y tradición. El camino actual conduce a la guerra, la destrucción y la colonización interna. Mis textos publicados terminan habitualmente con una advertencia sobre la creación de futuros "Estados-artificio" (como una Cataluña independiente) que servirían como nuevos "portaviones" para someter a poblaciones empobrecidas y alienadas. El futuro dependerá de que Europa rechace la guerra, el genocidio y la explotación, y recupere el control de su destino.