1. Chevron y otras empresas europeas han hecho el lobby de presionar constantemente al gobierno norteamericano para seguir garantizando sus negocios con Venezuela.
2. En marzo de 2025 fueron revocadas las licencias tanto a socios como a clientes con Venezuela.
3. Donald Trump dio como fecha tope el 27 de mayo del 2025 para liquidar todas las transacciones, dejando por fuera a empleados y las participaciones con las empresas conjuntas.
4. El Departamento del Tesoro hizo lo suyo dejando vencer la licencia de servicios para equipos con Venezuela.
5. Con esto ya son varias las compañías que reclaman a EE. UU. con volver al tiempo cuando tenían sus licencias por los años 2020 a 2022. Aun cuando no les permiten expandirse, desean conservar sus participaciones, oficinas y presencia mínima.
6. Estamos frente a un permanente éxodo tras la decisión de EE. UU. la cual traerá consecuencias para Venezuela. PDVSA acumularía nuevas deudas y esto le impediría seguir pagando dividendos. Todo se originaría al ver debilitado su músculo financiero al retomar solos el control sobre las empresas mixtas y sus exportaciones por sí mismas.
7. Así lo ha declarado el director ejecutivo de Chevron Mike Wirth.
Hasta más pronto…