De acuerdo a lo publicado en el portal El Pitazo, la septuagenaria fue identificada como Ysbelia Coromoto Hernández Romero, de profesión bioanalista y abogada. Su pareja es Pedro José Salinas, ingeniero agrónomo y profesor de la Universidad de Los Andes (ULA). Ambos vivían solos en un apartamento de las residencias Los Sauces, ubicadas en el sector Paseo Las Ferias de la ciudad de Mérida.
La revisión forense hecha por el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) determinó que Hernández murió de un infarto al corazón.
Por otra parte, Fapuv, Federación de Asociaciones de Profesores Universitarios de Venezuela, confirmó el lamentable hecho. "Dos reconocidos profesores, jubilados, con problemas de salud. Lo dieron todo en las aulas y la investigación y ahora deben acudir a la solidaridad para atender sus casos de salud", indicaron en su cuenta en Twitter.
"Un ejemplo de los precarios salarios y de un sistema de salud público casi nulo", manifestaron