Para la actual fecha de 2020, se puede decir que el crecimiento de las tecnologías de información y comunicación ha sido exponencial, como en cientos de ocasiones se ha mencionado. Sin embargo, en el caso de Venezuela, diríamos que no se les había dado la suficiente utilidad. Una de las razones que podemos argumentar es que, el proceso de enseñanza-aprendizaje en nuestro país, tiene como eje principal las clases directas con la presencia fisica del docente. Esto se ha visto afectado radicalmente tras la llegada de la pandemia mundial por coronavirus, lo que nos obliga a fomentar más asiduamente, el uso de las distintas herramientas tecnológicas: teléfonos inteligentes, los distintos equipos digitales y electrónicos para mantener y fortalecer la educación.
Estas herramientas no solo serán utilizadas por los estudiantes de educación primaria, secundaria y universitaria para que investiguen las actividades encomendadas por el profesor o para la búsqueda de alguna información necesaria, sino que también serán empleadas de manera frecuente en la comunicación con el docente, cobrando fuerte vigencia el correo electrónico como instrumento receptor de actividades y documentos elaborados por los estudiantes. En esta etapa serán de vital importancia las redes sociales: Twitter, los Blog educativos, el Whatsapp, canales trascendentes en la actualidad, para el fortalecimiento de la labor educativa.
Los venezolanos, a pesar de las debilidades que podamos tener en materia de comunicaciones en el ámbito digital, y de los problemas como nación, nos veremos fortalecidos en el terreno pedagógico, por lo que es sumamente significativo eliminar los prejuicios que como sociedad podamos tener a la hora de utilizar estas herramientas tecnológicas, fortalecer la educación y buscarle el lado positivo a las distintos conflictos.
Finalmente, esta situación nos obliga a actualizarnos en materia de tecnología educativa, estar al día con las novedades digitales y alcanzar un óptimo rendimiento académico en un contexto de calidad educativa.