La historia nos narra la caída de los imperios a través de los tiempos, aunque se dice que son los triunfadores quienes la escriben no se puede ocultar los hechos y las causas que la producen y todo apunta a la repetición de los mismos.
El expansionismo territorial hace honor al decir "quien mucho abarca... poco aprieta" es quizá la causa más poderosa y más oculta del principio decadente de un imperio; hablamos del auge, desarrollo y caída, donde siempre están de por medio las acciones de guerra que lo inician, las guerras de persuasión para mantenerlo y las guerras que al final lo exterminan, es la norma invariable hasta hoy.
En esta era del siglo XXI pudiéramos pensar que por el avanzado conocimiento científico y tecnológico de los pueblos -incluyendo los imperios- pudiéramos haber alcanzado un estado superior de madurez, conciencia y humanismo, sin embargo vemos que es todo lo contrario se acentúa la irracionalidad y nada ha cambiado, el uso como estrategia de falsos positivos, agresiones, invasiones, ingerencia, sanciones económicas, acciones de guerra con falsa bandera y otros, nos obliga a pensar que la historia se pudiera repetir y pronosticar así lo peor.
Chávez nos repetía hasta el cansancio "..si queremos la paz, debemos prepararnos para la guerra...", y prepararse para la guerra no significa que sea solo para defenderse, algunos politólogos dicen que la mejor defensa es el ataque, incluso en el juego ciencia de la guerra -Ajedrez- nos enseña que la mejor estrategia está basada en el ataque y la defensa.
El matoneo, la ingerencia y agresión de los imperios a los pueblos se basan principalmente en el miedo, pero cuando un pueblo decidido a ser libre se planta firme y de frente al poderoso enemigo con argumentos disuasivos y reales, este debería recular en sus intentos de agresión y detenerse a pensar, dado que tal actitud siembra la normal y elemental duda de qué ¡algo tiene si se atreve!, bastante se los advirtió Chávez, igual el presidente Maduro, sabemos Qué Hacer, Cómo, Con Quién, y por sobre todo, Tenemos Con Qué y ¡bastante!, (ver titular) - El que Entendió..., Entendió..! -. Hasta la próxima.