En los últimos 80 años, con la finalización de la segunda guerra mundial, los gobiernos estadounidenses se han caracterizados por un macabro cinismo imperial, cuando aseguraron hasta en las películas que solo ellos fueron los ganadores de la confrontación bélica desarrollada en territorio europeo, a pesar de que el ejército ruso tuvo 27 millones de bajas.
El otro caso de éste particular imperio, fue la cobarde acción de lanzar dos bombas atómicas contra la población civil japonesa, cuando ya había finalizado la segunda guerra mundial, y a partir de ese momento, han sido incontables las intervenciones armadas a todo lo largo y ancho del planeta tierra, acompañados por golpes de Estados, sanciones, bloqueos y cualquier otras formas ilegales de injerencismo.
Desde la llegada frente a las costas venezolanas de cualquier cantidad de buques de guerra con armamentos de todos los calibres, incluyendo el nuclear, surge una interrogante central: ¿cuáles son las verdaderas razones para que el gobierno estadounidense colocara una avanzada militar al sur del Mar Caribe?
El propósito antinarcótico es la justificación para haber realizado tamaña movilización con todos los costos y esfuerzos que implica trasladar a más de 4 mil soldados, para neutralizar a las bandas de narcotraficantes que operan en el Mar Caribe, para luego dirigirse a territorio estadounidense, ya que representa al país mayor consumidor de drogas en el mundo.
Eso significa que la anterior hipótesis presenta algunas debilidades argumentativas: 1.- el Mar Caribe no es la zona de desplazamiento de drogas, 2.- a través del Océano Pacífico es donde hay un mayor tránsito de sustancias ilegales, 3.- la pregunta estratégica: ¿Por qué el imperio no utiliza todo su poder armamentista para custodiar sus costas para así evitar la entrada de drogas a su territorio?
La otra hipótesis es que los buques de guerra colocados frente a las costas venezolanas, son para realizar una demostración de fuerza en su presunto patio trasero, dándoles un intimidatorio mensaje a los gobiernos que son hostiles al imperialismo estadounidense.
El objetivo político es para presionar al gobierno venezolano a que entregue el poder a la derecha, provocar una guerra civil o intervenir militarmente.