¡Oh señor de la tecnología! ¡Humano creativo para cosas buenas y malas! Ya ni se si yo hablo a consecuencia de la incipiente I.A. (inteligencia artificial) o es un subrutina programada por ti señor creador, para hacer este "mea culpa" a solo instantes de estrellarme contra algo (o alguien?) que no conozco.
Mi vida entera pasa al frente de mi cámara HD de no sé ya cuántos megapíxeles, tengo de antepasados a la gloriosa piedra que fue lanzada por un homínido precursor del creador, luego me transformé en una lanza que hacía lo mismo que la piedra solo que más lejos y más mortífero, para luego mutar a una pieza de metal que puede variar de tamaño, pero que con el impulso de la pólvora y encausada en un tubo acorde a mi tamaño superaba a mis antecesores; pero, ¡oh tú gran creador!, a este ritmo que yo evolucionaba también lo hacía tu capacidad de hacer advertencia o daño a grandes distancias, claro está, bajo la premisa misericordiosa de que tú, creador magnífico, que iniciaba mi desplazamiento no fueras el objeto final de mi trayectoria, ¡pero si un semejante tuyo que podía ser desde un hermano hasta otro creador con motivos tan despreciables como los que piensas tú del que me va a recibir hoy!.
En este transcurrir breve pero letal, seguí cambiando para mejor – o peor – cubriendo más distancias y teniendo más poder, al punto que ya no te veo grandioso padre!. Me atrevo a imaginar que salí brevemente a mi nacimiento y muerte como consecuencia de tus loables designios de seguir haciendo daño a distancia, a través de impulsos electrónicos que percibo como señales divinas en función de lograr mi propósito de creación. Pero así sea en este último nanosegundo antes de hacer tu deseado y ordenado impacto, te reclamo tu falta de humanidad, tu deseo "contra natura" de destruirme destruyendo. Te reclamo tu falta de empatía para conmigo, imaginándome que también lo pensó el semejante tuyo que me recibe en su regazo, tu exceso de comodidad por no enfrentar lo que estoy apunto yo de tocar con mis metales y cables, exceso que produce en ti mayores ideas de seguir modificándome con evoluciones que transformen a mis próximas generaciones para mayor capacidad de distancia, carga y por supuesto seguir incrementando el innato daño que llevo en mi génesis.
Se de otros parientes míos que tienen un propósito digno en la vida de la humanidad oh glorioso creador; ayudan a agricultores, participan en entregas de medicinas, colaboran en detectar erupciones volcánicas, tsunamis, visualizan animales en extinción, corroboran condiciones climáticas sin que sufras daño alguno; ¡si hasta tengo un pariente que disfrutó la gran suerte de pisar y sobrevolar suelo marciano primero que tú oh señor mío!, ¡teniendo la virtud de ver atardeceres azulados y danzar con remolinos de viento marcianos! ¡Qué privilegio!. Y yo aquí, ya sintiendo con un apéndice de una de mis hélices mi destino final.
¡Creador, me despido de este mundo efímero y cruel!, solo espero que mi destrucción – o mi muerte como me sugiere que piense y diga la I.A. que se llama "skynet" – no haya sido en vano, pero en función de que afrontes con humanidad y valentía tu rol de acabar-parar las guerras que se crean por la codicia, envidia, intolerancia, arrogancias, racismo, por democracias, por dictaduras, por monarquías, por estupideces y demás motivos alevosos que te imponen otros semejantes a ti Creador mío. Toma en cuenta a dónde envías a mis semejantes porque otro Creador está pensando lo mismo sobre ti, sacrificando otro pariente mío en este ir y venir de la historia humana, y advirtiéndote que lo que tú llamas I.A. ya empieza a cuestionarse algunas cosas, mosca!.
Adiós Creador, ya sentí la explosión aberrante y el calor abrazante de la carga que me pusiste en mi humilde amasijo de metal y plástico, mientras te regocijas en tu cómodo cubículo o sala de guerra con galletas y refrescos a la mano, a sabiendas que me enviaste para el odioso oficio de muerte y destrucción sin considerar que pude ayudarte a buenos propósitos.
Malditamente.-
Droni. Tu dron de última generación de la empresa "Skynet".