Recientemente se ha llevado a cabo en Moscú la “Conferencia de Prensa y línea directa anual”, en la que el presidente Vladimir Putin, se dedica a responder tanto cartas, videollamadas y preguntas de los periodistas de todo el inmenso territorio que comprende la nación de la Federación Rusa, en las que participan trabajadores, productores de pequeñas y medianas empresas, voluntaristas sociales, niños y hasta representantes de influyentes de redes sociales, entre otros miembros de la gigantesca comunidad nacional que agrupa a la ciudadanía de Rusia.
Un espacio de comunicación e información del que podemos encontrar similitudes, muy parecidas, por no decir, casi igual a lo que fue el “Aló Presidente” construido por el Comandante Chávez.
En una de las preguntas creada a través de un video que fue realizado por una niña rusa de ocho años, quien expresamente de forma natural en lo que confiere a la elocuencia infantil demostrada, manifiesta su auténtica preocupación acerca de comentarios que en su Escuela se discutieron durante una clase, en cuanto a lo siguiente:
“En mi Escuela hablamos acerca de la Inteligencia Artificial (IA) que pudiese reemplazar a mis abuelos y a mis padres, y a mí no me gustaría que pasara eso”. Luego del video de la niña, inmediatamente la producción de la Conferencia, inmediatamente colocó un video en el que aparecía un diseño de clon sobre la imagen de Vladimir Putin, creado con tecnología de la (IA). Vale decir que era exactamente igual.
Respondiendo Putin por medio de una consciente reflexión categórica de relevante valor humanístico y filosóficamente dialéctico materialista, expresando lo siguiente:
“Cuando la energía atómica se convirtió en una bomba, los líderes empezaron a negociar; lo mismo pasará con la Inteligencia Artificial (IA)”.
Ha lo que trayendo en alusión a la puesta de la política exterior del líder de la República Cooperativa de Guyana, Mohamed Irfaan Ali, en el marco de la reunión de alto nivel a realizarse en las próximas horas en San Vicente y las Granadinas, en conjunto con los demás actores internacionales que servirán de mediadores sobre en cuanto al Esequibo, por mencionar a uno de los más importantes de toda la región a nivel diplomático internacional como lo es la figura del ex ministro de Relaciones Exteriores y Defensa de Brasil, Celso Amorim, eminente representante del Palacio de Itamaraty.
En el que vale destacar en el marco del análisis geopolítico de carácter realista internacional, la defensa de la soberanía nacional que lleva a cuestas nuestro pueblo de Venezuela a través del presidente Maduro, no es una situación circunstancial y que únicamente no solo atiende al interés geoeconómico sobre la explotación de diversos recursos minerales que involucran al coltán, oro, diamante u otros derivados fundamentales para la industria tecnológica, espacial, nuclear y armamentística, además del caudal de hidrocarburos en la que directamente está involucrada la poderosa EXXON que representa los intereses directos del poder hegemónico mundial estadounidense conectado a la corporación multinacional de BlackRock que opera globalmente con 70 oficinas en 30 países y clientes en 100 países, administrador del grupo iShares de fondos cotizados en bolsa y, junto con The Vanguard Group y State Street.
La defensa de Venezuela sobre la Guayana Esequiba es trascendental porque geopolíticamente representa la cooperación mutua en interlocución con Brasil ya que el gigante comparte extensión fronteriza tanto con el Esequibo y con las demás Guyanas que a su vez comparten la salida directa hacia el este y el sur del océano Atlántico que Venezuela tiene y debe de defender como parte de su soberanía territorial sobre las aguas marítimas.
Así como también Rusia en un segundo plano pero sin dejar de ser importante, significa para Venezuela uno de sus principales aliados internacionales como gran potencia emergente y geoestratégica que apoya y defiende la perspectiva multipolar y policéntrica junto también, de igual manera, con China que tiene proyectos de exploración y explotación en la zona, siendo para Venezuela otro aliado fundamental dentro de sus relaciones bilaterales conjuntas en diversos componentes de materia comercial, producción petrolera, minera e impulso en los campos técnicos científicos, formativos y de diversificación del desarrollo de las fuerzas productivas; confluyendo en la extraordinaria síntesis del más relevante acrónimo (BRICS+) que puede existir en la era geopolítica mundial actual, en el que a mediano plazo seguramente Venezuela formará parte de este bloque, edificador de un nuevo orden mundial.
A su vez Venezuela y Brasil comparten fronteras con las naciones suramericanas caribeñas aledañas a Guyana, que son las vecinas, Surinam (que también reclama varias áreas territoriales situadas más allá de sus fronteras meridionales con Guyana y la Guayana Francesa), y Guayana Francesa (que es una región y departamento de ultramar de Francia, que forma parte de la Unión Europea). De tal manera que claramente, responden a intereses geopolíticos distintos y antagónicos a Venezuela porque responden a los intereses por un lado de la Commonwealth, en gran parte países (islas anglófonas y francesas) del CARICOM subordinadas a la Commonwealth Caribbean y por otro lado a la Unión Europea (particularmente a París, Ámsterdam y la City de Londres); es decir al bloque geopolítico anglosajón colonizador y unipolar en decadencia, jugando el papel de fieles sirvientes a la política exterior de alianza cruzada entre EEUU y la cipaya UE.
La gran política exterior que ha llevado Venezuela durante los últimos veinte años, ha sido persistente y consecuente conforme al ejemplo heredado por el proceso histórico de independencia desarrollado a lo largo de diferentes contextos históricos, representado en las mediaciones internacionales más connotadas, como lo es, el “Acuerdo de Ginebra”, establecido el 17 de febrero de 1966, en la que Reino Unido, reconoció que existe una controversia territorial pendiente por la Guayana Esequiba, acción que evidencia el carácter ilegal del Laudo Arbitral de 1899.
Comprende un margen de maniobras que avistó la Cancillería desde Caracas bajo el gobierno del presidente Hugo Chávez que se desarrollo en el marco de relajar las fuertes tensiones que se exaltaban hace diez años sobre las fronteras terrestres del Esequibo y en las aguas marítimas, como las que vale recordar en el 2013, violaban el espacio marítimo, el “Teknik Perdana, un barco panameño contratado por el gobierno guyanés y la petrolera Anadarko Petroleum Corporation que examinaban el fondo del mar, en preparación para una posible exploración de petróleo.”
https://www.bbc.com/mundo/noticias/2013/10/131014_venezuela_guyana_barco_disputa_dp
Actualmente el gobierno del presidente Maduro en continuidad del mismo espíritu y enfoque diplómatico de las Relaciones Internacionales desplegado por Chávez. Confirman las acertadas líneas de trabajo en la política exterior que impulsan y definen una sólida defensa de la soberanía territorial de nuestra nación. Creando el diseño del nuevo mapa de Venezuela que muestran los 159.542 km2 que conforman de manera física e integral el territorio de la Guayana Esequiba que nunca dejo de ser parte de la República Bolivariana de Venezuela.
Además de la materialización política estratégica puesta en función de la creación de la nueva provincia que es la Guayana Esequiba o como también podríamos dar cuenta desde la reivindicación histórica de la significativa “Octava Estrella”, gracias a Hugo Chávez, enmarcada en nuestros símbolos patrios, exaltada en el Escudo Guayanés que abarcaría el territorio del Estado Bolívar y la Guayana Esequiba, como se logra visualizar en el nuevo Mapa de Venezuela: https://albaciudad.org/wp-content/uploads/2023/12/MAPA-FISICO-RBV-2023-sin-tramado.pdf
Redefinen una extraordinaria política exterior y nacional, integrada por el Consejo de Defensa de la Nación, el Consejo Federal de Gobierno, el Consejo de Seguridad Nacional, anunciada por el presidente Nicolás Maduro y su designación como autoridad única provisional de Guayana Esequiba al mayor general y diputado, Alexis Rodríguez Cabello, quien asume un compromiso patriótico de defensa de la soberanía, incluyendo a los ciudadanos de las diversas comunidades que comparten fronteras en el ámbito geográfico espacial, junto el apoyo de las FANB y demás fuerzas políticas regionales la construcción de puentes de integración y unidad nacional a través del establecimiento de bases de cedulación, creación de Consejos Comunales, programas a corto y mediando de plazo de edificación de Casas culturales, Escuelas, Universidadesy hospitales.
En gran medida reforzarán y fortalecerán las acciones internacionales de mediación entre Caracas y Georgetown.
sergioconbolivar@gmail.com