11 de febrero de 2019.- Para el Frente Amplio Nacional Bolivariano (FANB), la supuesta ayuda humanitaria ofrecida por el gobierno de Estados Unidos ha servido para que la oposición y el gobierno manipulen al pueblo. Mientras la derecha se aprovecha de sus principales necesidades, entre ellas, alimentos y medicamentos, para hacer sentir la ineficacia del gobierno en este sentido, el gobierno lo hace para amedrentarlo, haciendo ver que ésta sería la excusa buscada por el imperialismo yanqui para invadir el territorio venezolano.
Así lo dieron a conocer Edwuard Zapata y Alexis Campos, voceros designados del Frente Amplio Nacional Bolivariano (FANB), quienes explicaron que, a pesar de los esfuerzos opositores y gubernamentales por convencer a los sectores populares respecto a su idoneidad para conducir los destinos del país, ha ocurrido todo lo contrario, en vista de la responsabilidad compartida de ambos en la generación de la crisis económica actual.
«Como Frente Amplio Nacional Bolivariano hemos sostenido públicamente que el Gobierno y los otros actores politiqueros de nuestra nación han mantenido una constante actuación a espaldas del Pueblo, así como también que éste es el único depositario del Poder Constituyente Originario y, por tanto, quien debe dirigir las instancias del poder constituido según sus propios intereses, en lugar de los intereses particulares de una minoría», adujo Zapata.
Para el vocero designado del FANB, resulta innegable la necesidad urgente de la transformación estructural del Estado, de manera que el protagonismo del poder popular soberano sea una realidad plena y no simplemente un elemento retórico más en boca de los falsos bolivarianos que integran el gobierno de Nicolás Maduro.
Agregó que igual cosa se puede apreciar en las filas de la derecha opositora respecto al ejercicio de la democracia, del cual excluyen la participación y el protagonismo del pueblo por calificarlo de incapaz, en términos de inferioridad y de desprecio que se asemejan mucho a los utilizados por los supremacistas blancos de Estados Unidos. «Para la dirigencia derechista, la democracia resulta adecuada, siempre y cuando ella sea quien mande y se beneficie de la renta petrolera, como ocurrió bajo los gobiernos puntofijistas», explicó Edwuard Zapata.
Por su parte, Alexis Campos mencionó que, a pesar de las dificultades experimentadas por la población venezolana, la presente coyuntura política requiere de la puesta en práctica de alternativas viables que trasciendan el marco de polarización representado por los factores de la oposición y el chavismo.
«Este es el momento de darle, como se dice popularmente, un parao a la partidocracia en un sentido general, por lo que no se puede caer en el juego de la oposición, respaldada por Washington y Bogotá, y el gobierno de Maduro, respaldado por Beijing y Moscú, puesto que ninguno de ellos está interesado en hacer posible un tipo de democracia en que la soberanía sea ejercida directamente por nuestro pueblo y no por delegación a través de partidos políticos que sólo responden a los intereses de su dirigencia», afirmó Campos.
Con este propósito, reveló el vocero designado del FANB, esta organización ha realizado una serie de reuniones con gremios y movimientos sociales a fin de armar una propuesta común que oriente las luchas populares en los actuales momentos, de modo que pueda superar la crisis moral, política y económica desencadenada por la corrupción y la ineptitud de quienes dirigen y pretenden dirigir a Venezuela. Reiteró que existen organizaciones sociales y políticas en las diferentes regiones del país con un alto compromiso de lucha y vocación patriótica que se han sumado a la propuesta de transformación estructural del Estado presentada por el Frente Amplio Nacional Bolivariano (FANB), lo que ha servido para enriquecer con sus aportes y observaciones el debate que vienen desarrollando desde el año pasado.
«Convocamos, desde ya, a todas las fuerzas revolucionarias y patriotas a emprender la lucha de forma conjunta, sin el sectarismo que caracteriza a los politiqueros chavistas y opositores, puesto que Venezuela se halla amenazada por partida doble por las potencias mundiales que ambicionan controlar la totalidad de sus recursos naturales estratégicos a través de sus lacayos locales. No podemos limitarnos a condenar la injerencia extranjera de un solo lado en tanto nos hacemos los locos en relación con aquella que, de una manera algo sutil, tiene los mismos objetivos que la otra», culminó diciendo Alexis Campos, vocero designado del FANB. -
