Caracas, 11 de diciembre de 2017.- El presidente de la República, Nicolás Maduro, expresó este domingo que quiere saludar y sentarse a hablar en persona con Julio Borges, coordinador nacional del partido Primero Justicia y uno de los integrantes de la oposición en la mesa de diálogo que se realiza en Santo Domingo, República Dominicana, con el Gobierno Nacional, infomó el presidente desde su centro de votación en Catia.

Desde el Liceo Miguel Antonio Caro de Caracas, tras ejercer su derecho al voto y ofrecer una rueda de prensa a los medios de comunicación presentes en este centro de votación dispuesto para los comicios municipales de este 10 de diciembre.

"Es una buena idea ir a República Dominicana a participar en el diálogo, yo quiero ver a Julio Borges, Julio Borges es una pieza de Washington, pero me gustaría ir a saludarlo, a sentarme a hablar con él, lo vamos a pensar, me parece buena idea, pero vamos a coordinarlo con el Presidente Danilo Medina, para ver si es el momento indicado", recalcó Maduro ante una de las preguntas efectuadas por una periodista en el lugar, quien le interrogó si estaría dispuesto a acudir al dialogó en la isla caribeña.

Sin embargo, el Presidente Maduro recordó que su voluntad siempre ha sido reunirse directamente con los voceros de la oposición venezolana para conseguir acuerdos y los mejores mecanismos para llevar tranquilidad y paz al pueblo.

"Se han negado a dialogar de manera directa conmigo, es un contrasentido, porque el acuerdo de República Dominicana lo va a firma es Nicolás Maduro Moros, y todos los temas los voy a autorizar como Jefe de Estado y de Gobierno de la Revolución Bolivariana", expresó.

Resaltó que a pesar de la negativa de Julio Borges y los demás miembros de la oposición en el diálogo, el próximo 15 de diciembre la delegación del Gobierno viajará una vez más a República Dominicana con el propósito de avanzar en los acuerdos para el encuentro nacional.

El jefe de Estado lamentó que la oposición no tome decisiones por su propia cuenta y tenga que depender de las directrices y órdenes del gobierno de los Estados Unidos, nación que actualmente mantiene un bloqueo económico y financiero impuesto contra el pueblo venezolano.

"Es vulgar la forma como dirigen desde Washington a la oposición venezolana, la dirigen como si fueran esclavos y borregos de ellos, a mi me da vergüenza y pena ajena ver como les dan órdenes (...) Es una vergüenza ver como desde el gobierno de Donald Trump tratan como borregos y manotean a la oposición venezolana", cuestionó Maduro.

El Presidente indicó que la oposición, tras negarse reiteradamente en participar en el diálogo político, decidió acudir a Dominicana luego que el Departamento de Estados del gobierno estadounidense les diera la orden afirmativa de que asistieran con la entrega de 1 millón de dólares.

"Les dieron 1 millón de dólares y les dijeron 'se van a República Dominicana a dialogar con Maduro'; se tuvieron que tragar las palabras que habían dicho. Julio Borges se repartió ese millón de dólares con Eudoro González, y Gustavo Velázquez", este último redactor del decreto que concedió el indulto al narcotraficante y representante del Cartel de Medellín en Venezuela, Larry Tovar Acuña.

El Presidente Maduro acotó que a pesar de que en la mesa de diálogo la oposició decidió llevar como negociadores a los empresarios financistas de Julio Borges y a personas vinculadas con el narcotráfico, y "patearon a los líderes jóvenes de la oposición", su disposición al diálogo se mantiene intacta porque es la única vía para alcanzar la paz y tranquilidad del pueblo.

Puso como ejemplo a Henry Ramos Allup, secretario general de Acción Democrática, el partido político con mayor peso en ese sector. "A Henry Ramos Allup no lo van a dejar ser candidato presidencial, ustedes van a saber por qué lo dije, porque en el Norte ya decidieron quién es su candidato presidencial".

"Ramos Allup te utilizaron a pesar que Acción Democrática es el principal partido de la oposición venezolana", expresó el jefe de Estado, quien también resaltó que partidos como Voluntad Popular y Primero Justicia están condenados a desaparecer del mapa político tras ser los principales protagonistas de la violencia desatada entre abril y julio de este 2017, que ocasionaron 121 personas fallecidas, miles de heridas, millonarias pérdidas y daños al patrimonio público y privado.