El Conuco: Un "sudaca" que puede salvar al Norte

(Dedicado al "Curraco", por su reciente vuelo al infinito)

En este mundo traidor, nada es verdad ni mentira; todo es según el color del cristal con que se mira.

Ramón de Campoamor

E

l canto de las aves, el frescor de la brisa, el rumor del mar entre las olas… ¡Cuánto llenan! Una estatua de bronce, un lingote de oro, una bala de plomo… ¡Cuánto pesan! Y cuánto daño pueden hacer, a pesar de ser objetos inertes, simples pedazos de metal. Pero la pregunta clave es: ¿Cuánto valen? Porque los primeros tres, quizás valen tanto como la bendición de una madre: Nada y mucho, simultáneamente. Depende del cristal de Campoamor.

Al querer responder esa pregunta, nos internamos en el territorio de la subjetividad; porque hay quienes darían lingotes de oro por sentir la alegría de un pájaro al cantar, pero quizás duden si les ofrecemos cambiar su estatua de bronce por el rumor del mar entre las olas. También hay quienes entre el frescor de la brisa, han sido fulminados por el rayo ígneo, pesado y letal de una bala de plomo, de bronce, o de hierro. Son ejemplos iconográficos de la tecnología de los metales asociada a la muerte, contra la alegre y diáfana vida al natural: ¡"Cultura" eurocéntrica predatoria!

Es por ello, que este humilde conuquero ha asumido como verdad axiomática, la afirmación de nuestro paisano biscucuyense, educador, artista, caficultor y guerrillero Argimiro Gabaldón: "Nosotros somos la vida y la alegría, en tremendo combate contra la muerte y la tristeza". Estamos irremediablemente convencidos, de que esa frase describe como ninguna otra, la pugna feroz entre el Norte depredador y un Sur que se aferra a la vida; por encima de todas las vicisitudes, sufrimientos y secuelas que el eurocentrismo y el imperialismo capitalista le han endilgado al Mundo, en el medio milenio más reciente.

En esa lucha a muerte, los señores feudales euro-centristas junto a su ególatra conducta expoliadora, decidieron perseverar en sus abusos; en contra de un mundo que perciben lleno de villanos, y por ende, uncidos al trabajo esclavo, obligados a cargar sobre sus lomos el yugo de la gleba y a tascar el freno de la censura previa, impuesta desde el primer día de la invasión (12-Oct-1492). Continúan además, forzándolos por medios cada día más sofisticados, a despreciar todo lo que huela a Naturaleza y a campo, satanizados bajo los criterios de La Ilustración y el materialismo dialéctico, pero… ¡No! La verdadera vida no es así. Gracias a Dios, es diferente. Esa necia conducta es afín con la muerte que cunde desde del Norte, sirviendo para corroborar el juicio del Comandante Chimiro, a favor del Sur.

Hasta hace pocos meses en manos de una traidora e impostora mujer que negaba los logros de su propio país, Bolivia se enorgullece hoy de sus recientes números macro-económicos, después de dos siglos de ser (junto al preterido y castigado Haití) la "Cenicienta" del continente; pero en una sola década logró convertirse en ejemplo, bajo la conducción de un "apestoso y satánico" indígena, el cual nació, creció y llegó a la presidencia de su país, bajo el concepto Suma Qamaña (Sumaq Káwsay); el cual conoce y ha practicado muy bien, permitiéndole gerenciar ejemplarmente a Bolivia, hasta lograr lo mencionado. Galeano habló claro en "Patas arriba" (Galeano, 2002):

Cegada por el elitismo, el racismo, el machismo, el militarismo, América sigue ignorando la plenitud que contiene. Y esto es dos veces cierto para el sur: América Latina cuenta con la más fabulosa diversidad humana y vegetal del planeta: Allí residen su fecundidad y su promesa.

El Dr. Vladímir M. Davidov, filósofo ruso, miembro de número de la Academia de Ciencias Rusa (ACR) y director del Instituto Latinoamericano de dicha ACR, afirma en su libro "Latinoamérica: Rutas del desarrollo y lazos con Rusia" (Davidov, 2016):

En estos tiempos de poderosa expansión de la modernización y de la llamada westernización, ora aquí, ora más allá – por paradójico que pueda parecer– dan nuevos brotes las raíces de civilizaciones autóctonas, poniendo de manifiesto la enorme fuerza de inercia de la determinación civilizacional (…) Es un inmenso "laboratorio mundial" de articulación de civilizaciones, no ya en las tinieblas del tiempo, sino en el periodo de la historia "escrita" y, por tanto, cognoscible con criterio bastante objetivo (…) En segundo lugar está la cuestión clave de la medida en que, "pasando página", el proceso histórico pentasecular desembocó (o todavía no ha desembocado) en una rama civilizacional latinoamericana.

Nos enorgullece enormemente coincidir con tan ilustres investigadores, porque estamos convencidos absolutamente de que, lo que Hugo Chávez llamó Socialismo del siglo XXI (el Socialismo Bolivariano, original de Venezuela); lo que el PRV (Partido de la Revolución Venezolana) denominó "Tercer Camino" o "Ruptura Creadora" y que todavía está por definirse bien para poder consolidarse; es la idea precursora de una Revolución que pronto sustituirá en el mundo, al racionalismo positivista y al "American way of life"; y junto con ellos sustituirá también, al materialismo dialéctico o Socialismo europeo (tal como lo conocemos hoy). Es la culminación de un ciclo de casi tres siglos.

Existen tres visiones cuyo espectro completo se inicia en el siglo XVIII: en "Colombeia", Miranda nos da la visión estratégica de la Patria Grande; en las "Sociedades Americanas", Simón Rodríguez nos da la visión educativa, social y económica, definiendo una ruta continental intentada por Bolívar en el siglo XIX; mientras que el PRV-Ruptura nos da la visión política revolucionaria (ideológicamente con su "Tercer Camino" y también con las armas en la mano) durante el siglo XX. Entrando el siglo XXI, Chávez logra tomar el poder en Venezuela y comienza a funcionar la propuesta integradora de la "Revolución Bonita". Apenas ahora se vislumbra el conjunto.

Todos los conceptos citados refuerzan mucho nuestra firme convicción con respecto al llamado Pachakútic (el V Baktún maya); queriendo significar el liderazgo planetario que Latinoamérica está llamada a ejercer y que ya se está atreviendo a practicar, de cara al futuro inmediato de una Humanidad, hoy agredida por el abominable coronavirus y los estertores del Capitalismo. Pero también defendida por los guerreros del arco iris, con su poesía ecologista adornada por penachos de plumas e imbuida en el espíritu caribe; que frente al imperio anterior, lanza en mano y a pecho abierto, resistió la invasión por varios siglos… ¡Y logró vencer! Ahora requiere consolidarse.

Cuando Abya Yala (la Patria Grande) comenzó a "plagarse" de gobiernos progresistas, lo cual constituye una amenaza mortal para el Capitalismo imperialista y globalizador; eso hizo entrar en pánico al perverso Hegemón y salió a relucir la letal respuesta constituida por el Decreto de Obama. Luego, Donald Trump lo refrendó con su mortífera sentencia: "All the options are on the table" y por ahora, ese gran hito histórico al cual nos referimos, está "en veremos" tratando de configurarse en medio de las barricadas y el humo de las guarimbas, amordazado por millones de tapa-bocas; pero las muchedumbres del mundo lo materializarán, con su obstinada rebeldía.

De esta novísima e insólita realidad, depende el nebuloso futuro de la roca sideral que nos mantiene vivos a todos y circulando vertiginosamente por la Vía Láctea, cual cosmonave en búsqueda del próximo agujero negro o del próximo quásar. Es una férrea resolución de Patria o muerte, de las que ya el Sur profundo se ha acostumbrado a asumir, durante siglos en resistencia… ¿Contaremos con la fe del resto del mundo? ¿O nos olvidamos del futuro y aceptamos ser todos, presa de los halcones?... ¿Quién ganará la Guerra de 5ta Generación, la guerra de valores? ¿La Europa modernizadora y su G-20, o los "indios salvajes" del Sur global, con cada familia resistiendo desde su conuco? …He aquí los cuatro puntos cardinales del futuro.

Alfredo Mendoza, conuquero

CI N° V-03.783.821