"Entre mitos y realidades, dos mundos silentes se mueven constantemente para hacer de sus vidas una utopía. Uno para atrapar la esperanza y los sueños de los humildes, el otro, siempre fiel a la lealtad de lo sagrado, a lo divino y humano. Esta historia siempre será contada, bajo dos percepciones" I.M.
Desde el norte, vinieron tormentas convertidas en tinieblas para apoderarse de la majestad de un suelo fértil
Por el sur, salieron los crepúsculos de la aurora, iluminando los rostros de un pueblo con el brillo de la esperanza.
Desde el norte, el ave fénix voló atraído por la tormenta queriendo atrapar y adueñarse de la existencia que habitaban los herederos de Suramérica.
Por el sur, se divisó un ave de la cordillera llamado Cóndor
Ambas se encontraron al centro del nuevo continente, en un mundo mágico llamado desde allende, pequeña Venecia, para dar testimonio del poder de cada una.
La del norte, bulliciosamente afanada dijo; yo soy un ave fabulosa que se consume por el fuego cada 500 años, y luego resurjo de las cenizas.
La del sur, respondió entusiasmadamente: yo vengo Por ahora, de las alturas de la Cordillera de los Andes, la columna vertebral del sur continente de la esperanza, desde los picos de una tierra que tocan el firmamento americano
El fénix en su prepotencia chilló que podía desaparecer como arte de magia y por eso era grande, y podía jactarse diciendo, yo soy un mito.
El cóndor a cambio, humilde y sencillamente replicó: yo soy real, el ave mas grande del planeta, Patrimonio de Suramérica, soy historia viva, no leyenda, ni fabula como tú te ufanas
Es por eso que a partir de ese encuentro, el ave fénix en vuelo atormentado surca desde entonces, los cielos de Suramérica, esperando al asecho de la partida de la historia inmortal del Cóndor
Y desde las alturas suramericanas, desde entonces, sobrevuela prodigiosamente la esperanza de la Patria Grande, acompañada del Dios eterno y sagrado, y de un cóndor llamado, Chávez
Nuestro legado… también es sagrado
