Estado Comunal: gobierno representativo. La democracia representativa

J.C.: De 193 países que componen la comunidad internacional, según la ONU, solo Venezuela, conforme a la constitución vigente, abolió el gobierno representativo e instituyéndose, en su lugar, la democracia participativa y protagónica. Uno pudiera preguntarse, no sin razón, si eso no es suficiente para que nuestro país sea considerado como una "amenaza inusual y extraordinaria" para el sistema de poder mundial? Tal atrevimiento, ¿No sería causa suficiente para asesinar a alguien o acabar con una nación entera?

B.C.: En efecto, la construcción del gobierno participativo y protagónico fue ideada por Chávez como un mecanismo para enfrentar al sistema de poder mundial y resistir sus embestidas impidiendo que ese sistema se apoderara de nuestras riquezas. Entregar el país es más fácil con la vigencia de un gobierno representativo, de un gobierno de elites que negocie los derechos de todos en función de sus propios intereses. Pero Chávez también estaba consciente que el Estado Comunal constituye una fase superior de la organización social del ser humano. Para nosotros, dicha fase no es más que el comunismo, el cual, más temprano que tarde, se concretará.

J.C.: La derecha internacional ha desempolvado la propaganda del "coco" del comunismo, calificando al comunismo y al socialismo como amenazas a la humanidad. En este sentido se han pronunciado tanto el presidente del Gobierno Imperial Capitalista Donald Trump, como su mayor lacayo y genuflexo Presidente de Brasil Jair Bolsonaro. En su oportunidad ésta propaganda buscaba mantener a Rusia a "raya" durante la guerra fría, era parte de la guerra fría en su enfoque táctico Psicológico que a la vez dio argumentos al imperio norteamericano para invadir Centro América en los sesenta y ochenta y minar, a Suramérica, de dictaduras a través del Plan Cóndor. ¿Tendrá el mismo efecto esa propaganda en ésta fase de movilizaciones sociales que se producen en la actualidad como los casos de Chile, Colombia, Francia, etc., para calmar o reprimir esas luchas, como sucedió en ese pasado reciente?

B.C.: En realidad no es nueva esa maniobra. Ello ha sido el fundamento para atacar la revolución Bolivariana, la revolución Ciudadana en Ecuador, el progresismo en Brasil con Lula, en Uruguay con el Frente Amplio y contra Argentina de los Kirchner. Más, lo cierto es que la tendencia es regresar a las democracias progresistas como viene sucediendo en Argentina, pronto el MAS en Bolivia y esperando lo que necesariamente pasará en Ecuador y Chile donde soplan vientos similares. El "coco" sobre el Comunismo no va a tener los mismos efectos de aceptación y justificación que durante la guerra fría, porque los ejemplos que ha dejado la derecha en estos últimos años que gobernaron a países como Argentina, Brasil, Ecuador o su ejemplo con el golpe de estado en Bolivia, o lo que sucede en Colombia y Chile cuyos gobiernos expresan la práctica del neoliberalismo fascista, no se lo permiten.

Sin embargo, además del coco del comunismo han puesto en escena otras formas de intimidar, como es que las luchas del pueblo están integradas por extraterrestres o contra la voluntad de Dios, esta última ideología impuesta por el protestantismo y los evangelistas pentecostales; los sionistas, en pocas palabras. Piñera, sin embargo, es más claro en su posición de clase y afirma: "estamos en presencia de un enemigo formidable". No dice que sea el comunismo ni el socialismo. Claro, es el pueblo que está enfrentado a la clase a la cual él pertenece y representa muy bien. Es una lucha de clases.

J. C.: ¿Son lo términos socialismo y comunismo, entonces, obsoletos como alternativas al capitalismo o neoliberalismo en ésta fase de la historia de la lucha de clases?

B.C.: No. Por el contrario, para la izquierda ahora es cuando tiene mayor significado, pero a mi juicio es necesario, dado el momento historio y los avances de la sociedad, actualizar sus definiciones, si es que estos términos han tenido definiciones. Creemos que es necesario, para no hacer calcos o copias, como afirmaba Chávez citando a José Carlos Mariátegui, crear nuestros propios conceptos o categorías. Porque incluso, es probable que aun siendo los conceptos de socialismo y comunismos acertados para trasladarlos y aplicarlos a la definición de la historia del presente, hayan sido objeto de interpretaciones erróneas o incluso, falsas?

Con el permiso de los Marxistas, Marxianos y Marxologos, parafraseando a Ludovico Silva, nos vamos a permitir hacer algunas consideraciones y reflexiones sobre estos conceptos. Entendemos por Socialismo una aspiración humana, incluso relacionada con los instintos del ser humano y es el de vivir en condiciones de placer, de bienestar. Si eso no fuese así, la vida en la tierra, como la conocemos hoy día, no existiría. Sigmund Freud hablaba de un instinto de placer en el ser humano que tenía como fin el de procurar el placer y evitar el sufrimiento. Erick Fromm por su parte, lo asociaba con la naturaleza humana. Partiendo desde allí, el socialismo es una aspiración del hombre a vivir con la posibilidad de la mayor suma de felicidad posible, en condiciones de igualdad, de justicia individual y social, que le sea posible desarrollar todo su potencial productivo creador para su propio bien y en solidaridad con el prójimo, eso es el socialismo y ha estado en el hombre, como naturaleza humana, desde su aparición en la prehistoria.

J.C.: ¿Ahora bien, porque no se ha cumplido con esa aspiración luego de más de entre 4.500 o 7mil años de historia (Según los historiadores) o, 2 mil años, si solo tomamos en cuenta la denominada era Cristiana?. ¿Porque la ética cristiana que enarbola principios socialistas, como se concibe en los evangelios, en el nuevo testamento, luego de más de 2000 años no se ha reproducido como una conducta ordinaria de los individuos en sociedad, es decir, porque la sociedad actual no es éticamente cristiana, por ejemplo?

B.C.: Porque, como expone la ciencia marxista, es necesario construir las condiciones materiales para que se pueda reproducir la ética socialista, para que sea ordinario el comportamiento ético socialista de los individuos en la sociedad. Esas estructuras materiales, en nuestro criterio, son tres: La jurídica, la burocrática y por último, la económica.

J. C.: Allí se hace referencia a la base económica de la sociedad que es la que reproduce los valores de una sociedad determinada, la base económica capitalista reproduce los valores anti Cristianos, por ejemplo ¿correcto? Pero ha sido imposible cambiar las bases del sistema productivo que soportan al sistema capitalista y por el contrario estamos mutando de la fase capitalista unipolar monopólica a la fase capitalista multipolar y multicéntrica que, para mí, la constituye la Ruta y Cinturón de la Seda y el traslado del centro de la economía mundial de New York a Shanghái.

B.C.: Como afirmó Marx, el sistema capitalista debe desarrollar todas sus potencialidades para que de sus propias entrañas se desprenda la nueva sociedad. Es como las chicharas, el agotado e inútil cascaron capitalista se abrirá para dar paso a la cigarra, para volar y cantar, o como diría la Rosa Luxemburgo "A su tiempo el nuevo grano sale de la viaja vaina". La historia de la humanidad es la historia de la lucha de clases, no para cambiar los sistemas o modelos de producción sino, hasta ahora, para acceder al poder político. Los sistemas de producción evolucionan como consecuencia misma del desarrollo de la fuerza de trabajo, de las fuerzas productivas que a su vez desarrollan los demás elementos del capital y cuando esas categoría están desarrolladas se da paso, inadvertidamente para el pueblo llano, a una nueva forma de explotación. Las revoluciones, hasta ahora, han hecho posible el engendro de esas nuevas estructuras y por supuesto, el mantenimiento de la explotación, de donde nace la asunción de un nuevo gobierno que garantiza la existencia de esa explotación.

Para nosotros, el problema radica fundamental y esencialmente en la premisa según la cual "quien controla el Pode Político (La fuerza y autoridad del Estado), controla el sistema y relaciones de producción".

J.C.: Ya hemos dicho que el socialismo es una aspiración del hombre cuyo contenido es la felicidad y bienestar, lo más posible. Hemos dicho que eso hasta ahora no ha sido posible sino para una pequeña fracción de la sociedad, los dueños de los medios de producción en donde el gobierno funge de guardia pretoriana, es decir, que garantiza la administración de los intereses de la burguesía vieja o nueva o cuando es la misma burguesía la que ostenta directamente el poder, como es el caso de Chile. Entonces como se podrá concretar esa aspiración?

B.C.: Con la construcción de estructuras de poder que hagan posible esa aspiración. Esas estructuras materiales, como dijimos antes, son tres: La jurídica, la burocrática y por último la económica. La configuración concreta de estas tres figuras es lo que Chávez denominó Estado Comunal. Para nosotros, Estado Comunal y Comunismo significan lo mismo, sobre todo porque tienen el mismo contenido e igual propósito. El Estado Comunal se fundamenta organizativamente en Comunas territoriales por identidad geográfica y productiva y, la sociedad que debe reproducir la vida en comunidad, es la socialista.

J.C.: ¿En 20 años de revolución hemos avanzado en la construcción del Estado Comunal, en la construcción del Comunismo, se ha dado paso a estas tres estructuras: La jurídica, la burocrática y la económica?

B.C.: De las tres estructuras solo un aspecto o pocos aspectos de la jurídica se ha materializado. Las restantes no portan en el escenario de la intención política ni siquiera como debate. Con la vigencia de la constitución del 99 se derogó la existencia del Gobierno Representativo el cual estaba contenido en el artículo 3 de la Constitución del 61. El nuevo texto constitucional sustituye el gobierno representativo por el protagónico y participativo, tal como se contempla en su preámbulo, así como en el artículo 6. En el preámbulo se expone y ordena que el pueblo de Venezuela decreta la nueva constitución "....con el fin de refundar la República para establecer una sociedad democrática, participativa y protagónica..." Tal disposición del pueblo constituyente queda reafirmada en al artículo 6 en estos términos: "El gobierno de la República Bolivariana de Venezuela y de las entidades políticas que la componen es y será siempre, democrático, participativo...." A pesar de ese mandato constitucional el gobierno se sigue organizando bajo los parámetros del gobierno representativo y elude dar paso al participativo y protagónico. Este fue el primer paso en lo referente a la construcción de la estructura jurídica.

J.C.: Seguramente se considera que no están dadas las condiciones para dar ese paso, pues si lo diéramos, nos colocaríamos en situación de fragilidad frente al gobierno del imperio capitalista (USA). No lo crees así?

B.C.: De seguro que no es así. Conforme al pensamiento y accionar de Chávez, lo cual dejó claro en todas su presentaciones, ese temor estaba muy lejos. Temor había si, en que no se lograse entender la necesidad de la construcción del Estado Comunal. Ello quedó expuesto, con expresión de profunda desesperación en su Golpe de Timón al expresar "Comuna o Nada", como decir, patria o muerte (o es la patria o es la muerte) o, socialismo o barbarie. En la práctica, para hacer efectivo el Estado Comunal, Chávez propuso la reforma de 33 artículos de la constitución en el 2006, en la cual se incluía lo que llamó La Nueva Geometría del Poder, es decir, la nueva estructura burocrática para el ejercicio del Gobierno Participativo y Protagónico o en otras palabras, la estructura burocrática del Estado Comunal. Este fue otro de los pasos para la construcción de la estructura jurídica revolucionaria.

J.C.: Pero el pueblo dijo no a esa propuesta de reforma. Chávez perdió.

B.C.: Yo creo que Chávez cometió un error y se dejó convencer de llevar la reforma de 33 artículos a 66. Esos 33 restantes fue lo que desconfiguró la propuesta, incluso, el debate no se centró nunca en la nueva geometría del poder, que no interesaba por cierto, a la burocracia representativa de la época, sino en la propiedad. Hasta el lumpen cuestionaba aquella mescolanza relativa a las definiciones de propiedad privada, individual, colectiva, social, etc.

J.C.: No fue posible pasar a la segunda estructura material, es decir a la construcción y consolidación del aparato burocrático del Gobierno Comunal, es decir, a las estructuras del Estado Comunal propiamente dicha. Entonces, si no fue aprobada la reforma que contenía la nueva distribución político territorial y por tanto la nueva burocracia del Estado Comunal que diera paso al ejercicio del gobierno participativo y protagónico, ¿ Se necesitaría que la nueva constitución lo incluyera, la que se redacta actualmente en la ANC?

B.C.: Sería lo ideal para con ello, no solo honrar la memoria del mayor estadista a nivel mundial de los últimos cien años, sino, esencialmente, para garantizar la materialización del socialismo, de la ética cristiana, del humanismo como alternativa al sistema capitalista. Sin embargo, el mandato del constituyente del 99 es el de materializar el gobierno participativo y protagónico en todas las instancias de poder; es un mandato popular que no se ha acatado y éste mandato se acata a través de leyes ejecutivas que delimiten y fije competencias. Es por ello que Chávez audaz e inteligentemente, crea las leyes del Poder Popular que ordena la trasferencia del poder al pueblo y la creación del Estado Comunal. Dichas leyes son promulgadas con el carácter de leyes orgánicas, es decir, que tiene carácter constitucional, de interpretación progresiva porque contienen regulaciones sobre derechos humanos. Por último y para rematar, Chávez presenta el Plan de la Patria que luego se convierte en ley en el cual, en su primer objetivo histórico, ordena la trasferencia del poder al pueblo. Los objetivos particulares contenidos en el objetivo 1.1.3 (1.1.3.1, 1.1.3.2 y 1.1.3.3) van dirigidos a desarrollar el poder popular, las organizaciones populares y la trasferencia al poder popular de competencia y atribuciones del poder público nacional, regional y municipal. En este sentido el objetivo 1.1.4 está direccionado a preservar y profundizar los espacios de gobierno regional y local para profundizar la restitución del poder al pueblo.

J. C.: De todo lo anterior se entiende, que para llevar las aspiraciones del ideal socialista a la práctica es necesario el fundamento jurídico legal y constitucional que ya lo tenemos. Tenemos una orden Popular de organizar la burocracia del estado a través del gobierno participativo y protagónico conforme el constituyente del 99 y tenemos todo un marco legal, un sistema o red jurídico que permite avanzar al Estado Comunal. ¿Qué se necesita entonces para concretar ese estado comunal?

B.C.: Voluntad política o que sea el Poder Originario, mediante la violencia legítima, para hacerlo realidad. Recordemos que el Poder Constituyente Originario se manifiesta cuando existe una crisis política, y la permanencia del Estado o Gobierno Representativo es, en sí, una crisis que no se puede prolongar. ¿Que aspira la sociedad chilena y la colombiana (incluso la nuestra), si uno oye las declaraciones de los manifestantes? La participación y protagonismo en los asuntos públicos, el control sobre la actividad y funcionamiento de la administración de la burocracia gobernativa de una manera directa, por eso es que los expertos hablan de " una crisis institucional, una crisis de representación, que los ciudadanos no se ven representados", pero insisten en que el problema se resuelve ampliando más el gobierno de la representación, cuando lo natural es darle el poder al pueblo mediante el gobierno representativo y protagónico.

La irrupción del Poder Originario no sería necesaria, pues como ya hemos afirmado, la burocracia actual tiene todas las armas jurídicas y el ejercicio del poder para avanzar al Estado Comunal en paz.

J.C.: Sin el Estado Comunal no sería posible la concreción de la última estructura, es decir, la estructura económica? ¿Correcto?

B.C.: Construidas y puestas en vigencia las estructuras del Estado Comunal en su división político territorial, así como garantizada la ejecución directa del gobierno popular, es decir, del gobierno participativo y protagónico, el control sobre el sistema de producción será del pueblo y no de las elites. Construidas y concretadas la nueva burocracia del Poder Popular, del Estado Comunal, el control, fiscalización, vigilancia y capacidad de sanción, será ejercido, no por las elites representativas sino por el gobierno popular, por el Gobierno Comunal. Este aspecto es importante porque no se trata de la apropiación por parte del gobierno representativo de los medios de producción como tampoco del gobierno comunal sobre los medios de producción, sino del control efectivo de todos los ámbitos del sistema de producción por parte del Poder Comunal. La garantía del control sumiso y subordinado del poder representativo sobre el sistema de producción pasará a manos del poder popular, sin necesidad de expropiaciones. La expropiación de los medios de producción en manos de los privados con fundamento en la apropiación ilegal de la riqueza, no será en una primera fase del comunismo, una necesidad prioritaria.

Construidas y consolidada la burocracia del Poder Popular, del Estado Comunal, la fiscalización, el control y poder de sanción se ejercería y ejecutaría directamente por el pueblo y no por sus representantes. Pongamos por ejemplo SUNDDE, un organismo creado por el poder ejecutivo nacional, diseñado para garantizar sus propios intereses que responden a la voluntad del gobierno nacional. En un Estado Comunal, organismos como éste, los crearían las entidades comunales, lo que hoy se conoce como poder municipal.

Conclusión:

La producción o sistema de producción no es el problema fundamental en esta primera fase de la evolución hacia el socialismo, sino su control y no solo el control, lo importante es quien controla ese sistema: El Poder Comunal. Quien controle el sistema de producción, controla las relaciones sociales de producción, controla al individuo, controla la sociedad. La aspiración al socialismo, como aspiración, es una constante desde el inicio del hombre y la construcción de las condiciones materiales es una revolución permanente. A medida que se crean nuevas condiciones materiales y se satisfacen parte de las aspiraciones del hombre, nacen otras necesidades.

Correo electrónico: blancacenteno885@gmail.com



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