Así gritaron anoche los grupos económicos tras oir los anuncios de ayer del presidente Nicolas Maduro, relacionados con la aplicación de la reconversión del cono monetario a partir del 20 A.

Al respecto tenemos que hacer algunas apreciaciones:

1) El atentado contra la vida del Presidente, el alto mando militar y los poderes públicos, sin lugar a dudas tiene relación directa con la determinación del gobierno de hacer realidad las medidas de carácter económicas, con las cuales Maduro pretende romper el espinazo a los promotores de la guerra económica.

2) Son los mismos actores y factores de la oligarquía criolla y bogotana que estuvieron detrás del golpe de estado contra el Comandante Chávez el 11 A del 2002.

3) Las Leyes de Tierra, Trabajo e Hidrocarburos fueron el detonante para que dichos sectores económicos y políticos, desataran toda su furia contra el gobierno del Comandante Chávez, a quien también tildaron de loco, por haberse atrevido a desafiar la ira de los poderosos representantes de los intereses locales e internacionales, que por siglos habían dominado a su antojo la vida económica, social y política de Venezuela.

4) Hoy estamos en presencia del mismo escenario y con los mismos actores enfrentados a las pretensiones del Presidente Nicolás Maduro de voltear la tortilla.

El solo hecho de anunciar las medidas económicas, los condujo a la descabellada idea de acudir al magnicidio en un intento fallido para impedir que se materialice esta locura que intenta cometer Maduro.

5) Si unimos estos criterios, concluiríamos que este país entro en una etapa de locura total, por un lado el gobierno se volvió loco al intentar poner orden en este desastre dejado por la guerra económica, impulsada por los mismos sectores que ahora pegan el grito al cielo pidiendo que lo libren de las locuras de Maduro, pero por otro lado, ellos acuden a la locura de querer matar a un montón de gente y llevarnos a una guerra civil, por el solo hecho de que a Maduro le entro la locura de acabar con esta locura de precios con los cuales dichos sectores de la oligarquía están matando al pueblo de hambre.

Si hubiese que valorar ambas conductas abría que llegar a la conclusión en que es preferible que Maduro se vuelva loco y nos saque de esta locura en la que nos metió la oligarquía empresarial y comercial, la que en su afán de salir de Maduro, quieren acabar con el país, como si todos los venezolanos fuéramos locos.

7) Ahora bien si esta reacción de los grupos oligárquicos del sector empresarial y comercial es solo por los anuncios, de que no serán capaces, cuando comiencen a producir efecto las locuras de Maduro , pues me imagino que entraran en la locura total.

El poco amor que estos grupos tienen por el país los puede conducir a los extremos de la locura, sin importarle para nada las consecuencias que sus actos terroristas puedan ocasionar a la nación.

País que de haber contado con una clase productora con sentido nacionalista, no hubiesen procedido como lo han hecho, pretendiendo regalar nuestras riquezas, la independencia y la soberanía de nuestro país, al poderoso imperio norteamericano a cambio de seguir disfrutando de los privilegios a manos llena , mientras el pueblo se ahoga en la miseria.

Por supuesto que una conducta así, vuelve loco a cualquier gobernante que haya entendido que esos privilegios no pueden estar por encima de los supremos intereses de un país, que fue construido con el sacrificio de grandes hombres y mujeres que se desprendieron de todo para darnos la libertad que hoy tenemos.

Otra de las locuras que tendrían el apoyo de la población seria que Maduro tome la decisión arrecha de congelar los precios por el mismo tiempo que tienen los empresarios y comerciantes robándole el salario a los trabajadores y la pensión a los pobre viejitos con su descarada hiperespeculacion.

Otra de las locuras que también recibiría el apoyo irrestricto de los adultos mayores, seria que Maduro en un acto de locura decrete una pensión digna para los abuelos que le alcance para pagar su comida, la medicina el pasaje, vestido y calzado con lo cual pasarían a disfrutar de los privilegios que por tantos años les fue negado por los grupos de la oligarquía que se apoderaron de los beneficios de la renta petrolera.

Y la peor de la locura que le pueda ocurrir a Maduro es que aprovechando el anclaje del bolívar soberano al petro decretara que el salario mínimo de un trabajador pase de 3 millones actuales al valor de un petro convertible en bolívares soberano.

Y la última de todas las locuras es que mande a construir una cárcel en el sitio más lejano del estado apure, donde meter a tantos ladrones, corruptos tanto del gobierno como de la oposición, especuladores, acaparadores, bachaqueros y terroristas, para que paguen todos los sufrimientos que les han hecho padecer al pueblo venezolano.

De allí que si por un momento nuestro presidente Nicolás Maduro pierde la compostura que solían tener los gobernantes antes de Chávez y se lanza en a una onda de locuras y le pone fin a las ambiciones de esta casta de "políticos" "empresarios" "comerciantes "corruptos, miserables, psicópatas y aberrados mentales, sería uno de los tantos que gritaría bienvenidas las locuras de Maduro.

Estoy seguro que muchos de los venezolanos que estaban en el aeropuerto dispuestos a abandonar el país o que se encontraban en la frontera con Colombia o Brasil cuando oyeron las medidas anunciadas por el causante de "todos sus males" se regresaron y hoy como otros tantos están a la espera de los otros anuncios de las tantas locuras que se le han metido en la cabeza a maduro, para salir de esta locura, las cuales hizo que los oligarcas y opositores recalcitrantes cuando ayer lo estaban oyendo, se pusieron las manos en la cabeza y gritaban ¡ "Maduro se volvió loco"¡

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