Como una buena noticia, recibimos todas las venezolanas y los venezolanos, el anuncio hecho por el presidente Nicolás Maduro de elaborar el Plan de la Patria 2019-2025, con la participación de todos los sectores de nuestra sociedad. Según Maduro: "Este plan debe continuar el legado del Comandante Chávez y por eso quiero destacar el tercer objetivo histórico de su documento que representa, a mi juicio, el reto más importante que debemos lograr: convertir a Venezuela en un país potencia en lo social, lo económico y lo político…"
Esta propuesta, sin lugar a dudas, es el inicio de un camino de esperanzas, para que sea el mismo pueblo quien diseñe su futuro plasmando sus anhelos para el modelo de Patria que soñó nuestro Comandante Chávez. Con la finalidad de lograr este cometido, todos debemos aportar nuestro granito de arena a fin de delinear los instrumentos de protección social para protegernos contra los ataques que la derecha nacional e internacional pretende seguir implementando a través de la guerra económica que desarrollan para destruir a la nación.
Para nadie es un secreto que los propulsores de esta guerra económica, son integrantes de una oposición sin propuestas que de modo impresionante viene de acumular derrotas consecutivas durante todo el año 2017 y simplemente intenta seguir atacando la moral del pueblo. Por eso, debemos construir un plan que contenga los elementos necesarios para atender las exigencias de los pobladores, entre las que figuran el ataque inclemente a la guerra económica, a la corrupción y a las concesiones y prebendas de algunas castas de privilegiados que han medrado, desafortunadamente, a la sombra de la Revolución.
A continuación presento algunos puntos importantes que a mi parecer debería contener el Plan de la Patria:
-Solución urgente al problema del efectivo.
-Ataque a la especulación, la usura, el sobreprecio, el acaparamiento y ocultamiento de productos alimenticios, repuestos y bienes.
-Simplificación de los trámites y procesos de la administración pública, la desburocratización de la política y las instituciones.
-Creación de nuestro propio modelo, un sistema económico productivo y diversificado que destierre el modelo rentista.
Y la lista se queda corta, por la falta de espacio; por eso se trata de construir una propuesta colectiva en la cual prive el sentido común de las venezolanas y los venezolanos, sin otro afán que el de fortalecer a la Revolución para que la Patria que anhelamos no sucumba en las manos de los aprovechadores de siempre.
