Una sociedad que insiste en arruinarse...

Habitamos en una sociedad llena de demonios, los cuales minuto a minuto se afanan en hacernos tormentoso el presente, a la vez que nos angustian infundiendo sobre nosotros visiones de un aciago porvenir.

La corrupción sin duda alguna, y aunque muchos de mis camaradas –partidistas hasta los tuétanos- declaran que reconocer esto sería entregarle poder a nuestros adversarios, es el peor demonio que históricamente ha habitado ¡y habita! dentro de nuestras instituciones; más aún, en el núcleo de nuestra sociedad venezolana.

Tal es la gravedad de esta afección ciudadana, que podría definirse como una conducta subyacente en muchos individuos. Los cuales responden de forma espontánea a una serie de automatismos perversos, que finalmente sumergen a la sociedad en un completo desastre.

Hubo quien dijo: "La corrupción es el impuesto de los pobres". Muy cierta esta lucubre frase, pero sólo si analizamos a la corrupción que desde hace décadas se encuentra enquistada en nuestras estructuras gubernamentales. ¿Pero qué sucede cuando es la misma sociedad la que insiste en arruinarse? Cuando ésta actúa como su propio verdugo…

Hugo Chávez, Bolivariano hasta lo más profundo de sus entrañas, se consagró por completo en brindar la mayor suma de felicidad posible, la mayor suma de seguridad social y la mayor suma de estabilidad política a todo el Pueblo Venezolano. Agotó hasta su último aliento en ello. Y sin vacilar, sin duda alguna, estoy seguro de que logró su propósito!

Pero, "cuando no has luchado por algo, es fácil dejarlo ir". Muchos no entendieron el pensamiento ni las acciones de este gigante. Derrochan y deprecian los innumerables logros alcanzados. Cuales sociópatas, se benefician de importantes inversiones sociales, mientras entre ellos se usurean apartamentos… casas… carros… electrodomésticos… medicinas… alimentos… y hasta el papel higiénico con el que limpian sus desechos.

Es esta misma sociedad obcecada en destruirse, semejante a los empresarios que destruyen al país con sus crueles maniobras de esta guerra económica que padecemos, la que desde dentro o fuera de nuestras filas (opositores o "supuestos camaradas") pisotea hoy en día los esfuerzos y logros del Presidente Nicolás Maduro Moros; quien sin descanso y de incalculables maneras, ejecuta acciones para garantizar el bienestar de todas y todos. Es así!!!

Una sociedad deshonesta, no es una nimiedad. ¡En lo absoluto! Es una peste endémica que gangrena todo a su paso.

La corrupción dentro de nuestras instituciones no debe tolerarse por ningún motivo. Es obligación del Estado tomar acciones para atacarla y erradicarla. ¡¡¡Y vaya que el Gobierno Revolucionario así lo ha hecho!!! O les pregunto: ¿Actualmente no hay más Fiscales en el Ministerio Público de los que había hace dieciocho años atrás? ¿Más Tribunales? ¿Más Jueces? ¿No existen hoy en día nuevos o reestructurados cuerpos policiales municipales y estadales? ¿Con más Policías? ¿El crecimiento no ha sido excepcional en la nómina y logística de nuestra Fuerza Armada Nacional Bolivariana? ¿Y dónde dejamos a la nueva Milicia Bolivariana?.

Sumado a esto, tenemos la creación de nuevos organismos como la P.N.B., la SUNDDE, el SUNAGRO, el Cuerpo de Inspectores del Despacho de la Presidencia; y otros ampliados y reestructurados como el SEBIN, el C.I.C.P.C., la DGCIM, el SENIAT, la Contraloría General de la República, etc.

Y finalmente, lo más valioso! El poder transferido al Pueblo en Comunas… Consejos Comunales… Consejos de Trabajadores… Consejos Campesinos… etc.

Poseemos toda una amplia red de supervisión, con grandes infraestructuras, adecuada logística, amparada por decenas de leyes y reglamentos, y compuesta por cientos de miles de hombres y mujeres. Un esfuerzo extraordinario, que hace inverosímil comprender, las razones de cómo todos nosotros podemos consentir tan voraz especulación en cada calle, barrio, sector, avenida o ciudad de nuestro país. O SENCILLAMENTE SOMOS IMBÉCILES, O SENCILLAMENTE SOMOS CORRUPTOS TODOS.

Todas esas numerosas entidades, promovidas o establecidas por el Ejecutivo Nacional, para ejercer el control, la seguridad y la justicia, necesarios en la protección de todo un Pueblo ¿Quiénes las conforman? Simples ciudadanos de uniformes y carnés, hombres y mujeres de libre albedrío como cualquiera de nosotros. Y es sólo en ellos, donde yace la decisión de pertenecer o no a una sociedad destructiva de sí misma.

Indudablemente –y antes de ser acusado por alguno de los míos de revolver el excremento para que apeste-, en las empresas privadas, de producción o de servicios, ocurre exactamente lo mismo. Es claro que allí convive parte de esta sociedad viciada, a la cual no le interesa si su patrón conspira o no en contra del Gobierno, ya que estos se encuentran contaminados por sí solos, oprimiendo con sus acciones al resto de sus conciudadanos que claman por una plena satisfacción de sus necesidades.

Desde luego, no falta quien hundido en la ignorancia sólo culpa al Presidente de cuanto incidente ocurre en el país. Sin aceptar o entender que esta decadencia moral jamás podría resolverla un solo hombre. Como individuos miembros de un extenso tejido social, tenemos la obligación de ejecutar la parte que nos corresponde; aunque ésta únicamente sea, respetar los márgenes de la ética y la legalidad.

Reflexionemos… Seamos sensatos… En nosotros, y en la adecuada educación que le otorgamos a nuestros hijos, está el antídoto preciso para esta calamidad.

Camaradas… Hermanos de lucha… Con Claridad y Lealtad Revolucionaria, es nuestra obligación realizar un imperioso llamado a todas y todos. ¡¡¡El combate debe ser incansable en la defensa de todo lo que mucho nos ha costado!!! Emulemos y valoremos la tenacidad y perseverancia de nuestro Comandante Hugo Rafael Chávez Frías, quien a pesar de atravesar por las peores dificultades, jamás abandonó la lucha!!!

El azote de la corrupción en Venezuela, debe ser erradicado tanto en el sector público como en el privado. Sólo así, los bebés que nacen hoy, los niños y jóvenes del presente, y nosotros –tal vez ya en el ocaso de nuestras vidas-, viviremos la Patria por la que se consagraron Bolívar y Chávez.

Con Claridad y Lealtad Revolucionaria…!

Chávez Vive…!



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1123 veces.



Jabert E Viñas


Visite el perfil de Jabert E Viñas para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: