Maduro, en la arena política nacional, referirse de manera inmediata a cada evento electoral que se viva en Venezuela, se ha convertido en un deber moral no solo de los Bolivarianos sino también de los Santandereanos, dos amplísimos sectores que, después de 200 años de la gesta independentista, hoy hacen carne viva esos ideales que moldearon a la Gran Colombia.

Maduro, desde aquel "…por ahora" de Chávez se ha visto correr mucha sangre, sudor y lágrimas. Las elecciones para las gobernaciones de este pasado domingo fue la guinda de la torta que nos comeremos en el 2018. Tu salida es inminente, la torpeza de aquel sector ha sido tan grande que la convirtieron en tu gran venia que te permitió sortear el tiempo justo del revocatorio permitiéndote cumplir el período de tu mandato, pero no solo los zamuros te acechan, Maduro, sino peor aún, aquellos cuervos de los que tanto te hemos advertido.

Maduro, ¿por casualidad te has leído el extraordinario artículo "Titanic" del compañero Luis Brito García?

Te comento que tanto en Mérida como en Táchira parece que se hubiese escenificado ese extraordinario artículo. Te recomiendo su lectura.

Maduro, por un lado aquella gente prepara tu hoguera y por otra parte los cuervos han sacado y se han tragado tantos ojos que las bases han entendido que la otrora revolución se encuentra en la más espantosa entropía política que se haya experimentado. Pero también le sucede a aquella gente, Maduro, lo que convierte nuestra República en una gran olla de presión que nadie se atreve a destapar porque no son tantos los cojones referidos por Chávez cuando se lo gritó al imperio; y aquella gente, Maduro, metiéndole más leña al fuego. La olla tiene días hirviendo.

¿Dónde vas a colocar o enrocar a los cuervos de Mérida y Táchira, Maduro?

Maduro, el impacto socio-económico-cultural de cada resultado eleccionario es parte de una estructura estadística que el pueblo revolucionario, al menos en Táchira y Mérida, ha sido tan acertado, que tiene años advirtiendo sobre la NECESIDAD de una CENTRÍFUGA a lo interno del PMUD o PSUV como algunos y algunas llaman todavía, pero los cuervos, Maduro, han sido tan poderosos, intocables y atrevidos pero también son una mierda, Maduro, terminaron entregando este domingo y como un gran paquete pre navideño, los estados llamados "la Media Luna".

Maduro, te comento que tanto en Mérida como en Táchira parece que se hubiese escenificado aquel extraordinario artículo "Titanic" del compañero Luis Brito García. Te recomiendo su lectura. Los cuervos del PMUD o PSUV, como algunos y algunas llaman todavía, ya habían entregado casi todas las Alcaldías, casi todos los Concejos Municipales, casi todas las Instituciones, Organismos y Empresas, …ni hablar de las nóminas públicas donde desplazaron a todo el mundo y apadrinaron y protegieron a quienes preparan la hoguera de 2018.

Como no han querido escuchar, Maduro, este domingo, el glorioso pueblo lo ha dicho con votos, y no es que aquella gente presentó sendos aspirantes, no, Maduro, sino que las gestiones en estos dos estados han sido una mierda!

Tenemos años advirtiendo sobre las tendencias estadísticas de cada evento electoral y los cuervos, parásitos y analfabetas, creyeron que podían seguir llenando el estómago de la gente con el ideario Blanca Ibañez y los famosos selfie de playas, excursiones y tarimas.

Maduro, lo sucedido este domingo en Mérida y Táchira, ha sido una especie de centrífuga, pero más que centrífuga un laxante o mejor dicho, más que un laxante ha sido una acción catártica contra los poderosos regionales del PMUD o PSUV, como algunos y algunas llaman todavía.

¿Dónde vas a colocar o enrocar a los cuervos escatológicos de Mérida y Táchira, Maduro?

¿Qué dirán las plumas de los compañeros José Sant Roz y Juan Veroes?

ricardoroymb1@gmail.com