Chávez y la horrenda mentira (III)

Me consumo y me consumiré de por vida

al servicio pleno del pueblo venezolano.

Lo haré gustosamente. Me consumiré

todo lo que me quede de vida. Así lo juro

y lo prometo delate de mis hijos y mis nietos.

Chávez, mucho antes de su sacrificio y partida.

"El tiempo y sus ritmos, el tiempo y sus mandatos, el tiempo y sus designios, como está señalado en el Eclesiastés, me llevan hoy a leer este Comunicado a la nación venezolana y a la opinión pública internacional, muy pendientes como sé que han estado, de la evolución de mi salud desde que hace varias semanas comenzó a dar muchas muestras evidentes de deterioro".

El 30 de junio de 2011, desde La Habana, el Presidente Chávez se dirige al mundo, se dirige a nosotros, para invitarnos a que "sigamos juntos escalando nuevas cumbres, no desde otro sendero abismal, no desde una oscura caverna o una noche sin estrellas. Ahora quería hablarles desde este camino empinado por donde siento que voy saliendo".

En el proceso de enfermedad de Chávez, un grupo de jóvenes con cabeza rapada, en una experiencia espiritual inédita, vino a Venezuela desde la República Dominicana para que, con su emulación, supiera el mundo que aman al presidente enfermo. Rafael Guillén, líder de la Organización Paz Dominicana, aseguró haber tenido una revelación que los motivó a cortarse el cabello. Entre el grupo, vino también Leidy Jiménez, quién manifestó a su llegada: "para recordar siempre a Chávez, nuestro líder continental, el pelo que me corté lo conservo en esta cajita".

"Yo soy un reflejo de la inclusión que hoy se vive en Venezuela", afirmó otro joven quien, en honor al presidente enfermo, subió con sus muletas las escalinatas del Calvario en Caracas en sus casi ochenta escalones. "Cuando pensé que ya era imposible, la revolución lo hizo posible", nos dijo una joven colombiana que se vino a Venezuela ´para ingresar en la Misión Rivas. Hoy es profesional del derecho y asiste a sus connacionales en nuestro país. "Enseño a mis alumnos lo que aprendí gracias a la Revolución"; "los deportistas paralímpicos no existíamos para la IV República". "Sigo como una esponja, absorbiendo conocimientos. Yo era un barco a la deriva y la revolución me sacó de la tormenta"… y así, cada día, registraban los periódicos no dañados por la mentira, el sentir de quienes se sentían acompañantes del líder para escalar nuevas cumbres.

Cuando se despide con aquella pequeña y grande, valiente, acogedora, sosegada y clara, precisa y conmovedora frase, y a su lado un Maduro conmovido, "sean cuales fueren las posibles causas sobrevenidas" de su salud, nos enmudeció, pero entendimos la valoración exacta de su mensaje. Valoramos su sabiduría y el dominio que siempre tuvo sobre su alma.

A las 16:40h del martes 5 de marzo del 2013, se nos fue Chávez. Se apagó su luz. Estallaron los corazones.

Se fue el luchador por los pobres, el amoroso querendón de los ancianos y los niños y de los impedidos por alguna causa ajena.

Chávez fue amado, pero la ternura de su amor y también de su estoicismo, nos la mostró Génesis antes de volar a su galaxia. Poco tiempo le faltaba para tomar camino a lo infinito. "Me voy Chávez, pero quedas tú para salvar a otros muchos". Fue esa su candorosa despedida.

En aquel encuentro, ella en sus brazos y él apretando su rostro contra el pecho de Génesis, surge el compromiso:

"Génesis, mi niña. Desde ahora serás mi bandera, la bandera de la vida, la bandera de la Patria Buena…".

Como a Bolívar, a Chávez nos lo arrancaron temprano…!

*Periodista / Investigación. De mi libro, aún sin publicar, Documenta I / Viejos Papeles que Acusan.

Antimemoria

Treinta y ocho presidentes de Estado y de Gobierno, más delegaciones de 55 países, vinieron al país a despedir a Chávez. Frente al féretro, y en ceremonia inédita en la que rezos de diferentes religiones, incluidas ortodoxas y musulmanas se mezclaron con acordes de música llanera, desfilaban y montaban guardia de honor las más altas representaciones de los países visitantes. Todo, en honor a quien instituyó e hizo asunto de Estado, el amor. El mundo se conmovió. El mundo, todo, en el país herido. Teodore Obiang, Presidente de Guinea Ecuatorial. El Príncipe de Asturias, hoy rey de España, con su presencia, le dijo a los medios monárquicos de su país que Chávez fue un hombre a honrar. A los pies mismos del féretro, no en otra parte, sino a los pies mismos de Chávez, hizo guardia de honor ante quien "su majestad" toleró se le calificara indistintamente de dictador, fascista, nazista, comunista, come niños. Lukashenko, Presidente de Belarús, vino con su pequeño hijo para "señalarle el camino y el respeto a la amistad". Croacia, Finlandia, Vietnam, Rusia, Eslovenia, Angola. El mundo. Mahmud Ahmadineyad, Presidente de Irán, besó la urna, volvió lentamente el rostro, y dijo: "El fue una personalidad histórica y mundial, un movimiento humano. Hugo Chávez no es una persona física, es una cultura, es un sendero, es un plan para salvar a la humanidad. Chávez nunca morirá, su alma y espíritu permanecerán en el corazón de todos los combatientes del mundo. Es símbolo de todos los que buscan el amor y la paz global. Un hombre grande que salió de entre los pueblos latinoamericanos amantes de la justicia y la independencia".

Al momento de morir, Fidel tuvo para él palabras lapidarias: "Ni siquiera él mismo sabía cuán grande era".



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