Con Marea Socialista y los iguales, lograremos hoy las victorias que Chávez logró ayer

Marea Socialista es un movimiento verdaderamente revolucionario en donde se respira honestidad y sobre todo lealtad a sus principios y valores.

En Marea Socialista existe lealtad entre sus miembros, más no alianzas por negocios o intereses individualistas.

La polarización más allá de no permitirnos por ahora una tarjeta electoral, nos obliga a seguir construyendo la vía para retornar al sendero original de la revolución que soñó Chávez y que inspiró en su momento a todo un pueblo que se enamoró de la idea revolucionaria plasmada por el comandante.

La corrupción es la principal causa de la caída de los sueños, callar es avalar el desastre.

El colmo de un revolucionario es avalar lo corrompido, callar ante la desdicha del pueblo y más cuando se está seguro que se anda en la ruta incorrecta. Es por ello que seguimos en la batalla de David contra Goliat, pero estamos seguros que así como el pequeñín derrotó al gigante, de esa misma manera derrotaremos a la malsana polarización que nos agobia.

Ciertamente que Chávez enseñó muy bien a este pueblo, y nos enseño a derrotar a la polarización, de hecho, él lo hizo cuando derrotó a los que se creían invencibles en la cuarta republica también llamados los punto fijistas, nombre dado a los corruptos de la época por aquel diabólico pacto de punto fijo, que era el nombre de la casa-quinta de habitación del extinto Rafael caldera en una reunión donde las cúpulas partidistas de aquel entonces se repartían el botín de nuestro pueblo cada cinco años, específicamente los adecos y copeyanos y algunos vividores de los partidos minoritarios de la derecha. Hoy está vivito y coleando ese pacto, con la diferencia de nombres AD-COPEI ayer PSUV – MUD hoy.

Luego de la libertad de Chávez, los puntofijistas no daban un real por él, lo llamaban loco, utópico, pata en el suelo, patán, pendejo e ignorante y pare Ud. de contar. Decían que hiciera su partido para que se midiera con sus líderes, se burlaban constantemente de aquel hombre y de sus seguidores, sin embargo Chávez no dejaba de trabajar, de caminar, visitar a los pueblitos más recónditos de nuestro país y llegó un momento donde comenzó el miedo de los corruptos pues se avizoraba que aquel hombre les podía echar una vaina o un vainón en aquellas elecciones que se avecinaban y allí comenzó la función de la DISIP.

Reunión que hiciera Chávez, reunión que infiltraban o saboteaba la DISIP, policía política de aquel entonces. Presos, maltratos y acoso, era el pan de cada día para los soñadores e idealistas, pero Chávez, Pálante.

A Chávez nunca se le ocurrió irse para las filas de AD o de COPEI, de aquella nefasta polarización cuarta republicana miserable y traidora, y miren que tuvo infiltrados y allegados que lo animaban para que aceptara una gobernación o cualquier dadiva, pues le decían que fuera de la polarización no se podía lograr nada, que había que luchar desde adentro, que se tenía que ser como ellos para alcanzar cualquier victoria, que esos partidos polarizados eran in-derrotables, pero aquel comandante, claro en sus sueños, claro en el amor a la patria, no lo movía un interés individualista, sino más bien un profundo amor a un ideal libertario para con un pueblo oprimido por más de cuarenta años de corruptela y de camaleones desfalcadores de los tesoros de la nación y más allá de todo eso, un profundo respeto hacia sí mismo y hacia los valores que siempre proclamó..

Por esa enseñanza que nos deja el legado de Chávez, seguiremos en la lucha contra la polarización actual, que es la misma de ayer, las mismas cúpulas podridas contra las que luchó, por ello, por moral y ética, no pactaremos con las cúpulas aberrantes y corruptas, por ello, llegaremos a la victoria final, ya que todo tiene su tiempo y su momento, demostraremos como ayer lo hizo el comandante, que si son derrotables, que No los queremos, que se acabó aquello de que la pelea debe ser desde adentro para seguirnos manipulando, de que no se puede vivir sin ellos. Chávez lo hizo, nosotros lo haremos.

No desmayar es la línea, seguir en la organización silenciosa es la estrategia, y derrotar el mal que regresó del más allá, es la meta.

Gracias Chávez por dejarnos tu legado, que desde esta trinchera seguimos al pie de la letra, y en tu honor, como tú lo hiciste ayer, derrotaremos al nuevo pacto de punto fijo así se nos vaya la vida en ello hermano y camarada de lucha, pero con la conciencia limpia y tranquila por haber recuperado los sueños y los horizontes perdidos.

Unidad de los iguales y lograremos hoy la victoria que Chávez logró ayer.

NO más polarización, NO más corrupción, si más democracia participativa, y yo no soy hijo de Chávez, YO SOY Chávez….

Marea Socialista, Hasta la Victoria Siempre.



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José Luis Ibrahin Esté

Antimperialista. Siempre viajando... pero regresando a Falcón.

 josel_ibrahin2009@hotmail.com      @josel_ibrahin19

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