¡ Un país secuestrado !

Sí, estamos viviendo en un país secuestrado. Un país secuestrado por una "polarización artificial y engañosa", formada, entre los dirigentes de un partido creado por un líder revolucionario que tenía la intención de hacer una revolución socialista y los dirigentes de una supuesta oposición de derecha, quienes han pactado una alianza a espaldas del pueblo venezolano. Nos están engañando, nos están estafando a todos, chavistas y antichavistas, ingenuos pero honestos, trabajadores, pacíficos, alegres, deseosos de tener un gran país, que ciertamente lo tenemos, pero no nos dejan disfrutar de sus bondades. Esa "falsa polarización" oculta sus intenciones, nos mantienen distraídos con una guerra económica, alimentada de parte y parte. Con un referéndo revocatorio que los dos bandos temen, pues, si realizar el RR hubiese sido una opción seria para la oposición, lo hubieran formalizado ante el CNE el 11 de Enero de 2016, fecha en que se cumplió la mitad del periodo constitucional del Presidente. Pero lo hicieron casi 4 meses después. Ahora están engañando a sus seguidores haciéndoles creer que el gobierno es el único culpable de que no se haya realizado, pues quieren generar violencia y así justificar la intervención de los E.U. en Venezuela, la cual cada día parece más probable, pues ellos requieren asegurar nuestro petróleo para dominar el mundo. La otra parte asegura que el referendo no es necesario, que no hay tiempo para hacerlo, que así estamos bien, pero la verdad es que temen ser derrotados.

La mayoría del pueblo venezolano no cree en esta "falsa polarización" de las cúpulas de uno y otro bando. Pero ellos creen que el pueblo es pendejo. Que con discursos irrespetuosos, con mutuos insultos y estupideces en público, pero con pactos secretos en privado, lo pueden engañar. Lo que sucede es que el pueblo no cuenta con medios de información suficientes para organizarse.

El único interés que tiene esta "falsa polarización" es hacerse al control de las riquezas del país para entregarlas al capitalismo mundial. Hablan de democracia, de libertad de expresión, de derechos humanos, de socialismo, de paz, pero desprecian al pueblo, no tienen propuestas ni planes serios para reactivar la economía e incrementar la producción nacional de bienes y servicios para el pueblo; todo lo quieren exportar para obtener dólares. Mantienen al pueblo desinformado, no permiten que exista otra opción política, han asegurado que lo que esté por fuera de esa polarización lo convertirían en "polvo cósmico y arena de playa". Desatienden nuestras necesidades, menosprecian nuestros problemas, no les importan las colas que hacemos, pues las perciben "sabrosas", la inseguridad no es para ellos, la escasez tampoco y para colmo, carecemos medios para expresar nuestras inquietudes. Dicha polarización está dispuesta a entregar el país al imperio capitalista, unos a nombre de un falso socialismo, controlado por una cúpula que explota la imagen y el discurso del líder asesinado y los otros a nombre de la libertad sin responsabilidad, con promesas de progreso y modernismo. Unos usando y abusando de los medios públicos de comunicación e información y los otros, haciendo lo mismo con los medios privados. Unos usando el poder que les proporciona el gobierno nacional, utilizando los empleados públicos en marchas y manifestaciones de apoyo, a nuestra FANB y PDVSA y los otros apoyados por el capitalismo internacional.

Es por eso, que el pueblo permanece desconcertado y desorientado, manipulado, engañado con tantas promesas, que le hacen, y casi termina creyendo que no está tan mal, que todo está normal, que ellos están tratando de resolver los problemas del pueblo, que están muy preocupados por nosotros, que todo va a cambiar en unos meses, que las colas se acabarán pronto, que lo que pasa es que no hemos tenido suerte. Pero pasa el tiempo, y vemos que todo empeora, que la delincuencia aumenta, que la impunidad continúa, que la escasez es mayor, que lo único que hacen los dirigentes de ambos bandos es insultarse públicamente, diciendo estupideces, incitando a la violencia; sin embargo, pactan en privado y sostienen que están tratando de dialogar, ahora con mediación internacional, pero no dialogan con el pueblo; al pueblo lo ignoran. Y así vemos cómo la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela es violada permanentemente por esta "falsa polarización", por quienes dicen ser sus defensores. Vemos que la independencia de poderes no existe, que el Poder Judicial, el Poder Electoral, etc. son controlados por el psuv, que el Poder Legislativo es controlado por la mud, que la delincuencia está desatada, que la unión cívico militar se está debilitando, que la corrupción campea en todas las instituciones del Estado Venezolano, que la agricultura se encuentra abandonada, que la anarquía en el país es total, que no hay gobierno que proteja al ciudadano del abusador que está por todas partes haciendo lo que le viene en gana, que cada funcionario público va por su lado y todos van a robar. Ahora, el gobierno acaba de aprobar el Presupuesto de la Nación 2017 donde el 83% proviene del SENIAT y el 42% del IVA, o sea del pueblo pobre. Pero nos prometen que la mayor parte será para la inversión social. "Para nosotros la prioridad es el ser humano, por eso el 74% del presupuesto es para el pueblo", dicen. Y si es así, entonces, ¿Por qué se niegan a recuperar el desfalco a la nación de 500 mil millones de dólares que entregaron a "empresas fantasmas" que bien se podrían utilizar para este fin?

¿Por qué se han despilfarrado más de dos billones de dólares provenientes del ingreso petrolero en los últimos diez y siete años olvidando la inversión social?

¿Por qué a los pobres les prometen bolsas con harina mientras a los ricos les dan bolsas de oro?

¡Lo malo no es la renta petrolera, lo malo es que se la roben unos pocos!

¡Lo malo es la inversión social como la ha concebido y ejecutado el gobierno!

De esa manera, Venezuela jamás podrá superar el atraso y desarrollarse harmónicamente.

Hoy el pueblo venezolano, el pueblo de a pie, el pueblo honesto, el que vive de su trabajo está pasando hambre, no puede comer lo suficiente, porque el salario no le alcanza, no tiene medicinas, vive tiempos muy difíciles a pesar de tener un país inmensamente rico, porque los integrantes de la "polarización artificial" psuv-mud compiten por regalar las riquezas del país a las empresas transnacionales, petroleras, mineras, automovilísticas, farmacéuticas, etc. a cambio de "jugosas comisiones en dólares".

Cada vez es más evidente que ni el psuv ni la mud tienen la moral, ni la capacidad, ni el apoyo del pueblo para gobernar. Ellos son entreguistas, perversos, traidores a la Patria por acción o por omisión. Ahora quieren entregar, por un puñado de dólares más del 12% del territorio nacional. Pero de eso no se acusan, porque son igualmente responsables, o mejor dicho, igualmente culpables, porque la responsabilidad siempre la eluden.

Terrible situación para Venezuela es contar con esas cúpulas de las cuales se puede afirmar que es lo peor que ha existido a lo largo de la historia venezolana.

Es hora de que todo el pueblo pida a gritos:

"¡Que se vayan todos!"

Pero recordemos lo que Chávez siempre decía:

"¡Dentro de la Constitución todo, fuera de ella nada!"

El primer deber del pueblo venezolano es defender y hacer respetar nuestra Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. No podemos caer en la anarquía. Debemos recuperar el rumbo perdido de la Revolución Bolivariana, que solicitaba el Comandante Chávez, justamente hoy hace cuatro años y dar ese Golpe de Timón que nos pidió desesperadamente. Necesitamos un pueblo organizado, unos trabajadores dispuestos y disciplinados, con un liderazgo colectivo y provisional, seleccionado inicialmente entre quienes hayan demostrado mayor honestidad, lealtad con la revolución y capacidad de lucha, pero un liderazgo removible total o parcialmente mediante un Referendo Revocatorio, con la participación vigilante, decisiva y activa del pueblo y los trabajadores organizados, que se apodere de los medios públicos de Comunicación e Información. Si hay algo evidente, es que para que la Revolución Bolivariana avance hacia el Socialismo, para que se facilite la transición, se requiere la participación de la Clase Trabajadora venezolana. Sin ese ingrediente, será imposible hallar el rumbo al Socialismo. Los trabajadores deben estar al frente de los medios de producción y atentos a la dirección del proceso. De no ser así volveremos a ser víctimas de nuevos cogollos que desviarán nuevamente la Revolución Bolivariana.

 

Atentamente;



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Gilberto Hernández Ortíz

Graduado en la universidad Nacional de Colombia en Licenciado en Ciencias de la educación especializado en el área de Física y Matemáticas Postgrado en Educational Media en la Universidad de North Carolina A&T State University año 1984 - Greensboro, N.C Prof. Jubilado de la Univ. de Oriente (Núcleo Anzoátegui)

 gilnandez@hotmail.com

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