“Cuando a un hombre ejemplar se le ofende., ésta, la ofensa se convierte en amor, pero cuando a UN COBARDE, se le increpa, sencillamente se le está dando pedagogía a la nueva generación para que reconozca al sátrapa en su esencia”
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El insulto es malo. Tenemos que poner la otra mejilla. Carmona invadió la presidencia, porque él y su combo, odian a Chávez y no le gustaba el “régimen” Tenemos que preguntarle, ¿señor Carmona por qué usted pasó por encima de la Constitución y de la mayoría y de un plumazo acabó con tó? Carmona el bueno quien el mismo día de su “proclamación” en contubernio con el anófe…perdón, zancudo chupa sangre Alfredo Peña le entró a tiros y a peinillazos al pueblo caraqueño que manifestaba su adhesión a Chávez. Tenemos que respetar y no ofender al “bueno de Escobar Ratón, perdón roedor, quien con la ira más sádica, morbosa, y “lluvia de oro” que yo he visto dijo ante la entrevistadora de postín:”Tenemos que someterlo por la fuerza y hacerlo preso”. Tenemos que preguntarle a los “humanos” que le entraron a coscorronazo al ministro, humillándolo ante aquella jauría de hienas que les gritaban insultos y descalificaciones e igualmente a los que se burlaron y rieron de Tareck, de Blanco la Cruz, porque “Tenemos que respetar al adversario”

Según Rafael Bolívar “Para que haya unas elecciones de alturas”, a Teochoro, perdón, Teodoro,”tenemos que darle respeto y gallardía”. La misma gallardía que él empleó al gritarle a los pensionados del SSO cuando fueron a exigir se les diera lo que les pertenece y él era ministro de Caldera,”Ustedes no pueden cobrar porque ustedes no trabajan”. A Teochoro, perdón, Teodoro tenemos que sonreírle y darle apechugaditos abrazos, para que el “clima de paz sea chévere”. A ese Teodoro traidor, cobarde, farandulero, que involucró a los jóvenes de los sesenta en la aventura guerrillera y que luego se tiró a los pies de Opus Dei Caldera y a su novia del Canal 5 a traicionar lo que pregonó cuando era COMUNISTA.

Tenemos que aceptar a Teochoro, perdón, Teodoro, y además darle un cafecito con leche y rosquita, y preguntarle con la voz saturada de esencias orientales, “Señor Teochoro, ah, pues, Teodoro, ¿qué fue lo que pasó con la MASACRE DEL ENCANTO? ¿VERDAD SEÑOR Teochoro, perdón, Teodoro que usted es un angelical santito que se le escapó a Dios de la gloria para venir a darle amor y paz a los venezolanos? Y a Borges “Ceja de burro”, perdón, parte superior de focos visuales asnales, “Señor Borges, ¿verdad que usted no intervino en el golpe, ni en los guarimbazos, ni sus partidarios entre ellos, Liliana Hernández, se pusieron a la orden de Carmona, el enano, perdón, el recortado, incluyendo al Alcalde López que llevó a sus policías al edificio La Nacional a acribillar gente y a su otro Alcalde, Capriles que invadió los predios de la embajada cubana y al hijo de Pilarica que amenazó con dejar sin agua ni comida hasta a los niños de esa embajada?” EL HIJO DE Pilarica Romero, es un engendro de Herodes y la bruja Mariagüela Salabar. No señor Bolívar.

En esta Revolución, por lo menos yo, que he vivido toda mi existencia involucrado en la pasión por mi patria, no acepto la gallardía con estos sujetos. Son hombres, Rafael, son seres humanos, son venezolanos, pero, oye Rafael, son una casta de irresponsables, de frenéticos, de mentirosos., No saben hacer política. No aceptan las reglas del juego. Son ofensivos, ¿lo oyes bien, Rafael? ¡Ofensivos! En todos los niveles, ¿o es qué no ha escuchado al bocaguá de TEOCHORo, (se llevó la o mayúscula) cuando habla de Chávez, irrespetando la estatura del Primer Mandatario? ¿No has leído sus barrabasadas en el pasquín TAL CUAL? ¿No tuviste la oportunidad de ver a Borges en aquel mamotreto televisivo que su carnal de maldad Marcel Granier, le permitió llevar a la pantalla, donde ofendía sin ton ni son? ¿NO HAS VISTO A ESAS SEÑORA DEL Este cómo se comportan antes las cámaras de sus pornógrafas televisoras de la oposición venezolana, en la que utilizan la ofensa con mayor ímpetu? ¿NO SUPISTE QUE EL FRUSTRADO Felipe Mujica le mentó la madre a Chávez en una televisora? ¿Y qué otro chulo, copete de anciano, ridículo e insolente, insinuó que Chávez y Fidel son...

La oposición se creyó dueña de la nación bolivariana y al perderla la, ira, la frustración, la envidia contra un humanista de la estatura de Chávez, le ha subido la soberbia, al extremo de venderse al foráneo para atentar contra la patria que vio nacer y crecer a sus componentes, pidiendo invasión y muerte ¿Qué culpa tiene Chávez que la gente lo quiera, vote por él, lo respalde? Oponerse a eso es una imbecilidad. La oposición DEBE TRABAJAR CON OTRO DISCURSO, enviando otro mensaje a la población que no sea el eterno y tendencioso cartel de que “Chávez es esto y aquello” La oposición venezolana es tan burda que se cree que si Chávez se va o lo matan o lo secuestran o se lo llevan, el país va a volver a sus manos. No Rafael, esta patria podrá llegar a otra dirección en el futuro, pero jamás retornará a esa oposición acéfala, sin actores de prestigio que la sustente, que la haga simétrica y que de otra posibilidad de mando bajo los cánones del respeto al pueblo y a sus instituciones .

Es posible que algún día venga otra gente, pero puedes estar seguro que no será Teochoro, ni Borges, Ni Ojeda, ni Frijolitos I II II IV. ESTOS SUJETOS QUE HOY DÍA HACEN OPOSICIÓN EN VENEZUELA, no quieren al país. Quieren volver a ponerles las manos encima, para HACERSE DE UN BILLETE, para acabar con lo hecho por la Revolución y vengarse de los que se hacen llamar chavistas, lo que sería un gran error, pues serán los primeros en no dejarse joder tan fácilmente. NO SE PUEDE ser justo con el injusto, porque no estamos viviendo en una galaxia, donde el amor y la paz van de las manos. La política en Venezuela no es para Blancanieves y los siete enanitos. Cuando Chávez regresó de la Orchila pidió comprensión, y convivencia a todos en general y, ¿qué pasó? La historia es la mejor gráfica al respecto. Con siniestro personaje como Teochoro, quien burlonamente en su pasquín el día 12 de abril de 2002 tituló, CHAO HUGO, no se puede tener respeto. Teochoro es un viejo malasangre, adusto, sin corazón en el pecho, igualito al dueño de la bodeguita del barrio, que se enoja porque los muchachitos les piden más de un caramelo por cien bolívares. Teochoro y Borges, no son precisamente un dúo de olorosas florecitas sobre un campo florido. ¡Plomo con ellos! (político, porsia)