Al poco tiempo de empezar el gobierno de Nicolás Maduro, este viene desarrollando el argumento de que todos los males que está padeciendo el país están directamente relacionados con la llamada “guerra económica”. Aunque fue medio confuso ver al presidente de la república darle concesiones sustanciales al empresario más importante del país (en dos oportunidades) en medio de este escenario, ciertamente eran palpables algunos síntomas como el acaparamiento programado o el aumento desmedido de precios.
A 2 años desde el comienzo de esta dinámica, la situación desde un punto de vista social, político y económico, está peor, y ya el discurso repetitivo de la guerra económica ha dejado de tener sentido. En ningún momento se pretende negar que exista una dinámica especulativa por parte de las empresas privadas y que esté influenciada directamente por el mercado negro y dólar today. Ahora, ante una situación que no parece tener salida y que no han existido medidas efectivas que mejoren el panorama o que tan siquiera frenen este desmadre, cabe preguntar ¿no existe ninguna salida? ¿Por qué la inercia del gobierno? ¿Acaso los empresarios son los únicos responsables?
Para ejemplificar la cuestión, tomemos el caso particular de las libretas empastadas de una línea de 100 hojas, por estar finalizando la llamada “temporada escolar” (de venta de útiles) y por las distintas noticias, de los últimos días, de constantes inspecciones de empresas que venden o distribuyen dichos productos o de la batalla que supuestamente viene emprendiendo la SUNDDE contra la especulación. Hoy un cuaderno de esas características en su forma más sencilla se encuentra en 400bsf a PVPjusto, en aquellos comercios que no especulan con el precio. ¡Ahora! Detengámonos un momento y volvamos un año atrás, a la temporada escolar de 2014.
Para aquel momento, como es de costumbre, en un período de mucha venta, se podían encontrar promociones de 10 libretas en 500bsf. Si, óigase bien en 500bsf, es decir, a 50bsf cada libreta. Y claro estamos hablando de comercios en el centro de Caracas, no aquellos comercios que quedan en el “este del este” donde generalmente todos los productos tienen un precio superior. Ahora, con la crisis económica actual caracterizada por una inflación y especulación desmedida y continua, son muy pocos los comercios o negocios que venden al mayor. La escasez de mercancía ha mermado la venta al mayor para medianos comercios.
Si se compara con el precio de hace un año, este representa un aumento del 760%. Y claro, ahí mismo saldrían los dirigentes “revolucionarios” de las instituciones o algunos acomodados militantes clientelares y acríticos del PSUV a decir que eso es culpa de la Burguesía conspiradora y especuladora que aumenta los precios. Y Si, pero ya basta del discursito. Ya todos aquellos que tenemos dos dedos de frente sabemos (y recontra sabemos) que los bancos y los empresarios son unos ladrones; pero así como tenemos dos dedos de frente, también tenemos dos ojos para ver que el nuevo precio de 399,99bsf (negociado a 380bsf) también dice al lado PVPJUSTO. Es decir, ese precio fue acordado entre los empresarios y las instituciones del Estado.
Ahora, 380bsf, ¿es realmente el precio justo? ¿Cómo se explica eso? Si el estado dio dólares preferenciales para importar útiles escolares, ¿Cómo pudo aumentar el precio en 760%? ¿Acaso los cuadernos tuvieron un aumento de 8 veces su precio en el mercado internacional? ¿En otros países habrán tenido un aumento tan significativo? ¿Existen movilizaciones internacionales de padres molestos porque los cuadernos están extremadamente caros? ¿O es que acaso el gobierno entrego dólares para importar los útiles a precio de SIMADI o de dólar paralelo? ¿Será que el gobierno tuvo un pequeño error con un cero y la libreta en verdad cuesta 40bsf? Dudosamente esto último sea así.
Y cabe destacar, que según la lógica de la llamada “guerra económica”, la dinámica de especulación empresarial no debería entrar en este caso asumiendo que el gobierno está consciente de dicho precio y lo logró “controlar” colocándole el precio con un gran marcaje de PVPJusto. Lamentablemente, este tipo de casos se observan en mayor medida con todos los productos, no solo los escolares, si no con todos aquellos de primera necesidad (alimentos, higiene personal, vestimenta, etc.). Por ello, la conclusión más inmediata es que, en conjunto con los empresarios y los bancos, el gobierno sostiene y es co-participe de la “guerra económica”.
En lo concreto, esto se traduce, en que desde hace unos meses en que la crisis tomó características estructurales, y que la guerra económica, que hace más de un año presentaba algunos síntomas en la realidad, hoy es más propaganda ficticia que otra cosa, las cúpulas gobernantes y de los grandes polos (con diputados en la A.N) vienen administrando la crisis. Se está poniendo en riesgo, casi terminal, una de las conquistas más grandes que se obtuvo con Chávez (y se mantuvo hasta el 2012): el salario más alto de américa latina. Actualmente, el salario se encuentra en un grado de pulverización tan grande que sin duda es uno de los más bajos de la región.
Y aquellos abstraídos de la realidad que quieran llamarme lochero, háganlo si les da la gana, pero en lo concreto por aun mantenerse la relación capital-trabajo, el hecho es que si los trabajadores tenemos mejor salario eso implica directamente que tendremos mejor calidad de vida. Si se quieren refugiar en que la crisis es muy profunda solo recuerden que en 2008 el barril del petróleo pasó de 140$ a menos de 35$, y que en el 2009, en Venezuela la crisis económica fue tan fuerte que cerraron más de 15 bancos, se les pago todo el dinero a los ahorristas y se fugaron más de 30000 millones de dólares del país, y aún nuestro salario seguía siendo el más alto de América Latina.
@cesar_JMarea
