Ustedes podrían considerar que es un atrevimiento de nuestra parte calificar a las Industrias Polar de "Estado", claro, en nuestro caso, Venezuela, desconocemos sí en Colombia y Argentina se podría hacer uso de ese concepto en título para dicha aseveración en Política. Al tiempo, dudamos libre de toda duda que Louis XIV, "el Rey Sol", se podría "enfadar" al conocer que "algo" pudiera tratar de usar y desplazar "su concepto de Estado" no solo por su calidad como "Jefe de Estado y Gobierno" como por las calidades conceptuales políticas tanto como económicas; es decir, absolutismo absoluto.
Dijo e impuso Louis XIV aquella significativa frase en concepto político de "L´Etat, cést moi" pero, por Dios, no nos estamos refiriendo a persona alguna sino a organización industrial que, como organización industrial de carácter de conglomerado industrial, es decir, en su añoranza de convertirse en un "zaibatsu-keiretsu", tiene, contiene y mantiene un organigrama compuesto de personas de acá y acuyá que, en comandita, se arrejuntan para decidir los divinos destinos de los aires criollos. Es decir, que más criollo que Industrias Polar no hay en Venezuela y en Alemania, les consta.
Cuando dimos los primeros pinitos laborales tuvimos la honrosa suerte de estar rodeado de aquellos empresarios de amplia gama que junto a don Diego Cisneros controlaban las realidades económicas y financieras de nuestra gloriosa Patria, Venezuela, tiempos de Raúl Leoni. Eran aquellos caballeros una amplia gama de señores que, muy cercanos al Gobierno del susodicho señor Leoni, conjugaban las crisis socio-económicas de una Venezuela en profunda crisis de tal naturaleza que encontrándose aquel Gobierno leonesco-villano, por aquello de la Villa de Upata, en un escenario de no tener "platica" para pagarles a los más de dos mil funcionarios de la burocracia estatal sus pírricos sueldos y salarios, éstos caballeros salieron de la "oscuridad de la privacidad y la prudencia empresarial-financiera" para el resuelve de la crisis-socio-económico-financiera-del-mentado-Leoni. Era la verdad verdadera de la economía venezolana cual, quizás, el PCV no supo darle la apropiada lectura circunstancial. Pero, en fin, aquellos fueron otros tiempos de los cuales poco hemos aprendido aún.
Es demostrable que el primer gobierno de Carlos Andrés Pérez rompió paradigmas gracias al "mayamerismo" y la crisis del tradicional mundo criollo betancourista-calderista de aquella Venezuela de Pro-Venezuela, es decir, nacionalista y criolla; aquello significaba, entre otras realidades, la necesaria destrucción conceptual de esa organización nacionalista, arriba en mención, respetuosa de lo autóctono, cual era denominada "ProVenezuela", como bien tenemos en precisar, siendo ella, es decir, Pro-Venezuela, la propia contradicción empresarial de aquella otra organización también empresarial pero de los del Valle cual aún permanece en la palestra de las realidades actuales en Venezuela denominada "Fedecámaras" en sus conceptos económico-financieros post-gobiernos-CAP y estrenando nuevo Presidente; nos preguntamos: ¿quién sería el afortunado actual que mueve los hilos detrás del trono? .
Pero las realidades de las economías criollas se han visto en permanente confrontación y, en consecuencia, en permanente contradicción entre aquellos adictos al "eurocentrismo" y aquellos en débiles posiciones de poder real adscrito a las tesis de un Washington pre-Ronald-Reagan y el neoliberalismo global pero muy venezolano y criollísimo, ¿Banco Latino?. Es decir, por aquellos años de la década de los años 80 del siglo próximo pasado, los "pensadores de la economía venezolana" consideraban que era más factible para el desarrollo económico de Venezuela el "modelo italiano" preferible al "modelo japonés" a pesar de aquella introducción en política de aquellas becas de la Fundación Ayacucho. Es decir, se apuntalaba el arriba mencionado "eurocentrismo" ante otras propuestas objetivas y reales sustentadas sobre las nuevas bases objetivas de la nueva geopolítica mundial que se venían imponiendo sobre la base de profundos cambios en las propias estructuras del sistema capitalista cuando comenzaban a dar sus primeros pinitos en la denominada "globalización de las economías nacionales".
En ese marco, nos permitimos "un chismecito" donde estuvimos directamente involucrados cuando ejercíamos realidades diplomáticas en Beijing. Previo a un viaje personal a la "vuelta a la Patria", por corto lapso de tiempo, una compañía china productora de cerveza con historia de la tradicional forma de producir cerveza "a la alemana", nos solicitaron que eleváramos la propuesta de inversión en China de una muy conocida industria cervecera venezolana para elevar sustancialmente la producción nacional en China a cifras muy considerables. La solicitud sería transmitida por el denominado "Padre de la Reforma Agraria" quien era muy cercano a quien dirigía por aquellos tiempos históricos dicha empresa venezolana productora de cerveza. Obtuvimos la respuesta que por lacónica e insólita "la censuramos" no solo por la supuesta falta de visión empresarial venezolana sino por la realidad real ante la cual, de repente, nos encontramos por los conocimientos ofrecidos.
En ese marco de referencia, es evidente las profundas realidades de los modelos arriba referidos como son las decisiones del "empresariado venezolano" cuando desde los momentos del segundo gobierno de CAP hubieren decidido que, gracias a la lenidad de un gobierno sumiso y adscrito a los paradigmas del neoliberalismo mundial, "cambiar sus bolívares por dólares" y exportar sus capitales. Para decirlo a rajatabla en palabras del "Negro" Aristóbulo: "…sí quitamos el control de cambio, nos tumban…vamos a probarlo a ver que pasa…" (Discurso como Orador de Orden ante Asamblea Nacional, 05 de julio, 2015).
Como bien nos lo comentara un importante empresario sefardita por las calles de Beijing: "…me declaro en quiebra ante los bancos, cambio en dólares e invierto en Perú…". Otros llevaron sus capitales a Miami, Buenos Aires, Bogotá, Santiago de Chile y vaya usted a conocer cuáles otros lugares se beneficiaron de aquellas nefastas políticas de aquel Gobierno de CAP que ni el propio Presidente Rafael Caldera Rodríguez con todo su nacionalismo pudo "darle un parao".
Pero cualquier curioso en temas políticos ha podido percibir como "el empresariado ha asaltado el Poder". Lo conocemos, justamente, con el "Golpe de Estado del 11 de Abril" (2002), cuando un empresario, don Pedro Carmona, asaltó el Poder, es decir, Miraflores, gracias a un acto anti-constitucional rompiendo con todos los paradigmas teológicos que se sustentan tanto en las tesis de San Agustín como en las de Santo Tomás de Aquino cuando, objetivamente, no había una situación nacional que lo justificara y sustentado tal acto político bajo la excusa del "comunismo".
Pero, en nuestro modestos pareceres, las razones reales y objetivas eran y son otras, es decir, no es el "comunismo" sino el "modelo-económico-neoliberal" en sus caminares hacia los paradigmas liberales del siglo XIX aunque les suene a contradicción en si misma. Para sus comprensiones de fácil conocimiento: los escenarios en pleno desarrollo en España desde el propio Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y las correspondientes profundizaciones del Gobierno de Mariano Rajoy con las anuencias de Washington y Berlín. No sería obligante referirnos a Chile, Panamá, Colombia y otros.
Curiosamente, en una amena lectura de las magistrales clases de Michel Foucault ("Nacimiento de la biopolítica". FCE. BsAs, 2007, pp. 407) expresaba que "…me parece que esta idea de una fundación legítima del Estado sobre el ejercicio garantizado de una libertad económica es algo importante…" (Idem, pág. 105). Sostiene Foucault su comentario refiriéndose a las tesis propuestas por Ludwig Erhard. Supuestamente propone Erhard y comenta Foucault que la propia existencia del Estado estaría condicionado sí o sí, sí la libertad económica está plenamente en su pleno Derecho en desarrollo; es decir, no es el Estado el conductor de la política de Estado sino los intereses de los sectores privados empresariales; es decir, el "milagro alemán"; es decir, el "milagro demócrata-cristiano".
Continúa exponiendo Foucault que "…en la Alemania contemporánea, la economía, el desarrollo económico, el crecimiento económico producen soberanía, producen soberanía política gracias a la institución y el juego institucional que, justamente, hacen funcionar esa economía. La economía produce legitimidad para el Estado que es su garante…en otras palabras…la economía es creadora del derecho público…" (Ibidem, pág. 106). Vaya!!!
¿Cuál eran las bases fundamentales del programa de gobierno del propuesto gobierno de don Pedro Carmona? ¿Cuáles son los argumentos de Fedecámaras? En última instancia, ¿Cuál es la argumentación de las Industrias Polar? Y todo ello ¿cómo se conjugan con las tesis del "golpe continuado"? ¿Por qué el Gobierno de Grecia llamó a un referéndum y porqué la sociedad griega en más de un 60% se ha cuadrado con el actual Gobierno griego? ¿Por qué de tan alta votación en unas elecciones de partido político venezolano en un escenario de "guerra económica"?
Michel Foucault sin pelos en la lengua señala por todo el cañón que "…el Estado recupera su ley, recupera su ley jurídica y recupera su fundamento real en la existencia y en la práctica de esa libertad económica…la libertad económica coproducida por el crecimiento económico del bienestar, del Estado y del olvido de la historia…" (Idem, pp. 107-110). Carrizo!!!
En última instancia, pareciera decirnos Foucault que existe Estado porque hay "libertad económica"; es decir, para que deje de existir el "terrorismo económico" en Venezuela, el Gobierno del Presidente constitucional, Nicolás Maduro Moros, deberá eliminar el "control de cambio", permitir "sincerar" (sic) los precios al consumidor, eliminar la actual Ley del Trabajo todo ello bajo la excusa de la denominada por la oposición a-histórica: "libertad de los presos políticos"; es decir, el neo-liberalismo-del-siglo-XIX actualizado bajo dos paradigmas: la reingeniería del sistema capitalista-global y la aprobación de las "libertades económicas", es decir, la derogación de la actual Constitución de la República Bolivariana de Venezuela e imponer una constitución liberal.
UNIDAD, LUCHA, BATALLA, VICTORIA.
