Binóculo Nº 179

La madurez del pueblo

El primer sorprendido de lo ocurrido en las elecciones pasadas, fue el propio Psuv. Altos dirigentes aseguraban que se daban por bien pagados si asistía el 15% de los electores, visto el trabajo de aparato que hizo las UBCH. Hacía demasiado tiempo que no se veía un aluvión de ese calibre, mucho menos para elegir candidatos a las parlamentarias, mucho menos en tiempos tan difíciles. No estar alegres con un fenómeno de esa naturaleza, es simplemente no entender el significado que ese hecho tiene, que por cierto tienen bastante poco que ver con el partido y su errado criterio de una victoria partidista. No es cierto.

Si es cierto que hubo una victoria partidista en parte. Pero suponer que Clemente con 78 años y diabético, salió de su casa en Las Palmitas a las siete de la noche a caminar cuatro cuadras para votar por el partido, es, ni más ni menos, una ilusión. "No hijo, tenemos que ir votar porque no podemos perder el legado del comandante", me dijo casi susurrando al oído la vieja Gladys, de allá de Ricardo Urriera. "Mira Olmo, estos carajos se creen que uno no sabe que esto es una guerra económica y nos quieren ahorcar por allí, pero con los poquitos años que me quedan, no joda, yo los daré por mantener esta vaina amigo. Así vieja y enferma como estoy, aunque sea con un machete, pero mi aliento es para defender esto hasta el fin", fue la clara lección que me daba Rosaura, una vieja casi ciega que vive en uno de los barrios más desasistidos del sur de Valencia, José Leonardo Chirinos. Yo solo la miraba con el pocillo de café en la boca y una lágrima me saltaba de los ojos.

Cómo en una coyuntura tan difícil, con una guerra económica sin cuartel, con un gobierno sin política económica, esperando que suban los precios del petróleo para seguir resolviendo los problemas a dolarazo limpio, con unos niveles de corrupción que no tienen parangón en la historia del país, con un Estado cada vez más ineficiente, recibe un espaldarazo tan arrechísimamente arrecho como el del domingo pasado. No hay duda de que una de las respuestas más acertadas son los elevados niveles de conciencia del pueblo venezolano. Es un signo de que esas lecciones de todos los domingos que daba el Arañero de Sabaneta, sin duda surtieron efecto. Pero hay otras.

Tanto Chávez como Nicolás han sido castradores de la expresión popular. Chávez le tuvo mucho miedo a la protesta del pueblo y se negó que saliera a la calle a protestar porque un alcalde lo estaba haciendo mal. Quizás otro gallo cantaría hoy. Lo mismo ha hecho Maduro.

Las guarimbas de febrero y marzo del 2014, fue sin duda un momento crucial. De manera insistente el pueblo manifestó la necesidad de ir a la calle a defender su proceso. Tampoco se le dejó porque sin duda la violencia se haría indetenible. Yo pienso que esa votación de este domingo es parte de esa venganza. Se la debían al pueblo y el pueblo se la acaba de cobrar. Es la primera vez, desde la muerte de Chávez, que pueden manifestar su sentimiento hacia el proceso y su apoyo a lo que se ha construido.

Pero también funcionó la estrategia de escoger mucha gente joven y mujeres. Ciertamente ser joven o mujer no es una condición sine qua non para ser buen diputado, pero siempre he creído que el 70% de cualquier cosa del país, debe estar constituida por jóvenes y mujeres, simplemente porque ese es el 75% de la población del país, jóvenes y mujeres. Si se nombra en un circuito 25 candidatos, jóvenes y mujeres, multipliquen por 4 y verán que allí hay cien votos seguros, directos, porque faltan los amigos y los amigos de los amigos.

Ese domingo me preguntaba qué opera en una persona que a las ocho de la noche está haciendo cola en un centro electoral para ejercer un voto que antes parecía nimio. No hay duda, los modos de percepción cambiaron.

La guarimba económica comenzó en el 2005, cuando comenzaron a escasear los alimentos de los anaqueles. Y eso se trasladó a productos de limpieza y de aseo personal. Fue cuando nos dimos cuenta de que era planificado y que además estaba arreciando. Por entonces, Chávez diseño una estrategia que tenía dos vertientes: una, la masiva importación de productos para atender las necesidades de los venezolanos; y dos, un plan nacional de activación de la industria que condujera a la producción de algunos renglones que no hubiera necesidad de importarlos. Incluso, también activo aquel plan de la reserva alimentaria de tres meses que al morir desapareció de inmediato y se comieron las reservas. De allí en adelante, ya no hubo tiempo. La enfermedad de Chávez nos arropó a todos y los problemas se fueron acumulando hasta su muerte que nos dejó no solamente desbaratados, sino sin rumbo, perdidos en el tiempo y en el espacio. En esas condiciones, se debió asumir la conducción del país y la agresión de un enemigo interno y externo que estaba apostando a acabar de una vez por todas con el proceso que se estaba construyendo.

Los enemigos del país, estaban convencidos de que el ciudadano común, el pata en el suelo como ellos lo llaman, no iba a entender eso, así como tampoco entenderían la guarimba. Es decir, creyeron que era fácil decir que Chávez era bueno y Nicolás era malo. Como siempre, esta oposición analizando mal.

Incluso hay elementos que tiene que ver con el sentimiento, algo así como una muestra de que para el venezolano, el afecto tiene una importancia excelsa. Chávez dijo "ustedes deben elegir a Nicolás Maduro como Presidente de la República", y el pueblo no solo lo entendió, sino que fiel al hombre que amó, fue el domingo a decirle que lo estaba apoyando y que acataba su deseo.

Desde la muerte de Chávez, no hubo una oportunidad en la que el pueblo se expresara, más allá de la elección de Maduro. Creo que el mismo partido debería aprender esa lección y consultarle al pueblo más a menudo. Creo que se llevaría tremendas sorpresas.

Los hechos del domingo pasado, evidencian que el pueblo no solo es maduro, sino que tiene la suficiente conciencia política para asumir sus propias decisiones. Es una variable nueva ya comprobada que en lo atinente al problema del poder, se traduce en permitir que el pueblo construya su propio poder para que tome sus propias decisiones. Irá sin duda por el camino correcto; y construirá sin duda su propia revolución, que es lo que en esencia se pretende desde el Estado, pero deformándolo todo y corrompiéndolo todo.

No es cierto que el pueblo le dijera sí al partido. Le dijo si a su proceso y a sus conquistas a lo largo de 15 años, y es una evidencia de que sabe calcular el tiempo con el solo cantar de las guacharacas.

Caminito de hormigas…

Hay mucha confusión en la oposición por el resultado de los tres millones de votos en las internas del Psuv. No se lo esperaban. Algunos aseguran que es necesario arreciar los planes de terrorismo. Otros proponen activar a los paramilitares… En la MUD no saben qué hacer ahora con las mujeres porque si antes pedían una oportunidad, ahora se las dio directamente el CNE. El problema es que no tienen muchas mujeres… Otro problema de la oposición es que la CIA no está muy ganada para seguir enviando dólares que no tienen resultados concretos, por lo que no llegan las remesas para la campaña… Están llegando los productos electrodomésticos importados por el Estado. La misma rebatiña… Recomiendo el video de Gregg Braden "La verdadera cura de las enfermedades"

 

 



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Rafael Rodríguez Olmos

Periodista, analista político, profesor universitario y articulista. Desde hace nueve años mantiene su programa de radio ¿Aquí no es así?, que se transmite en Valencia por Tecnológica 93.7 FM.

 rafaelolmos101@gmail.com      @aureliano2327

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