Binóculo Nº 118

Se volvió a equivocar el imperio

A menos que aparezca un conejo debajo de la manga, nuevamente el imperio pierde la batalla ante la revolución bolivariana. Intentaron, o intentan imponer un formato que tuvo algún éxito en otros países. Ya el formato de dar un golpe por vía de las Fuerzas Armadas, se vería muy feo en el mundo de hoy. Y no quiere decir que no lo darían, si fuese necesario, pero no sería tan fácil. En el caso de Venezuela, ese es el conejo debajo de la manga. Que apareciera un sector de las FANB desconociendo al gobierno del Presidente Maduro y entonces se produjera un enfrentamiento que complicaría más las cosas. A eso apostó la ultraderecha en esta oportunidad, luego de que intentara incendiar al país, pero no tuvo los resultados que esperaba.

Tres elementos fundamentales han ocurrido dentro de este breve pero muy violento período que Estados Unidos no tomó en cuenta cuando aupó a Leopoldo López para que actuara por sí mismo con su gente; convencido de que una vez iniciada esta etapa de la violencia, nada se detendría. Toda la derecha entraría en el juego y como por acto reflejo, al menos un sector de las FANB se uniría a la sublevación. En Honduras los propios miliares en pleno, apresaron a Zelaya, en la utilización de un formato del imperio que habíamos visto poco. Esa fue una forma de golpe. En Paraguay fue uno de los poderes públicos, el Legislativo que derrocó a Fernando Lugo para llevar por la vía del fraude al narcotraficante Horacio Cartes. En Ecuador, el golpe se pretendió dar con la policía. En Bolivia con la ultraderecha.

En el caso de Venezuela, el imperio no tomó en cuenta que la derecha histórica se opondría a un baño de sangre como el que está presenciando en este momento producto de una aventura y de la ausencia de una política de penetración en las comunidades. Pero además, el imperio estimo que acabaría con el gobierno en cuestión de horas, debido al malestar de la gente con la guerra económica, la falta de productos en los anaqueles, los malos servicios públicos, los problemas con el dólar y una larga cadena de etcétera. Pero el intento de Leopoldo no fue seguido por los demás. Era una aventura peligrosa y todos lo sabían. Y Como en una semana el gobierno no cayó, entonces deciden matarlo, que era una nueva fase de la violencia para mantener la calle encendida. Sería él mismo víctima de los propios sicarios que contrató (lean mi artículo “Delito de Opinión” donde está explicado todo lo que está ocurriendo) Y como López sabe de qué se trata, le resultó más fácil buscar protección en el Gobierno. Allí va a ser difícil que lo maten y lo conviertan en víctima para mantener encendida la calle. A su vez, su entrega a las autoridades no estaba en los planes del imperio que ante la ausencia de alguien que asuma la dirección de la violencia, ver mermar lentamente el intento de incendiar el país.

Un segundo elemento clave para entender este proceso, es que Chávez se ocupó de ir forjando una Fuerza Armada, que si bien no es revolucionaria, comprende que sus intereses están de este lado y no del lado del imperio. No es que estas Fuerzas Armadas sean de izquierda, aunque por primera vez hay mucha conciencia política de lo que es el país y qué significa, y hay muchos militares muy avanzados. Esta Fuerza Armada en estos momentos está muy cohesionada y el alto mando militar ya ha expresado su apoyo al hilo constitucional, lo cual es de suma importancia para el desarrollo de estos acontecimientos. En otra oportunidad analizaremos a fondo a estas FANB.

Un tercer elemento de vital importancia, que incluso tomaron en cuenta algunos factores de las fuerzas armadas, es esa enorme estructura política con la que cuenta el gobierno, que una vez más demostró que a pesar de sus muy crudas diferencias, cuando se ven amenazados, cierran filas. Y no importa la crisis por la que se atraviese o el saboteo económico al que está sometido, ese pueblo es de Chávez y una vez más acaba de demostrar que respeta la palabra de Hugo “ustedes sigan a Nicolás”. Es decir que aquella vieja frase “con hambre y sin empleo, con Chávez me resteo”, aún se mantiene en la hipófisis del pueblo. Esa estructura política es extremadamente diversa: Está la burocracia que controla el Estado que es un pastel. Hay derecha, izquierda y ultraizquierda. Todos operan sobre sus intereses: gremios, sindicalistas, profesionales y etcétera.

Esta la dirigencia política dividida en derecha e izquierda, incluso hay algunos zurdos, es decir, son de derecha, pero creen que son de izquierda. Basta que le den un cargo para que se conviertan en tránsfugas, mafiosos, negociadores, cupuleros, macoyeros y pare de contar. La derecha controla al Estado y sus instituciones; y además, es la gran represora del poder constituyente. Pero es una maquinaria poderosa gracias a los dólares del petróleo.
Un tercer elemento es el poder popular. Este sector es extremadamente complejo. Si a definición política nos vamos, podríamos decir que no hay derecha. Es el sector oprimido de siempre, refugiado en sus angustias y en sus problemas cotidianos. Ha vivido de dos factores de manera permanente: que un milagro los saque de sus crisis, razón por la que existen tantos cultos religiosos y juegos de envite y azar; y, en espera de que un salvador les devuelva la fe, que esta vez reencarnó en un hombre llamado Hugo Chávez. Es por ello que se le ha hecho tan difícil a la oposición penetrar allí. Hoy ese poder popular, no está muy organizado, pero sí muy politizado y siguen creyendo en un Nicolás que los amará como los amó Chávez.

Todos esos factores, groso modo, conforman la poderosa estructura política que soporta el gobierno del camarada Maduro. Es una estructura intacta, sin resquebrajamiento alguno. Si eso se produjera, volveremos a analizar. Pero sin duda que el imperio no analizó esto. Pensó que un formato parecido a Ucrania, daría al traste con el gobierno constitucional. Los que están de este lado del chavismo, saben que si el gobierno cae, no habrá forma de que esa derecha fascista los perdone, basta que hayan estado en el Gobierno. Hay demasiado odio acumulado. La caída del gobierno no haría más que eternizar la violencia porque entonces sí se levantarían los sectores populares. Y la oposición no tiene idea de qué cosa es eso, pero Ucrania parecería algo así como un tea party, es decir, la mejor fiesta del té.

Caminito de hormigas…
En sus dos últimas ediciones, esta columna explicó con detalles algunas de las cosas que están ocurriendo. Los cuerpos de seguridad no creyeron que fuera de esa manera… Pues me aseguran que don Miquele Cocciola perdonará los impuestos de los centros comerciales, pero se los cargará a los comercios del sur. ¿Cómo es esto? Por cierto, la disociación es tan grave, que en Lomas del Este le aplicaron una Guarimba al alcalde que fue a recoger la basura. Su propia medicina... El general Alambre debe estar preso por el resto de su vida. Ese no es un militar. No puede ser normal quien haga una propuesta de ese tipo. Es un asesino… Por cierto, que será de la vida de coronel del ejército José Ojeda Rivas, activo y denunciado ante la Fiscalía General de la República por tener tropas falsas en su nómina para cobrar los salarios y beneficios… Pregunta: ¿Qué alta dirigente del Psuv falsificó su título de licenciada en educación, razón por la que está siendo investigada por el Ministerio?... ¿Estará participando Movistar en el juego golpista contra el gobierno del Presidente Maduro?... Vean en You Tube un video que se llama “La granja del Dr Frankestain”. Les impresionará


Esta nota ha sido leída aproximadamente 3031 veces.



Rafael Rodríguez Olmos

Periodista, analista político, profesor universitario y articulista. Desde hace nueve años mantiene su programa de radio ¿Aquí no es así?, que se transmite en Valencia por Tecnológica 93.7 FM.

 rafaelolmos101@gmail.com      @aureliano2327

Visite el perfil de Rafael Rodríguez Olmos para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Rafael Rodríguez Olmos

Rafael Rodríguez Olmos

Más artículos de este autor