Si algo debe guiar al revolucionario marxista es la critica racional para mantener el criterio propio libre de desviaciones oportunistas para hacer valer la verdad (practica) ante cualquier circunstancia al menos que “tareas especiales” como la infiltración en las filas del enemigo así lo determinen.
La oposición entonces ante los hechos contrarrevolucionarios debe expresarse con claridad como ejercicio del objetivo final del socialismo científico.
En la actualidad se observa en algunos sectores una especie de neutralidad oportunista ante el poderoso movimiento capitalista deformador dentro del sistema económico que gana terrenos día a día no para la transformación social sino para la construcción de una estructura dictatorial donde una elite se convierte en “voz del pueblo” para usufructuar no solo las riquezas nacionales si no el patrimonio histórico político y cultural de la Nación de la cual en cierta forma ya disponen sin control fiscal y moral de ningún tipo.
Todo lo que se mueva en esa corriente contra poder democrático será bautizada como enemigo de la paz el progreso y el socialismo. Seguramente la oposición capitalista derechista se halle incursa en algunas críticas pero es labor del socialista hurgar entre estas situaciones para no dejarse confundir y a la vez rechazar el maniqueísmo para camuflagear la verdad revolucionaria entre los enemigos de la revolución necesaria.
Si la oposición revisionista capitalista logra eliminar la oposición socialista revolucionaria de este proceso en estos momentos críticos cuando se está tomando el camino equivocado de un Estado Capitalista Reformista como solución al conflicto entre las clases sociales en pugna en la sociedad venezolana no habrá un mañana feliz para los trabajadores a los cuales estos neo capitalistas hoy día a pesar de todo les han incrementado la plusvalía(comercia-Industrial) En lo internacional por otra parte los dólares van a fortalecer el Capital extranjero más que el factor trabajo mientras esperamos por la resurrección de la clase “burguesa” revolucionaria que surgirá como una nueva explotadora pero hecha en socialismo.
¡No¡ y mil veces ¡no¡ Hay que darle un viraje a esta situación para construir el socialismo ajustado a los tiempos pero también a la gente, a los trabajadores y campesinos, a los estudiantes, poetas y hombres de bien en general. El socialismo del siglo XXI no puede ser un “Cuento de Cuartel” para engañar timoratos.
