Lo que no preguntan los periodistas

Vimos al Presidente Chávez en su primera rueda de prensa para iniciar el combate con mira a la victoria el 7 de octubre de 2012 y una vez más supimos el por qué Chávez es el pueblo. Esos de decir a alta, clara, y diáfana voz que “el pueblo es Chávez” no deja lugar a dudas respecto a la alta dosis de conocimiento que el nacido en Barinas ha ido adquiriendo desde aquella vez cuando expresó: “Por ahora”

A la oposición eso le disgusta. Una inmensa mayoría de venezolanos comulgando con la idea revolucionaria de Chávez, es el gran dolor de cabeza para los impuros que desean ardientemente regresar con sus mismas aberraciones políticas que estuvieron practicando durante cincuenta años. Por eso odian a Chávez, por eso prefieren seguir las normas diabólicas que les escriben desde afuera que salir democráticamente a buscar el voto entre la gente sin tener que llevar encapuchados y elementos de otras partes para formar bochinches y desestabilizaciones.

Cuando escuchamos a un dirigente de COPEI entrevistado por Ernesto Villegas la semana que acaba de concluir, llegamos al sereno análisis de que esos dirigentes de oposición no respetan a la mayoría. Se imaginan en la 4-R al decir que “nosotros estamos actuando bajo el signo de la paz, nosotros no tenemos agendas de odios, nosotros somos unos capullitos de alelíes, nosotros fuimos al golpe de Estado de 2002 porque nos dijeron que nos ganaríamos un viaje a Disney si tumbábamos a Chávez y poníamos a pasar hambre y angustia al pueblo con el paro petrolero”

Por eso el pueblo se apellida CHÁVEZ, porque al igual que el noble Presidente no se deja engatusar con estos GOLPISTAS adecos-copeyanos que fueron en sus gobiernos continuaciones dictatoriales de la época de Pérez Jiménez. Cuando el Presidente Chávez dice que vio los chanchullos de AD y COPEI en las mesas electorales de aquella época, se está identificando más con el soberano, porque a éste, el soberano no lo vuelve a engañar nadie. Por eso el pueblo es Chávez, energía, fuerza e inteligencia pura, sin engaños demagógicos, sin falsas posturas patriotas.

Por eso cuando el Presidente Chávez responde por la Fuerza Armada y cuenta lo que sucedía cuando ésta era despreciada por adecos y copeyanos, “La fuerzas Armadas las mantenemos sumida con las “3 C, decían,”, simplemente acude a el corazón de la mayoría, a esa mayoría que no guarda en su cerebro otra cosa que neuronas de amor y asepsia. El Presidente Chávez es un caso único en el mundo. Un genio de la comunicación, si es que a alguien le molesta que exageremos ante la verdad. Un hombre nacido para triunfar, porque quien se anida en la comprensión no puede perecer en la injusticia. El pueblo es Chávez porque solamente el pueblo sabe de dolores, de tragedias, de derrotas, porque solamente el pueblo suele erguirse de las ruinas, de la orfandad social, de la esclavitud para agigantarse como lo ha hecho Chávez desde que se dio cuenta que a su patria un grupo de anómalos les hacían agujeros en la piel para que se fuera desangrando.

El pueblo es Chávez, el Comandante, el guía, el jefe de la tribu, el hacedor de sueños, el que cae y se levanta, el que ríe y llora, el que da consejos, el que escucha, el que se preocupa, el que sabiendo que tiene parte de los enemigos incrustados en la OFICIONAS PÚBLICAS, mira, piensa, y sabe que esos TAMBIEN COMEN aunque tengan menosprecios por sus congéneres, al desear que vuelva la OPOSICIÓN, causante de los males de la patria venezolana, de los cuales hoy se sale rumbo a una nueva vida. El pueblo es Chávez, porque el pueblo ve todo lo que este gobierno ha hecho, se maravilla de los cambios, se ennoblece con lo que acontece y no finge obviar lo que es tan visible.

UNA NUEVA POTENCIA será Venezuela y a eso va el pueblo acompañando al Comandante. Camina con él, llora emotivo, grita, quiere besarlo y él quiere besar al pueblo. Son uña y carne, boca y sonido, pensamientos y hechos. En ninguna parte de la historia el pueblo venezolano se había identificado tanto con su Presidente y si alguna vez siguió a uno de esos que lo engañaba con demagogia, lo hizo porque no sabía como era el hombre que habría de llegar a la patria enderezar entuertos a su lado hasta que lo conoció una madrugada cuando enfrentando su derrota con gallardía hizo sonora la célebre “POR AHORA”. No. no es un Dios, no es un enviado por la Providencia, una gota de oro, una vena de plata, una hogaza, un mago, un fabulista de oficio: se llama Hugo Rafael Chávez Frías y al escribir de él, solamente estamos acudiendo a la TEORÍA HECHA PRÁCTICA. Bienvenido los hombres de buena voluntad para la nación Quienes lo odian por fanatismo, ocultándose para no ver lo realizado un día sabrán cuan equivocados estaban

hdiderot@gmail.com



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Ángel V. Rivas

Limpiabota, ayudante de pintura, articulista, Productor Nacional Independiente, editor de El Irreverente. Animador del programa Gigantes del Romance, autor del libro Pacto Satánico y poeta en estado de frustración.

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