Tin es uno de los centenares de miles de venezolanos que han emigrado de su Patria Chica a las “grandes ciudades" de nuestra Venezuela.
El viene de Caripito, donde vivió una infancia feliz, luego pasó por Calabozo y finalmente ancló en Guarenas, donde ha vivido de la venta de almuerzos, arepas y empanadas y con su aprendizaje vivencial, desparrama toda una sabiduría acumulada por más de setenta años.
Tin espera como tantos otros, adjudicación de vivienda en uno de esos lugares donde pernoctan hombres y mujeres en tiendas de campaña. La semana pasada recibieron la visita de “una comisión presidencial”…
Cuando llegó el tiempo de las preguntas, el primero en hacerlo fue Tin… Levantó su mano derecha y dijo: ¿puedo?.
- Si, claro le respondió uno de los encopetados visitantes, quien quedó mudo ante la interrogante…
Tin: - ¿ustedes quieren a Chávez… están con Chávez… votan por Chávez?
Con una breve pausa y silencio que llenó de confusión a la asamblea, el mismo Tin prosiguió…
Tin: - Lo que pasa es que ustedes son la tercera Comisión Presidencial que nos visita y de las dos anteriores no sabemos nada… entonces lo que quiero que sepan es que si a mí no me dan la casa que andamos buscando… Si ustedes vienen a sabotear la labor del gobierno y a que nos decepcionemos del presidente, creo que están pelando bolas. Yo voy a seguir votando y apoyando al Comandante Hugo Chávez por siempre… Con casa o sin casa…
Necesitamos muchos Tin.
¿Será esa la vía para sacudirnos tanto burocratismo?. Existe un gran porcentaje de ineficacia e ineficiencia, donde tiene mucho que ver la carencia de valores socialistas y voluntades. La ausencia de planificación, metas y una estrategia fundamentada en el gran plan de trabajo, plasmado en el Proyecto Nacional Simón Bolívar. De repente, ¿será esa la vía más expedita para dar al traste con tanto “bate quebrado”?... La confrontación directa y sencilla, hasta que se avergüencen y renuncien. Desde luego, eso no es nada fácil. Son demasiado bajos, les importa un bledo que los arrumen, que los humillen, no hay manera de superar tanta mediocridad, indignidad e inmoralidad… Los escuálidos son así.
Sin embargo para Tin, es imperiosamente necesario sacarlos de la administración pública y el desde su trinchera de vida, haciendo arepas ha decidido que esa es una buena manera, porque hay demasiado bagazos.
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