“El fin de un bocón es morderse la lengua”
Pasan tantas cosas con esa oposición quiebra bancos. Dice que “no tiene un pelo de tonta” y a uno no le queda más remedio que reír, porque esta risa no es de loco…loco loquero, loco loquero…Desde el año pasado al banco del turco Mezenger Z, perdón, Mezeharne se le había detectado una chimbura pero aún no había llegado al sitio donde Sudebán interviene, hasta que, ¡pum! ¡Ni un pelo de tonto tuvo Sudebán!
Salieron igualitos a PABLO MEDINA EL 2002, marcando la milla. Se refugiaron en Gusanolandia y desde allá apoyados por Patricia Poleo y Orlando “rey de la lumpia” Urdaneta, gritan por la CÑM de que, “Chávez nos persigue”. No es Chávez; es la ley que los persigue, pero para que se presenten ante un tribunal a explicar sus diabluras. Fíjese usted, lector yo en mi inocencia creía que las pinturas más caras eran las de Picasso, Van Goh, Miguel Ángel, Michelena, Tito Salas, Bárbaro Rivas, pasando por Reverón titiritero, pero no; estaba más pelado que el locutor que venía del Federal, porque las pinturas más caras son las que les hace Carlos Ocariz a las canchas de Petare.
Hace pocos días mandó a brochear una de ellas, porque nada se les hizo, según voceros, en lo que respecta a albañilería, por El Llanito y la pinturita le costó a la alcaldía de Sucre la pírrica suma de 484 millones de bolívares de los viejos! ¿Esa pintura será a base de qué Deus? No solamente eso, sino que pasó por sobre los Consejos Comunales ignorándolos y además quitándoles un mercado donde semanalmente instalaban un expendió de mercadería para el pueblo. Una concejal de esos predios, por supuesto de Primero Justicia dijo que, “las canchas no son para vender ocumo y yuca”, pero esas mismas canchas, esos parques los alquila la alcaldía en 600 millones de bolívares de los viejos para conciertos de cualquier sifrinada que se les ocurra a lo que queda de los “manos blancas”
Por cierto que Ocariz habló de que bajó el índice criminal en Petare y por su oscura mente de “pinta carita” no le pasó el nombre de Tareck el Aissami quien junto a la Guardia Nacional y la Policía Nacional es co autor de este bajo índice. Ocariz mintió al exclamar que eso es producto de su policía. Ahora no entendemos ¿qué es lo que pasa en una celda de la jefatura de Petare? Dicen que a ese lugar sólo entran los que pueden pagar, es decir jíbaros, pranes y carteles de la drogas. Es una guarida especial, según exclama el pueblo, con todas sus comodidades, pero no para tierrúos y desdentados; es para presos billetúos.
Una mujer “ocariztina”que estaba cerca del lugar cuando llegó mami-mami, perdón, el alcalde, con su pléyade de “trabajadores” exclamó que, “ellos siempre han estado trabajando para los vecinos de la California, La Urbina, El Llanito, Macaracuay, y uno que escribe se pregunta: ¿por qué obvió a Baloa, Caruto, Matadero, Case´e Tabla, Mosquito, Maca, Carpintero, Matadero? ¿Por qué nombró solamente a los de clase media? Hizo exactamente igualito a los colombianos después que el gobierno revolucionario los dotó de cédula, partida de nacimiento, nacionalización, casa y respeto en Venezuela, votaron por Santos, je, je, je, ¡qué vaina Sanchu amigu! A los clase media, el maluco gobierno revolucionario, los extrajo de las garras de los créditos indexados, salvándolos de la ruina, pero después ellos decidieron votar por Radonski y Ocariz…cría cuervos…”
Así es que desde ahora en adelante las canchas de Petare irán a ser parte del Louvre de París, pues si el alcalde Ocariz lleva a ese lugar treinta o cuarenta de las mismas, multiplique la millonada!, serán las pinturas más caras del mundo.
Para Ripley: “En un lugar de Venezuela, donde el alcalde se llama Carlos Oca gris, perdón, Ocariz, pintar una cancha de básquet, cuesta la friolera de 484 millones de bolívares
aenpelota@gmail.com
