10 junio 2015 - El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, agradeció este martes la solidaridad de su homólogo de Bolivia, Evo Morales, por sus declaraciones en rechazo a la visita de Felipe González a la patria de Bolívar, catalogándolo como una muestra del nuevo colonialismo.
“Evo Morales siempre claro, solidario y orientador. Gracias a los líderes del mundo que acompañan la verdad de Venezuela”, expresó el Jefe de Estado venezolano, durante su participación en un programa especial de Venezolana de Televisión.
En dicho contacto, , quien criticó la visita de González a Venezuela, que al margen de las leyes pretendía abogar por la excarcelación de Leopoldo López, quien se encuentra recluido en la cárcel por promover actos violentos a inicios del año 2014, con el plan denominado “La Salida”, que causó la muerte de 43 venezolanos.
Morales, citado por al agencia EFE, se preguntó si acaso los españoles no tienen problemas políticos y qué sucedería si un expresidente de Bolivia o Venezuela va a ese país a meterse en sus asuntos internos.
Asimismo, el presidente boliviano opinó que el viaje de González a Caracas “es una intromisión y una vergüenza” y a su juicio el Gobierno de Estados Unidos, aliado con factores de la ultraderecha de España y Colombia, tienen una conspiración económica contra la Revolución Bolivariana “y cuando ven que no pueden derrotarla vienen la amenaza militar, estas amenazas acompañan a Felipe González”, dijo.
Al respecto, el presidente Maduro expresó: “Nosotros somos hijos de Bolívar, no tenemos complejos coloniales ni imperiales, nuestra sangre viene de un mestizaje hermoso (…) de nuestro Simón Bolívar, de nuestro Antonio José de Sucre, de nuestro Francisco de Miranda”, por ello “debemos sentirnos muy orgullosos de ser venezolanos y de seguir construyendo la patria grande”.
“Que nadie se meta con nosotros, nosotros no nos metemos con nadie. Nadie va a España a entrometerse en los asuntos que tienen”, comentó el mandatario al hacer referencia de los desahucios, el desempleo (ubicado actualmente en 23,8%), despidos injustificados, recortes en la televisión pública, la privatización de la salud y el recorte por parte del gobierno español de 23% a los recursos destinados a los servicios sociales en los últimos cuatro años.
González, creador en la década de 1990 de la organización paramilitar GAL y declarado recientemente por el Parlamento venezolano como persona non grata, también pretende defender a Antonio Ledezma, acusado por su responsabilidad en las acciones terroristas contra el país, con las que pensaban derrocar el gobierno constitucional del presidente de la República, Nicolás Maduro.
Además, González apoyó el golpe de Estado contra el presidente Hugo Chávez en 2002 con declaraciones en diversos medios españoles, afirmando que el líder revolucionario “era un dictador y totalitario”.
