Caracas, 06 Jul. ABN.- El cierre continuo de las
diferentes líneas de producción de la transnacional farmacéutica
estadounidense Pfizer Venezuela, así como el anunciado cierre de su
planta ubicada en Valencia, estado Carabobo, ha afectado hasta el
momento a unos 300 trabajadores que han sido despedidos u obligados a
renunciar y afectará a todo el pueblo venezolano.
Así lo informó este lunes el miembro del Sindicato de Trabajadores
de la empresa de medicamentos Pfizer (Sintrapfizer), Carlos Rodríguez,
en una entrevista exclusiva vía telefónica con la Agencia Bolivariana
de Noticias (ABN).
En este sentido, Rodríguez manifestó que, desde hace varios meses,
la planta de Pfizer ha cerrado muchas de sus líneas, llegando al punto
inclusive, de que ahora se encuentra produciendo solamente con una
línea.
Al respecto, argumentó que, con estas medidas ejecutadas por
Pfizer, los empresarios de la transnacional de medicamentos “deciden
sacrificar a los trabajadores para obtener más ganancias como
empresarios, pues, traer los productos de afuera les genera más
ganancias”.
“A ellos no les importa el pueblo como tal, ellos lo que buscan es
importar los medicamentos, cosa que afecta directamente al pueblo, en
vista de que se dejará de producir dentro del país los medicamentos
esenciales para el pueblo”, sostuvo.
Asimismo, remarcó que la decisión de Pfizer de cerrar las líneas de
producción y la voluntad que tienen de cerrar la planta “es una medida
que obedece meramente al interés capital de la empresa, pues ellos lo
que quieren es incrementar sus ganancias, ya que les resulta más
rentable traer los productos importados que producirlos en el país”.
Cierre sin argumentos
Rodríguez indicó, además, que el avisado cierre de la planta
ubicada en la Zona Industrial de Valencia, estado Carabobo, cerca del
Aeropuerto Internacional Arturo Michelena, no tiene ningún tipo de
argumento que lo sustente, pues en Venezuela tienen “toda la tecnología
y el material necesario para hacer los productos que son esenciales y
necesarios para el sector hospitalario”.
“Ellos no han podido cerrar definitivamente la planta, porque como no tienen ningún argumento, incluso
el ministro de Comercio, Eduardo Samán se reunió con los encargados
de la empresa, y se demostró que no tienen ningún argumento para
cerrar”, acotó Rodríguez.
En este contexto, declaró que, según palabras del propio ministro
Samán, “el Estado les ha entregado todas las divisas y les ha dado
todas las garantías a Pfizer para producir en el país, sin embargo, a
ellos sin importarle nada de eso, tomaron la decisión de importar los
productos porque les ganan más, lo cual es una medida meramente
capitalista y contraria a la línea del país”.
Cabe destacar que la transnacional Pfizer obtuvo, en 2004, 48
millones de dólares por parte de la Comisión de Administración de
Divisas (Cadivi), monto que pasó a 115 millones de dólares en 2008.
Violación de los derechos laborales
Por otra parte, Rodriguez denunció que, durante el proceso de
cierre de la planta Pfizer, han sido diversas las violaciones en
materia laboral.
“Muchos de los trabajadores que fueron despedidos trabajaban acá
con la figura de contratados, y eso es algo ilegal porque la normativa
laboral de nosotros, dice que todas las personas que trabajan
directamente en la empresa deben ser personal fijo, sin embargo, eso la
empresa lo incumple”, manifestó Rodríguez.
De igual forma, el dirigente sindical denunció que otra de las
violaciones de Pfizer contra sus empleados se generó cuando “la empresa
obligó a los trabajadores a firmar su carta de renuncia en vista de que
habían cerrado las líneas de producción”.
Subrayó que, de continuar la política sistemática de cierre de la
producción de Pfizer en Venezuela, “se verán afectados alrededor de 150
trabajadores que trabajan en la planta este, que es la que ellos
piensan cerrar, donde aproximadamente unas 70 personas son fijas y el
resto son contratadas”.
Informó que los trabajadores afectados han efectuado diversas
denuncias ante la Inspectoría del trabajo, sin embargo, recalcó que
como la mayoría de los trabajadores pertenecían a contratistas, Pfizer
se libró de responsabilidades, ya que aplicó la política capitalista de
los tercerizados.
Intervención inmediata del Estado
Para el miembro de Sintrapfizer, es urgente y necesaria la
inmediata intervención del Ejecutivo Nacional con respecto al cierre
inminente de la empresa productora de medicamentos.
“Para nosotros lo importante es ver qué acción va a tomar el Estado
con respecto a esta situación, porque es algo que ha dicho la empresa
abiertamente de traer los productos importados en vez de fabricarlos en
el país”, dijo Rodriguez.
Sobre este punto, agregó que “es importante que aclaren como el
Estado le puede dar una autorización a Pfizer de cerrar, teniendo todo
el material necesario de infraestructura, maquinaria y de materias
primas para producir aquí y justificar porque ellos están cerrando la
producción del país”.
Asimismo, dijo que hay que “buscar la manera de que el Estado se
pronuncie acerca de qué van a hacer con esta empresa, porque si el
Gobierno le está dando todas las divisas y las garantías para que
produzcan en el país, ¿Por qué Pfizer entonces le da prioridad a la
producción extranjera para importarla a Venezuela y venderla acá'”.