El gobierno de nuestro presidente obrero y camarada Nicolás Maduro, junto al pueblo trabajador, siguen enfrentando esta nueva arremetida, esta despiadada guerra económica que están ejecutando el gobierno norteamericano y la oligarquía local en contra de los venezolanos y su Revolución bolivariana, solo para tomar el control de nuestros recursos naturales, convertirnos nuevamente en una colonia, acabar con los logros alcanzados en estos últimos 16 años y sumir en hambre y miseria a la mayoría de nuestra población.
La estrategia de los trabajadores y las trabajadoras debe estar orientada a toma de consciencia para no realizar compras de bienes que no sean estrictamente necesarios para que se normalice la producción y le propinemos otra fulminante derrota. No le sigamos el juego a los enemigos de la Patria. A los norteamericanos, empresarios y comerciantes poco les importa el destino de la clase obrera ni de los más humildes. Ellos no están en las colas pues tienen suficiente dinero para adquirir cualquier producto al precio que se los ofrezcan. Las largas colas se debe fundamentalmente, en la mayoría de los casos, a que la distribución de alimentos y otros rubros se realiza intencionalmente en determinados establecimientos comerciales, que van cambiando a diario, con la finalidad de generar caos y crear la incertidumbre y el temor a que los artículos no saldrán más al mercado. Es una táctica. Es una estrategia. Y esto hay que difundirlo.
Por otra parte, el insolente vice presidente norteamericano, Joe Biden, anunció un golpe de Estado en Venezuela. Se equivoca el envelecido funcionario por cuanto hoy en día hay una extraordinaria fusión entre el pueblo y la Fuerza Armada Nacional. La gran mayoría de los venezolanos y de los hombres y mujeres en uniforme son leales y respaldan plenamente a nuestro camarada Nicolás Maduro. Sin embargo, la clase obrera de estar alerta, debemos implementar una rigurosa inteligencia social y denunciar cualquier anormalidad. Identifiquemos los puntos y direcciones que debemos detectar en caso de una agresión. Mantengamonos unidos, disciplinadamente desplegados, con elevada moral y con la firme convicción de la imperiosa necesidad de defender hasta con la vida misma este sistema de libertades, de justicia social que logramos gracias a nuestro Comandante Eterno Hugo Chávez. Debemos estar vigilantes y no subestimar al inmoral y genocida enemigo imperial. Pero a su vez debe entender el águila imperial que no le tenemos miedo por cuanto tenemos dignidad.
¡CONSCIENCIA, CONSCIENCIA Y MÁS CONSCIENCIA!
¡NO REALICES COMPRAS INNECESARIAS! ¡NO ACAPARES!
¡GOBIERNO NORTEAMERICANO, NO MÁS AGRESIONES!. ¡VENEZUELA SE RESPETA!