30 junio 2015 - El presidente español, Mariano Rajoy, ha declarado que espera que en el referéndum que decidirá si se implementa o no el programa de rescate de la UE en Grecia gane el 'sí', y aboga además por un cambio de Gobierno en ese país, informa AFP.
"Grecia vive del resto de países de la UE. Todos queremos ser solidarios, pero ser solidarios a cambio de nada es otra cosa", dijo también Rajoy a la cadena Cope, en la primera entrevista tras las elecciones municipales y autonómicas del 24 de mayo.
El jefe del Ejecutivo les ha pedido a los griegos que voten 'sí', a fin de que la consulta suponga un perjudique a Alexis Tsipras y pueda tomar el relevo otro gobierno distinto al suyo con el que los europeos puedan "seguir negociando". "Lo que veo es que si gana el 'sí' y Tsipras pierde el referéndum será bueno para Grecia porque se podrá negociar con otro gobierno. Pero si gana el 'no', no tendrán más remedio que salir del euro", ha enfatizado.
Dejando de lado la oferta de última hora que el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha hecho a Grecia para seguir negociando a cambio de que Tsipras se comprometa por escrito a cambiar su primera intención y pedir a los suyos que voten 'sí' en la consulta, Rajoy ha insistido en que él no desea que Grecia se desvincule del euro, aunque aboga por que se cumplan los compromisos y se hagan reformas de inmediato.
"Esperamos que Grecia no se vaya del euro. Eso sería muy malo para los griegos y tampoco sería bueno para Europa, pero continuaría con su moneda. No tendrían por qué producirse acontecimientos de la misma gravedad que si España estuviera en la misma situación por la que atravesó en el 2012", agregó Rajoy.
El próximo domingo los griegos tendrán que responder con un sí o con un no a la pregunta: "¿Aprueba la propuesta que hace la Unión Europea?". La realización del referéndum ha sido aprobada con 179 votos a favor de un total de 300.
En su discurso ante el Parlamento, el primer ministro Alexis Tsipras aseguró que está convencido de que el pueblo griego dirá no a las propuestas del Eurogrupo. Subrayó que con "un no claro" Atenas se encontrará en "una posición negociadora mucho más fuerte". Al mismo tiempo, comentó que "respetar la soberanía del pueblo griego a expresar su voluntad no significa de ninguna manera haber decidido romper con Europa.