30 Mar. 2015 - Un nuevo punto rojo para la recolección de firmas a favor de Venezuela y contra el decreto del presidente Barak Obama fue instalado en las afueras de la Casa Museo Simón Bolívar, en la Habana Vieja, al que han acudido miles de cubanos y visitantes de otros países para manifestar su respaldo a la Revolución Bolivariana.
Colectivos de trabajadores de la construcción, arquitectos, amas de casa con sus niños pequeños se han concentrado en la simbólica institución, que recibió al comandante Hugo Chávez en su primera visita a Cuba en diciembre de 1994, para repudiar la amenaza estadounidense.
La directora de la Casa Museo, adscrita a la Oficina del Historiador de La Habana, Dora Cancio, afirmó que "constituye un deber de cualquier latinoamericano y caribeño apoyar el proyecto revolucionario del Comandante Hugo Rafael Chávez Frías, en momentos en que el imperialismo trata de destruirlo".
¡Viva Venezuela! y ¡Deroguen el decreto! son frases que repiten los firmantes en apoyo a la campaña "Venezuela no es una amenaza, somos esperanza", la cual en pocas horas ha contado con el respaldo de un gran número de personas en la Isla y fuera de ella. Tal es el caso de Susana Corner, ciudadana norteamericana, que también manifestó su respaldo a la paz al firmar contra el decreto de Obama en este nuevo punto rojo.
En la jornada también han participado estudiantes de la Universidad de La Habana de las Ciencias Informáticas y Médicas, de la capital y diferentes provincias del país, que alzan sus voces en un auténtico movimiento, que cobra cada día más fuerza, contra el injerencismo estadounidense hacia Venezuela.
"Nuestro corazón y todo lo que podamos dar por Venezuela, porque así lo hicieron nuestros comandantes (Hugo) Chávez y Fidel (Castro)", aseguró Berta Ríos, quien fue colaboradora en el área deportiva en Venezuela.
Personalidades de la cultura y la política cubanas también se han acercado a la Embajada de Venezuela para firmar contra el decreto de Obama y enviar un mensaje de solidaridad al pueblo bolivariano y al presidente venezolano, Nicolás Maduro. Estas jornadas se extenderán hasta los primeros días de abril, previo a la VII Cumbre de las Américas.