Héctor Ajejo Rodríguez: “Venezuela es un modelo para lucha contra el imperialismo”

El secretario general del Consejo Central de la Juventud del PCV afirma que defender nuestra
Patria es defender la lucha por la emancipación de muchos pueblos.

El secretario general del Consejo Central de la Juventud del PCV afirma que defender nuestra Patria es defender la lucha por la emancipación de muchos pueblos.

Credito: Américo Morillo

2 Mar. 2015 - Durante la última semana la ciudad de Caracas contó con la presencia de la Misión de Solidaridad con la Revolución Bolivariana, organizada por la Federación Mundial de Juventudes Democráticas (FMJD), invitada por la JPCV a participar en la capital en un ciclo de debates y actividades para reforzar el movimiento antiimperialista y expresar su respaldo al Gobierno y al pueblo venezolano ante los actos conspirativos impulsados desde Estados Unidos, con la participación de sectores económicos y políticos de la extrema derecha venezolana.

El secretario general del Consejo Central de la Juventud del Partido Comunista de Venezuela, Héctor Alejo Rodríguez, fue designado como uno de los principales organizadores del evento, que contó además con la colaboración de Nikolas Papadimitriou, presidente de la FMJD; Jesús Mora, secretario general de la organización juvenil del PCV, y una representación de naciones de Europa y África, además de países de Latinoamérica.

Rodríguez resaltó la necesidad de convocar este tipo de actividades como alternativa para informar al mundo de la amenaza a que está siendo sometida Venezuela y la Revolución Bolivariana, dado el cerco de los medios capitalistas sobre esta situación.

Afirmó que "Venezuela hoy es una causa para la humanidad y un modelo para los pueblos que luchan contra el imperialismo" para los que construyen alternativas distintas. El dirigente comunista afirmó que en el país la consigna debe ser "ni derrota ni claudicación, aplastemos la conspiración" por lo que plantea movilizar a la juventud en esta nueva etapa de ´profundización del proceso revolucionario".

Rodríguez también manifestó su confianza en la generación de relevo, en la profundización del proceso revolucionario y en la toma de las decisiones que favorezcan al pueblo.

El dirigente juvenil nos refirió en una entrevista aspectos clave de este evento internacional.

—¿De dónde surge la idea de organizar este evento en el que participaron jóvenes de distintos países con ideas progresistas y propuestas para revertir el modelo capitalista y sus consecuencias, en especial en Latinoamérica y el Caribe?

—Esta es una iniciativa que surge en mayo del año pasado. En ese mes se llevó a cabo en Vietnam el Consejo General de la Federación Mundial de Juventudes Democráticas. En el marco de ese Consejo, la Juventud del Partido Comunista de Venezuela presentó la propuesta de iniciar una campaña internacional con el pueblo y la Revolución Bolivariana, a raíz de los acontecimientos que vivimos en el mes de febrero (2014), donde el ala más reaccionaria de la derecha venezolana se lanzó a la calle con el objetivo de generar un clima de caos e ingobernabilidad. A esta campaña se sumó la agresión comunicacional, a través de los grandes monopolios de información al servicio del imperialismo. Todo ello le costó la vida a 43 venezolanos, además de numerosos destrozos e incalculables daños a la propiedad pública. A partir de ahí se dio una respuesta de las organizaciones que conforman la Federación Mundial de Juventudes Democráticas de expresar de manera concreta su solidaridad con el pueblo venezolano y la Revolución Bolivariana, y que se está materializando hoy con una iniciativa, como es la Misión Internacional de Solidaridad con el Pueblo y la Revolución Bolivariana.

—¿En concreto, cómo y cuándo se concibe la conformación de esta misión. Es por iniciativa propia o una idea concebida desde el exterior?

—En concreto la misión forma parte de una campaña internacional. Fue una decisión que se tomó aproximadamente entre los meses de octubre y noviembre. En el mes de diciembre ya estaba circulando la convocatoria a nivel internacional, y que, como ya vemos, tuvo una extraordinaria acogida en el Movimiento Juvenil Antiimperialista, porque de una expectativa pequeña que teníamos de movilización, a partir de los pocos meses de que disponíamos para la preparación, hoy nos encontramos con una composición de 45 delegados en representación de 25 países, a los que, aparte de la Federación Mundial de Juventudes Democráticas, se han sumado además otras dos organizaciones internacionales muy importantes, como la Organización Continental Latinoamericana y Caribeña de Estudiantes, que está representada por su presidente, y dirigentes estudiantiles de 4 organizaciones de la región, fundamentalmente de Colombia, Brasil, Perú y Nicaragua, y también se hizo presente una delegación del Consejo Mundial de la Paz, que tiene más de 70 años de lucha y de enérgico optimismo por la paz y contra la guerra imperialista.

—¿Podría mencionar algunos representantes de otras latitudes que también se hicieron presentes en Caracas?

—En el evento se hicieron presentes delegaciones de Líbano, Grecia, Chipre, Portugal, España, Italia, Namibia, Brasil, México, Chile, Bolivia y Cuba, entre otros. Aquí destaco la amplia receptividad que tuvo el llamado a solidarizarse con nuestro país, con el pueblo.

—¿Cuando ustedes plantean en la reunión de Vietnam la necesidad de hacer un seguimiento a la violencia generada en Venezuela, especialmente la que emerge a partir del 12 de febrero, estaban conscientes en ese momento de que esas situaciones de desestabilización podrían extenderse el resto del pasado año y repetirse durante este año 2015? ¿Cuál era la perspectiva que ustedes tenían en cuanto a esas acciones?

—En ese momento teníamos plena claridad de lo que estaba ocurriendo y de lo que iba a ocurrir. Recordemos que para el mes de mayo la guarimba había sido prácticamente derrotada en todo el país y el proceso se había anotado una gran victoria ante la propuesta de la salida violenta que propuso la derecha venezolana a principios de año, y fundamentalmente a partir del mes de febrero de 2014. Nosotros fuimos a ese Consejo General teniendo plena claridad de que este plan se iba a profundizar, se iba a agudizar, que la derecha iba a sostener una ofensiva con mayor intensidad, más aún tomando en cuenta que el año 2015 es un año electoral, en el que se van a elegir los diputados a la Asamblea Nacional, y en ese sentido, lo que más le conviene a la derecha es seguir apostando a un clima de caos, de sensación en la población de que no hay gobierno, y por eso nosotros planteamos una campaña internacional para desmontar este plan, con proyección en el tiempo, y también con un mensaje de alerta a la juventud del mundo de que Venezuela estaba siendo amenazada, que estaba en proceso de incubación un plan multifacético, dirigido y financiado fundamentalmente por el imperialismo norteamericano, y que, por lo tanto, las fuerzas antiimperialistas y que luchan por la paz en el mundo debían pronunciarse.

—¿De qué manera debía pronunciarse la juventud del mundo en ese momento?

—Desarrollando una agenda común para denunciar las agresiones antiimperialistas contra nuestro pueblo y transmitir la necesaria solidaridad que debía volcarse hacia nuestro pueblo.
En ese mismo momento surgió la propuesta de celebrar ese encuentro de solidaridad en el mes de febrero por estar cumpliéndose precisamente un año del inicio de la ofensiva fascista a través de las guarimbas y porque pensábamos que la derecha venezolana iba a apoyarse en esa misma situación para recrudecer sus acciones.

—¿Cómo calificarían ustedes a nivel internacional la receptividad y la preocupación de las comunidades de otros países sobre la situación interna de Venezuela, producto de estas conspiraciones? Aparte del interés de la Federación Mundial de Juventudes Democráticas, ¿qué otros sectores han manifestado interés y preocupación por nuestro país?

—Todas las juventudes del mundo están mostrando interés, porque Venezuela hoy es una causa para la humanidad, es un modelo para los pueblos que luchan contra el imperialismo, para todos los pueblos que en cada uno de sus países intenta o trabaja fuertemente por construir una alternativa distinta a las políticas que impone el imperialismo a esas naciones.

—¿Por qué cree usted que es necesario defender a Venezuela desde la perspectiva de otros países?

—Porque defender a Venezuela es defender también la causa de los trabajadores del mundo; defender a Venezuela es defender la lucha por la emancipación de muchos pueblos a nivel mundial; defender a Venezuela es defender la posibilidad de que los pueblos puedan seguir sus procesos de empuje, de lucha en búsqueda de importantes conquistas, en el marco del sistema de explotación que aplica el capitalismo. El principal enemigo de la humanidad es el imperialismo, frente a cuya arrogancia y agresividad necesitamos seguir incrementando nuestras luchas y articulando nuestros esfuerzos, defendiendo el derecho de que nuestro pueblo decida su propio camino.

—¿Cómo se desarrolló el evento. Cuáles fueron las temáticas y los puntos más relevantes que ahí se abordaron?

—Durante una semana desarrollamos una agenda muy intensa de trabajo que incorporó discusiones e intercambios con organizaciones culturales, deportivas, estudiantiles, juveniles y comunitarias. Al mismo tiempo se intercambiaron propuestas y opiniones con instituciones del Estado, entre ellas la Cancillería, donde el pasado jueves los participantes conocieron de cerca el diseño de la política exterior del Gobierno Bolivariano. Hay que resaltar asimismo la asistencia a la Asamblea Nacional, donde los delegados invitados recibieron una salutación por parte de los diputados, aprobada por la mayoría parlamentaria que apoya el proceso revolucionario, la que también envió un mensaje de salutación por los 70 años de la Federación Mundial de Juventudes Democráticas. También sostuvieron un encuentro con los representantes del comité de víctimas de las guarimbas. Igualmente realizamos el pasado miércoles una tribuna antiimperialista, en la que las organizaciones participantes denunciaron los planes injerencistas y de agresión del imperialismo norteamericano en todas las latitudes de nuestro planeta, y el día lunes pasado también desarrollamos un seminario internacional que llevó como título Juventud Unida Contra la Guerra Imperialista y el Fascismo.

—Considerando que ustedes están conscientes de que esta lucha es continua, que no es suficiente este tipo de actividades para abrirle los ojos a los venezolanos y a la comunidad internacional acerca del peligro para la institucionalidad democrática que implica las acciones de la derecha y Estados Unidos, ¿cuáles serían los planes a corto y mediano plazo, tanto en el plano nacional como en el internacional, para neutralizar la injerencia estadounidense?

—En el plano internacional nuestra principal línea de trabajo es darle continuidad a este esfuerzo, porque uno de los objetivos de la Misión de Solidaridad con la Revolución Bolivariana era traer a la juventud del mundo para que palpara en persona, no solo las conquistas que nuestro pueblo se ha dado en dieciséis años del proceso, sino cómo ha venido avanzando el plan conspirativo de la derecha, que también tiene dieciséis años, el mismo tiempo que tiene el proceso bolivariano en desarrollo y cómo ese plan ha afectado y sigue afectando a nuestro pueblo.

—¿Hay posibilidades reales de que esa campaña pueda profundizarse, tomando en cuenta el inmenso poder económico de Estados Unidos y la gran influencia que ejerce en la opinión pública los medios de comunicación asociados al gran capital?

—Esa campaña tiene que profundizarse, hay que darle continuidad. Es un deber patriótico. Por eso nosotros planteamos la tarea de, a partir de la Misión, impulsar los procesos de comunicación de los comités juveniles, a nivel internacional, para reforzar la solidaridad de los pueblos con la Revolución Bolivariana. En el campo nacional, nosotros planteamos la consigna, desde nuestro partido, "ni derrota, ni claudicación, aplastemos la conspiración". Una de las principales tareas que nosotros proponemos llevar a cabo es organizar y movilizar a la juventud en una nueva etapa en la profundización del proceso revolucionario. Creemos que la mejor forma de defenderlo es profundizándolo, es defendiéndolo como un patrimonio, como un legado para nuestros jóvenes, conquistando nuevos derechos, liquidando definitivamente las bases del modelo capitalista de economía rentista en el país. Es sentando las bases de la participación activa de nuestros jóvenes en el proceso de industrialización para ir neutralizando la hegemonía que mantienen los sectores oligarcas, la burguesía e importantes sectores económicos en el proceso productivo.

—¿De lograrse ese objetivo, se acabaría a mediano y largo plazo la amenaza de la llamada guerra económica?

—La presencia de esos grupos de poder en el sector industrial y de la producción les facilita la posibilidad de boicotear los sectores fundamentales de la economía que causan las situaciones que estamos viviendo, el sufrimiento de una población indefensa que ha sido víctima de los embates del desabastecimiento alimentario creado de manera artificial e intencional.

—¿Algunas propuestas en específico para neutralizar la influencia de poderosos sectores económicos en la producción, distribución y venta de alimentos y evitar que se genere en el futuro una nueva guerra económica contra el Gobierno Revolucionario y el pueblo?

—Entre las propuestas que hemos puesto en la mesa de discusión nos hemos planteado luchar por combatir las mafias que hay en las redes de abastecimiento y evitar que se le otorgue un dólar más a la burguesía y centralizar las importaciones. También hemos planteado aplicar impuestos más elevados a las ganancias del gran capital. Es un conjunto interesante de propuestas que nosotros venimos impulsando como reto importante para seguir conquistando las masas, porque de eso se trata, de seguir fortaleciendo el proceso revolucionario.

—El presidente de la República, Nicolás Maduro, planteó recientemente al Partido Socialista Unido la alternativa de postular personas menores de 30 años como aspirantes a diputados de la Asamblea Nacional, cuya elección se realizará a finales de año. ¿Qué opina como integrante de la juventud comunista sobre esta propuesta a pesar de no pertenecer a la referida organización política, aunque sí al Gran Polo Patriótico?

—Esos temas forman parte del debate interno en el partido. Hasta ahora no hay un pronunciamiento oficial sobre esto, por lo que no puedo ofrecer una respuesta de carácter institucional pero, en líneas generales, creemos que una de la cosas que ha caracterizado al proceso bolivariano ha sido la confianza que le ha dado a la juventud, expresado en el reconocimiento al papel que deben desempeñar nuestros jóvenes en las tareas fundamentales que necesita nuestra Revolución Bolivariana. A través de estos dieciséis años hemos visto cómo este sector ha ido ocupando progresivamente espacios en áreas importantes con la posibilidad de tomar decisiones. En términos generales consideramos positivo iniciativas de este tipo que permitan seguir elevando los niveles de conciencia y de participación masiva de nuestros jóvenes en las luchas contra el imperialismo.

—¿Pero, en conclusión, ustedes aceptarían este reto. Estarían preparados para asumirlo. Consideran que es clave la presencia masiva de revolucionarios menores de 30 años en la Asamblea Nacional como alternativa para reforzar el proceso revolucionario?

—En el Partido Comunista de Venezuela siempre habrá la disposición de apoyar toda iniciativa que vaya en favor del constante crecimiento de nuestra juventud, a través del desarrollo del sentido crítico y de la adquisición de las herramientas necesarias para participar activamente en la toma de decisiones, como punto clave para la profundización del proceso revolucionario.

*Biografía Mínima

Héctor Alejo Rodríguez Montaño nació en la parroquia Candelaria de Caracas, el 8 de noviembre de 1984. Tiene 30 años. Egresó en 2010 de la Universidad Central de Venezuela, donde cursó estudios en la escuela de Administración y Contaduria. Es militante activo del Partido Comunista de Venezuela (PCV), donde ingresó en el año 2002 como miembro de la juventud de esa tolda. Actualmente es el secretario general del Consejo Central de la Juventud del PCV.



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