Caracas, 24 de febrero de 2015.- Este martes, el Parlamento Latinoamericano (Parlatino) -capítulo Venezuela- aprobó un acuerdo que condena las pretensiones injerencistas del Gobierno de Estados Unidos contra el país, así como sus intenciones para imponer la impunidad a los actores políticos vinculados con un plan para ejecutar un golpe de Estado y bombardear lugares tácticos de Caracas.

En una entrevista concedida a la Agencia Venezolana de Noticias (AVN), el presidente del Parlatino Venezuela, Ángel Rodríguez, comentó que el texto publicado por la ultraderecha en días pasados, llamado Acuerdo Nacional para la Transición, forma parte de un conjunto de actividades anti inconstitucionales que promueve la derecha nacional e internacional, con apoyo y financiamiento de Estados Unidos, para declarar a Venezuela un Estado forajido.

Rodríguez explicó que un Estado forajido es "aquel que no tiene democracia y no respeta los derechos humanos, donde las instituciones públicas no son autónomas, pero además sus dirigentes están vinculados a sociedades ilícitas", tal como pretenden hacer ver medios de comunicación de la derecha nacional e internacional.

Con esa "campaña profunda" para declarar a Venezuela como un Estado forajido, explica el dirigente, Estados Unidos "pretende justificar a nivel internacional cualquier intervención", comentó el diputado, quien además señaló que la campaña negativa contra Venezuela no es nueva y que hay que relacionar todo el proceso de condenas y sanciones que ha hecho Estados Unidos, los actos violentos ocurridos en el primer semestre de 2014 y el plan de golpe de Estado descubierto por los cuerpos de seguridad de la nación.

A ese plan se le suma el documento presentado por la derecha, suscrito por María Machado, Leopoldo López y Antonio Ledezma, que plantea acciones para una "transición" de concretarse el golpe de Estado, evadiendo los mecanismos electorales establecidos en la Constitución; además, plantea la privatización de empresas públicas, la solicitud de dádivas al Fondo Monetario Internacional, entre otros aspectos, contrarios al modelo económico y social elegido por los venezolanos en 19 elecciones los últimos 15 años: el socialismo.

El plan de golpe de Estado establecía el bombardeo de la sede de la Presidencia de la República, el Ministerio de Defensa y el canal Telesur, entre otras instituciones. En este sentido, Rodríguez comentó que uno de los objetivos de esta acción terrorista "era la de generar una convulsión tal que justificara una intervención militar extraterritorial en el país (...) no se justifica un acto de esas características y de esas magnitudes".

El diputado alertó que el discurso que se maneja desde Estados Unidos es el de la agresividad, al recordar la frase de Barack Obama en la que comentaba que están obligados a "torcerle el brazo a cualquier país" o cuando el viernes pasado el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, dijo que el Gobierno norteamericano usaría "herramientas que encaucen al Gobierno de Venezuela en la dirección que ellos creen debe dirigirse".

Asimismo, comentó que además del acuerdo firmado hoy en el Parlatino, condenando la injerencia de Estados Unidos, se plantea realizar una serie de comunicados con pruebas que serán enviados a distintos órganos internacionales para mostrar la realidad del país, y que desmiente la campaña promovida por la derecha.

Entre las pruebas que acompañarán los comunicados internacionales se encuentran el video de la detención del alcalde metropolitano, Antonio Ledezma, efectuada el pasado jueves, en el que se demuestra el respeto de sus derechos humanos durante el acto, desmintiendo las declaraciones de la esposa del alcalde, Mitzi Capriles, y políticos de derecha como María Machado y Richard Blanco, quienes alegan que fue "salvajemente agredido".

En el material audivisual se ve a Ledezma hablando con los representantes de la Fiscalía General de la República, encargados de realizar la detención. Luego, se observa al representante de la extrema derecha (a quien le dio tiempo de ponerse una chaqueta) siendo escoltado por funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) y caminando tranquilamente a lo largo de las instalaciones del edificio. 

Finalmente, se ve como Ledezma sale de las instalaciones sonriendo y alzando las manos con un gesto de victoria, desmintiendo de esta manera que fue esposado o golpeado por los funcionarios.