28 agosto 2012 - La lista de víctimas de desalojo hipotecario en Estados Unidos crece principalmente a costa de los latinos y los afroamericanos. Y aunque millones de ciudadanos están sin hogar, los inversionistas mantienen sus casas desocupadas a la espera del momento más oportuno para venderlas.
Al fin y al cabo la situación real de millones de familias americanas dista mucho de la imagen que quiere dar el país. Se estima que desde que comenzara la crisis inmobiliaria en 2007 ya se han embargado unos 3,6 millones de hogares en Estados Unidos.
El pasado mes de febrero el Gobierno llegó a un acuerdo de 25 mil millones de dólares con los cinco bancos mayoritarios del país para intentar frenar el ritmo de desahucios.
