04 de septiembre 2009. - En entrevista concedida para el programa
Contragolpe en Venezolana de Televisión, el presidente de la
Organización Veteranos de la guerra en Irak, Josh Simpson, relató su
vivencia como militar en la invasión al país árabe y ahora como
activista contra la guerra.
Señaló que la cantidad de personas
detenidas en Iraq obedece al concepto de éxito del grupo de militares
en Irak, "esto depende de la cantidad de personas que detienen por día
(…) y no estamos hablando de terroristas, yo tuve que interrogar a
ciudadanos que sólo habían estado en el lugar equivocado".
Con
respecto a los interrogatorios, señaló que en los realizados por su
persona intentó ajustarse a las reglas. Sin embargo detalló que "el
trabajo sucio" era remitido la mayoría de las ocasiones a las
autoridades iraquíes que apoyaban la invasión.
Me di cuenta que
no sólo la tortura es inmoral sino que no te permite obtener
información relevante. "Bajo tortura estas personas terminaban
confesando crímenes de los que era imposible que fuesen culpables".
Reconoció
que durante su estadía en Iraq no hizo mucho para mejorar la situación
de los ciudadanos iraquíes, pero siempre intenté que los demás
militares vieran lo inútil que resultaban las torturas.
Nueva ola de colonialismo que se cierne sobre la región
Sobre
las implicaciones que tiene la presencia militar estadounidense en
Colombia, tras el acuerdo entre ambos países, Simpson detalló: "¿Qué
pasó en la Guerra del Golfo? Hubo un incremento en fuerzas militares en
Arabia Saudita, luego fue igual en Kuwait, para arremeter contra Iraq".
"Es
una nueva ola de colonialismo que se cierne sobre la región", destacó
el activista. "El gobierno de Estados Unidos ha demostrado su antipatía
por la Revolución Bolivariana, y estuvo involucrado tanto el Golpe de
Estado como en el sabotaje petrolero".