Los últimos dos años de la presente década han sido testigos del fuego graneado de alto calibre que el imperio y el cipayaje criollo han desatado sobre la revolución bolivariana, buscando el derrocamiento del comandante Maduro Moros. En este ataque dirigido desde el Comando Sur de USA, vienen participando las empresas transnacionales unidas a la burguesía parasitaria criolla, los partidos de la MUD, los medios de comunicación planetarios del capital, la Conferencia Episcopal y una Quinta Columna disfrazada de rojita enquistada en los altos mandos del aparato del estado. El primer semestre de 2016 ha sido el periodo más dramático de la revolución, pues, aquí se combinaron la descomunal derrota electoral del 6D y la profundización de las penurias económicas sufridas por el pueblo. La derecha política aposto por el estallido social con el fin de barrar de raíz al chavismo, sin embargo, tal cosa no ha sucedido, demostración fehaciente de que este pueblo no es fácil de embaucar. Afincada en su éxito electoral comentado y en el terrorismo económico de la burguesía parasitaria, la MUD se lanzó a la aventura de sacar a Maduro del poder el 01 se septiembre pasado, recibiendo de nuestro pueblo una desagradable sorpresa: un apoyo contundente en la calle al presidente Maduro. La alta dirección de la MUD quedo desconcertada, pues, tal reacción popular a favor de Maduro no estaba contemplada y las críticas internas tomaron carta de ciudadanía. "Maldita MUD" fue la consigna viral en las redes de la oposición venezolana. Sin haberse repuesto de este knock-out, Maduro los envió nuevamente a la lona con la conferencia del MNOAL de Margarita. La respuesta de la derecha frente a este segundo revés ligadito fue abrazarse al anti nacionalismo, o sea, ser más cipaya que nunca.
El triunfo de Maduro en el MNOAL es un mensaje para el imperio en los siguientes términos:
1.-La revolución bolivariana está legitimada en la sociedad planetaria.
2.-La soberanía de los pueblos se respeta
3.-La recolonización imperial será enfrentada mundialmente
4.-La riqueza natural de los pueblos tercermundistas es sagrada.
5.-El terrorismo como carta del imperio también será enfrentado.
6.-Los pueblos subdesarrollados tienen derecho a la superación económica.
Con este mensaje madurista al imperio, la oposición criolla cada vez queda más envuelta en la orfandad política, si programa y sin mensaje; lo que la asemeja más a la oposición gomecista que paso veintisiete años calificando al general Gómez de bruto, burro, ignaro, pata en el suelo y que solo duraría seis meses en el poder. Este pareciera ser el destino de la oposición anidada en la MUD.
Con los éxitos obtenidos por Padrino López, Castro Soteldo, Manuel Quevedo y con el "lanza llamas" de Diosdado calentando en el bulpen de Venezuela para cerrar el noveno, el Comandante Maduro puede luce definitivamente oxigenada para los próximos combates.
