Es cuando se me prende la maquinaria de lágrimas

Ay, me duele el corazón, mucho, y mi maquina interna de producción de lagrimas pronto se pondrá en su máxima capacidad. Antes de que se llevara a cabo la perversa y criminal invasión estadounidense de Afganistán, lloré. Antes de las tremendas masacres gringas y de la coalición asesina en Iraq, lloré. Y antes de los terribles atentados psicopáticos de la OTAN y los gringos de mierda contra Libia, lloré aun más – porque antes de que ocurra alguna invasión o intervención militar extranjera, y particularmente si los responsables son los criminales gobiernos del “primer mundo,” uno lo siente primero en los huesos, duele – ya vienen las masacres de inocentes, las violaciones y asesinatos gratis para crear miedo dentro de la inocente población, la destrucción de escuelas, hospitales, las infraestructuras viales, de electricidad, y de agua, y las torres de comunicación – todo lo que el simple e inocente ser humano, común y corriente ciudadano, usa diariamente.

¡Son un paquete de criminales!

El dolor empieza, pero al leer los comentarios del gobierno gringo hoy, de que el Pentágono presentó al congreso estadounidense una evaluación de las opciones militares para “ayudar” a derrocar al gobierno de Siria, y al escuchar que al mismo tiempo, ayer, la criminal Unión Europea designo a Hezbollah como organización terrorista – Hezbollah es un partido anti imperialista y anti israelí político/humanístico/de defensa, que opera principalmente en el Líbano, y que forma parte del gobierno del Líbano, y es apoyado por los gobiernos de Irán y Siria (y otros) ver: http://es.wikipedia.org/wiki/Hezbol%C3%A1 – el dolor se me transformó en rabia, y pasó a la sangre - ¡¡¡¿Cómo se van a atrever de nuevo esos gringos de mierda atacar, matar, asesinar, torturar, y destruirles la vida a todo un Pueblo libre, soberano, e inocente?!!!

Quiero morir de nuevo.

Mi rabia sangrienta, se transforma ahora en desesperación e impotencia, estoy muy lejos de Siria, soy un viejo incapaz, no tengo dinero para viajar, para ayudar en algo, morirán demasiados inocentes más dentro de poco – es cuando se me prende la maquinaria de lágrimas.

oscarheck111@yahoo.com



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Oscar Heck

De padre canadiense francés y madre indígena, llegó por primera vez a Venezuela en los años 1970, donde trabajó como misionero en algunos barrios de Caracas y Barlovento. Fue colaborador y corresponsal en inglés de Vheadline.com del 2002 al 2011, y ha sido colaborador regular de Aporrea desde el 2011. Se dedica principalmente a investigar y exponer verdades, o lo que sea lo más cercano posible a la verdad, cumpliendo así su deber Revolucionario ya que está convencido que toda Revolución humanista debe siempre basarse en verdades, y no en mentiras.

 oscar@oscarheck.com

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