La cultura fronteriza entre colombianos y venezolanos históricamente unidos por una zona libre que ha sido obligada por el contrabando de extracción
Agosto 19 de 2016.-La activación el pasado fin de semana de la frontera de paz, no sólo es una nueva y diferente etapa en las relaciones entre Venezuela y Colombia, sino un nuevo comienzo en la cultura fronteriza entre colombianos y venezolanos históricamente unidos por una zona libre que ha sido obligada por el contrabando de extracción, a tomar medidas para protegerse mediante el esfuerzo conjunto de los gobiernos de ambas naciones.
Según balance ofrecido por el vicealmirante Antonio José Clemente Carreño, Autoridad Única de la Zona de Seguridad Fronteriza número 6, con jurisdicción en el Alto Apure, en lo que va de jornada desde que comenzó, el pasado sábado 13 de agosto hasta la actualidad, no se ha registrado ningún hecho que llame la atención de las autoridades colombo venezolanas más allá de las típicas molestias que generan los cambios. Informaron de estas actividades el Departamento de Prensa de la Gobernación del estado Apure.
Asegura el Vicealmirante que incluso esta resistencia a los controles lo cual es normal porque "todo cambio genera un rechazo", ha cedido progresivamente gracias al diálogo cordial de las autoridades binacionales con todas las personas, especialmente con los habitantes de la zona históricamente acostumbrados al paso libre entre ambos países.
Un retraso en el paso peatonal que se abrió desde las 6 de la mañana, debido a la falta de costumbre a los controles migratorios y de materiales, fue uno de los escasos inconvenientes que ameritó una coordinación especial de los organismos autorizados por ambos gobiernos en las poblaciones de El Amparo, estado Apure, Venezuela y Arauca, departamento de Arauca, Colombia, para agilizar el tránsito, cerca de las 10 de la mañana, por el puente internacional José Antonio Páez, lo cual se regularizó progresivamente, explicó el oficial.
"Se extrañaban de vivir toda su vida aquí y nunca les habían solicitado ningún documento sino que la frontera era totalmente abierta", narró Carreño, quien también exaltó la labor de los 300 efectivos de los diferentes organismos del estado venezolano que en ese lado de la extensa frontera colombo venezolana participan en el registro y control del tránsito de personas, materiales y seguridad.
"La invitación es para que vengan acá y observen la tranquilidad, la paz y todo lo que se respira acá con esta apertura de la frontera dando respuesta el presidente de la república a las inquietudes del pueblo venezolano y trabajando por esa frontera de paz, esa frontera binacional que sabemos que estuvo difícil con los problemas de contrabando, pero se han minimizado, gracias a la unión cívico militar y a nuestro presidente", sostuvo el militar.
Reiteró que "lo que estamos buscando es control para minimizar los ilícitos, hay gente que se sabe que viene con malas intenciones y eso es lo que se quiere controlar de una y otra parte"
Por su parte Teresa Sánchez, mientras caminaba aproximadamente un kilómetro entre la aduana de El Amparo y el puente internacional José Antonio Páez, manifestó "tengo 45 años, soy de El Amparo, mi mamá era colombiana y siempre vendíamos nuestras hallacas en la plaza de mercado de Arauca, estoy profundamente conmovida de ver este letrero que dice: bienvenidos hermanos venezolanos, jamás en mi vida había llenado una tarjeta de migración para entrar a Arauca, nunca me había dado cuenta que Arauca era otro país".
Francisco Santander, habitante y líder popular del barrio "Pica Hueso" de El Amparo, refirió por su lado que "ésta es una nueva oportunidad, yo tengo fe que esto se va a arreglar". Santander no niega que el contrabando de extracción por esa zona era una realidad y que había que tomar una medida drástica para combatirlo.
Hasta las 12 del medio día del martes 15 de agosto, un poco más de 9 mil personas de ambas nacionalidades, además de las 1.615 que transitan regularmente con sus permisos de trabajo y estudiantes, habían entrado y salido con total normalidad de Colombia y Venezuela a través del paso peatonal por la frontera de Apure y Arauca, informó la Autoridad Única de la Zona de Seguridad Fronteriza número 6.
Sulay García/Prensa Gobernación.-