Mirando al anciano, el encuestador del gobierno, con voz militar golpeada dice:
"Disculpe ciudadano... ´Salamero´ no es un trabajo".
El trémulo y arrugado `ciudadano`, toma fuerzas, se pone de pie y responde sin miedo:
"Paráte vos a las tres de la mañana, te montáis arregindao en un bus, te váis pal' malecón, le sacáis las tripas y le echáis sal a los meros, pa' que veáis si es un trabajo o no"
Cuando escuchamos a un diputado representante de los militares tratar como delincuentes al desesperado pueblo que busca comida o se inventa un modo de sobrevivir, entendemos como hasta el pueblo chavista lo quiere sacar del gobierno que Chávez le entregó a Maduro y no a él. No es posible que a estas alturas del daño económico y social que la delincuencia le está haciendo a la nación, amparada por militares delincuentes, un débil gobierno, una absurda oposición y la desaparición de las organizaciones populares independientes, después de 15 años aun culpamos a las iguanas, el niño, a los cubanos, chinos o colombianos, esto últimos lo que han encontrado es una papayita: "que culpa tiene la estaca si el sapo salta y se ensarta"
Ya nadie nos cree que la culpa es solo de la oposición asociada al imperio vecino o del nuevo imperio chino que nos engañaron como a Lusinchi y endeudaron como nunca, pues nos preguntan en las colas: "quien expropió, quien quebró las empresas, quien acabó con las haciendas y los azucareros, las cementeras, la petroquímica, quién está gobernando, quién, decime" "Si se escudan con la cuarta, tercera y segunda, es que vamos pa´tras". No podemos explicar porque no tenemos ni comida, que todo se exporta, pues nosotros mismos nos preguntamos quiénes saquearon las haciendas productivas, luego las abandonaron y ahora son importadores, quiénes recibieron cantidades de dinero en cooperativas que ya no existen y no entregan cuenta. Quién maneja la petroquímica y por qué no hay fertilizantes. Quién expropió y eliminó la genética de mejor ganadería de leche y queso de Venezuela. Quién dilapidó los inmensos recursos del petróleo, quién acabó y está vendiendo por partes a PDVSA. Por qué hay tantos militares ricos con importadoras en el Imperio, Argentina, Uruguay y la China.
Expropiamos y obligamos a irse a los laboriosos portugueses, italianos, alemanes, japoneses y gringos que sentían y actuaban más venezolanos que muchos militares nuestros, para sustituirlos por vendedores chinos, libaneses y rusos. Acabamos con el CIED, Intevep, Ivit, Capet, INCE y ahogamos a las universidades, perdimos todo ese potencial de conocimiento y experticia, que nos proporcionó esa oleada de inmigrantes europeos, que desde todo espacio posible nos transmitían su ejemplo de trabajo, pues ellos vinieron para quedarse y no para llevarse. Tardaremos muchos años en recuperarnos, gane quien gane, pues nuestras escuelas están arrasadas, sus libros quemados, nuestros maestros, talentos y jóvenes se fueron o murieron de tristeza.
Así que a todo aquel que culpe a los Wayuu, ancestrales productores en tierras áridas e inhóspita, con una de las mejores culturas de familiares de América, con un nivel de inteligencia que supera los promedios venezolanos, solo le pedimos que se despoje de esa investidura suprema y se meta en una cola bajo el sol y la lluvia, con sueldo mínimo e intente llevar comida a su familia.
El pueblo sabe que ya está montada la estrategia militar de otros Dakaso para buscar votos, aparecerá comida, repuestos, medicina, casas y otras acciones propias de los militares para sostenerse en el poder, pero esta vez el pueblo confirma que si se dan las elecciones se la jugará con nivelar el poder y reconstruir entre todos la nación moderna, democrática, socialista y feliz, como los Wayuu. Pues así como vamos los únicos trabajos serán de maromeros de semáforo, marañeros, cujiceros, guarda cupos y comerciantes para venderles a los que no puede hacer cola.