Nuestro Libertador Simón Bolívar, con su pensamiento noble y humano expresaba:”Nadie puede ser privado de su propiedad, cualquiera que sea, sino con su consentimiento, a menos que la necesidad pública o utilidad en general, probada legalmente, lo exijan. En este caso, la condición de una justa indemnización, cuando las circunstancias lo permitan, deben presuponerse.”
No dudamos ni negamos, la gestión realizada por la Misión “Vivienda Venezuela”, en dotar de un cómodo y digno hogar a muchos venezolanos, unos víctimas de los embates de la naturaleza, al construir ilegalmente en lugares no aptos; otros que por su pobreza, se vieron obligados a invadir terrenos privados y públicos y sin ninguna planificación, se dieron a la tarea de fabricar ranchos, para habitarlos con sus familiares. Igualmente se beneficiaron aquellos que por necesidad tuvieron que vivir pagando alquiler o arrimados a sus padres.
Son miles de casas y apartamentos, que ya forman parte del urbanismo nacional, con todos sus servicios, canchas deportivas, escuelas ambulatorios, parques recreativos, y que alegres y felices forman parten de los hoy día tienen casa propias, mobiliario y comodidades; para cancelarlos en cómodas cuotas; pues el gobierno socialista y revolucionario, cociente de sus deberes para con los venezolanos, cumple sus promesas.
Pero hay situaciones en la selección de lugares para la construcción, en lo relacionado a la expropiación de la propiedad privada, por los representantes del pueblo.
Un caso emblemático ocurrido en el Municipio Peña, en el Estado Yaracuy en la ciudad de Yaritagua: las autoridades de la Alcaldía, expropiaron un terreno de propiedad privada de una hectárea, ubicado entre las carreras 16 y 17, con el fin de construir un edificio de apartamentos.
En este lugar estaba ubicado el vivero “Las Margaritas”, con décadas de existencia, y que con el paso del tiempo se había convertido en un hermoso bosque y jardín natural dentro de la ciudad, proveedor a la comunidad de plantas ornamentales y frutales; pero lo más importante de todo, es que se había tornado en un pulmón vegetal de la ciudad, que oxigena y alegra la zona todos los días con el trinar de aves canoras en busca de su alimento.
Según el profesional del derecho, abogado Hernán Agüero, directivo de la Fundación “Los Hijos de Yaritagua”, siempre a la vanguardia y protección de la región y sus reglamentos, el actuar de una manera arbitraria y utilizando métodos de presión, para que los dueños de la propiedad la entreguen de ipsofacto; estando de acuerdo con las expropiaciones legales para esos fines, siempre y cuando se siga con los procedimientos reglamentarios que lo amerite y beneficie a la comunidad; pero en este caso se están violentando todos los procesos jurídicos de una sentencia judicial nacional, propiamente dicha y para colmo violando la Ley Penal del Ambiente.
Las autoridades y el poder político partidista, no puede estar por encima de las leyes y la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela; pues dejaríamos ser un sistema democrático y participativo, donde sus habitantes tengan el derecho a decidir su presente y futuro.
Como comunicador Social, tengo el deber de informar, sin la intención de mal poner a los servidores públicos, y en tal caso, hacerlos reflexionar, ante cualquier error que se cometa y sea rectificado a tiempo.
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