Árias Cárdenas: la oportunidad del Zulia

El millón de zulianos que confió su futuro en el Presidente Chávez ha dejado una nueva realidad socio/política en la región. Realidad que busca acomodo en los espacios institucionales de representación y gobierno. En el Zulia, como pocas veces antes, hay un ambiente propicio para la victoria de una mayoría bolivariana que disponga las energías de las gentes del Coquivacoa en favor de los cambios que se suceden en el país nacional. La diferencia alcanzada casi 130.000 mil votos a favor de Presidente Chávez augura que algo se removió en las preferencias y los sentimientos de los zulianos. No digo que las cartas estén echadas. ¡¡Cuidado con los aires de triunfalismo!! Pueden traducirse en vaporones inservibles para el objetivo a alcanzar en pocas semanas.

La oposición contra la pared enarbola el miedo a la supuesta eliminación de la becas JEL, como ya lo han hecho en eventos anteriores. Envían a un periodista a preguntar sobre la becas y luego emprenden la campaña de mentiras. Menos mal que la respuesta del gobernador Arias no dejó lugar a dudas al respecto. Arias Cárdenas sabe a lo que se enfrenta. No es un aprendiz en esto de gobernar el Zulia. Ya la hizo una vez la fuerza de Venezuela, cuando las regiones estaban entrampadas por el falso discurso descentralizador de los partidos en Caracas. Entonces rompió los acartonados debates que imponía el centralismo y se lanzó a una política agresiva contra las mafias que ya asomaban sus narices imponiendo vacunas contra inmuebles y vehículos. Desde aquellos días gobiernan los que ahora quieren seguir y han hecho del Zulia campo y pasto de las mafias de todo tipo. El gobernador Arias coloca el tema de la inseguridad en el centro del debate. Todos recordamos las primeras acciones de su gobierno en ésta materia, su ataque frontal a las mafias de la delincuencia organizada y contra los cobra/vacunas. Había entonces la convicción de que con Arias Cárdenas podía la sociedad regional ganar esa pelea. Con los herederos de Rosales la hemos perdido.

El Zulia está sumido en una profunda crisis venida del desgobierno, la corrupción y la ineficiencia de una clase política que se viste con la bandera regionalista mientras asalta con la voracidad de una peste las grandezas de ésta región. En estos momentos los zulianos atravesamos por un estado de paranoia, un desgarre social que ha quebrado profundamente la convivencia y una violencia criminal que nos desborda. La oportunidad que Arias Cárdenas representa para el Zulia no pudo llegar en mejor momento. Su experiencia, liderazgo puesto al servicio de una política, de un plan, de unas formas democráticas de enfrentar lo que nos sucede. Su coordinación con el gobierno nacional, le hacen el líder justo para este momento del Zulia. Sus palabras en el acto de inscripción de la candidatura no tiene desperdicio: asumiré la responsabilidad de la seguridad y no acusaré a nadie de lo que no he hecho, además no seré complaciente con las mafias que los herederos de Rosales, no han querido enfrentar.

A Pablo se le acabó el tiempo. No tuvo estatura de gobernante para afrontar los graves problemas del Zulia. Y en el tema de la inseguridad personal y ciudadana se hizo de la vista gorda, dejando a los zulianos a merced de las mafias y de la violencia. Ha profundizado el deterioro de la policía, proporcional al crecimiento del miedo y la inseguridad, especialmente en los sectores de profesionales y pequeños empresarios. Pero ésta inercia que lleva al Zulia a la deriva tiene sus días contados. A mediados de diciembre hay otro Gobernador, otro rumbo y otro horizonte para los zulianos.


henrymaracaibo@hotmail.com



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Henry Ramírez


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