Viernes, 02 de agosto 2013.-Caracas es una ciudad en constante crecimiento, que tiene muchas de las características de las ciudades latinoamericanas, donde el crecimiento poblacional, la falta de planificación y la concentración de las actividades económicas, atrajeron a la población de la provincia hacia el centro y aumentaron exponencialmente la concentración de la población en las urbes. La desigualdad social que en nuestra ciudad está puesta en vitrinas, ya que resalta en nuestros cerros y barrios populares, aún no ha sido superada, pero, sin lugar a dudas en esta nueva etapa de la vida nacional, La Revolución Bolivariana, se le está dando una atención, nunca vista en el pasado, a los problemas sociales, como parte de esta acción política y social se creó la Gran Misión Vivienda Venezuela.
El complejo que lleva el nombre, Padre Juan Vives Suriá, de grata recordación por su labor a favor de los pobres y necesitados de auxilio, que forma parte de esta GMVV, está ubicado en Montalbán, parroquia La Vega, al final de la Ave. Teherán, entre las calles 12 y 13, casi llegando a la Universidad Católica Andrés Bello, entre el Hospital Cardiológico Infantil Latinoamericano Dr. Gilberto Rodríguez Ochoa y el nuevo cardiológico y oncológico para adultos, ambos en construcción. Se trata de una serie de cuatro torres, de excelente construcción, que encierran una serie de áreas comunes, casi una ciudadela.
Los habitantes de este complejo habitacional vienen de diferentes sitios: refugios, gente que perdió su vivienda, cuyos barrios colapsaron por las lluvias y por un grupo que viene de Las Terrazas de La Vega, clase media, de igual forma afectadas por las mismas lluvias.
El cohabitar de esta población unida por las inclemencias de la naturaleza, podría compararse con un experimento social, un laboratorio en vivo. No ha sido fácil el ponerse de acuerdo, pero un grupo de ciudadanos y ciudadanas pertenecientes al Consejo Comunal del Complejo Habitacional Juan Vives Suriá, han hecho un trabajo, de los que llamamos de hormiguita, por lo laborioso y están llevando hacia adelante diversos programas, dentro de los cuales, se encuentra la propuesta que a través de uno de sus voceros, José Martínez, hoy les mostramos.
Un par de edificaciones que están prácticamente adosadas al CHJS, sirven de base física a esta propuesta que incluye: Anfiteatro, la Casa de la Cultura, la Casa Comunal, una Aldea Universitaria, escuela elemental y un liceo, plazas, sitios de recreación, radio y televisión comunitarias unidades de producción social, en fin, una serie de proyectos que le darían vida a estos espacios que actualmente permanecen ociosos y que no solo beneficiaría a la comunidad del Vives Suriá, sino que incluiría a los del Complejo Oscar Arnulfo Romero y los del Pedro Camejo, así como la comunidad de Juan Pablo II, que integradas, sumarían una población cuantitativamente importante, cuyas necesidades de educación salud, pago de servicios públicos y entretenimiento podrían ser atendidas.
