Apenas nos lanzamos a la primera que fue el 19 de abril de 1810, todas las fuerzas reaccionarias, apuntalaron sus ataques desde el Caribe y todos los centros mundiales del poder, incluidos Francia y los propios Estados Unidos de Norteamérica.
El 5 de julio de 1811, el día de la declaración de Independencia, fue un acto fragmentando en el que no se comprometieron las provincias de Coro, Maracaibo y Angostura.
La ranciedad de los actos serviles pesaba mucho sobre aquella tierra esclava.
Vino el terremoto y se creyó todo perdido, luego la capitulación ante Monteverde que fue la estocada más terrible a la independencia. Nadie podía imaginar entonces que la patria se recuperaría de tan mortal golpe.
Pero para el genial Bolívar nunca la patria estaba perdida. Para él mientras existiera un hombre con dignidad, nada estaba perdido.
Para Chávez tampoco nada está ni estará perdido, pese a las situaciones más adversas que se nos puedan presentar.
El 26-S, tendremos que ir a movilizar a todo el pueblo, siempre entendiendo que hay millones de esclavos todavía en esta patria de Bolívar.
El 26-S se da la batalla número doce de esta guerra sin cuartel contra los cobardes y sometidos a dicterios extranjeros.
El 26-S, temprano la patria espera por todos nosotros, queremos decir la patria que es América.
El 26-S, le tenemos que cumplir al Padre Libertador y demostrar que somos dignos hijos de su estirpe.
A vencer con el arma de la conciencia, con la serenidad de los que nos consideramos hijos del Hombre de las Adversidades.
Otra jornada de gran compromiso por la libertad, por la soberanía, por la dignidad.
PATRIA ETERNA SIN SERVIRLES, PATRIA NOBLE, GENEROSA Y AGUERRIDA.
PATRIA SOCIALISTA O MUERTE.
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