17 oct. 2016 - Factores opositores buscan mutar su tardía convocatoria a referendo revocatorio en una fuente de amenazas que disfrazan de advertencias, pero no pueden ocultar que son herederos de aquél que acuñó la fatídica orden: Disparen primero, averigüen después.
Por eso Ramos Allup agrega a sus despropósitos amenazas a los vástagos de Diosdado Cabello, Capriles promete al CNE enfrentar las consecuencias de que no actúen a su placer, o explícitamente Lilian Tintori hace llamados a convertir la cruzada opositora en actos de desobediencia civil con acciones "ligeramente" ilegales, como si tal cosa existiera.
Mientras tanto, laboratorios de guerra sucia desatan viles campañas de propaganda que incitan al derrocamiento del Jefe de Estado escogido legitimamente por el pueblo venezolano, pero de los que se ha descubierto un entramado delictivo con incautación de explosivos a dirigentes políticos de la oposición como Yon Goicochea y Carlos Melo, que estarían involucrados con información descubierta en el plan de fuga de Daniel Ceballos, o la admisión de autoría intelectual de Julio Borges en las piezas audiovisuales involucradas en la investigación ligada a Carlos Ocariz.
¿Buscan "excusas" para no explicar a sus seguidores la razón del fracaso de sus objetivos?.
