La Mesa de la unidad democrática, reunión de los movimientos y partidos opositores en nuestro país, sólo ha encontrado en la violencia o el chantaje la forma de hacer política. Es por eso que tiene en su haber un rosario de derrotas. Nunca se suma o aporta soluciones verdaderas, serias, profundas. Siempre es el aprovechamiento, la viveza criolla, el robarle los beneficios al pueblo. Desde la misión maqueta pasan a cobrarles las viviendas con una clara intención de usureramente comercializar la necesidad del pueblo.
La propia ineficiencia y corrupción la achaca al otro y se gasta más en imagen y propaganda que en la inversión real para solucionar los problemas.
Para abrir el año la mud nos promete nuevamente la violencia, la alteración de todo el orden del país. Primero con su arrogante y groseramente vulgar actitud de desacato. Luego nos plantea un golpe de estado desde la asamblea con juicio político al estilo Paraguay y Brasil. Ahora la conmoción nacional por medio de la violencia para este 23 de enero.
No aprende la mud, no asume que éste es un país que quiere paz. Que quiere diversificar su economía, que quiere desarrollo y progreso pero sin ser robado o chantajeado. Ahora nos reímos de la última cola. Nos dolemos de las muertes, lesionados y quiebra de tantos venezolanos con la guarimbera y asesina salida. Ahora vuelve con su único recurso y argumento. La violencia, la quema de bienes de la patria. Viene desde el decreto Obama y la declaración de un funcionario norteamericano que promete transición democrática a la irracional declaración y llamados a las fuerzas armadas para llenar de sangre y violencia a la patria y, lo que es más vergonzoso es el acuerdo entre saqueadores de riquezas nacionales con politicos y autoridades de la iglesia.
Es incalificable la actitud y llamado a la violencia que hacen jerarcas de la iglesia católica aprovechando la fe y las tradiciones religiosas de nuestro pueblo. Verdaderamente asquea esa forma de hacer política. De intentar ganar espacio sólo con el argumento y chantaje de la violencia.