De abandono de cargos y cargos de conciencia

Con la misma ligereza, pero con más argumentos que la oposición, un grupo de compañer@s hemos decidido, “en asamblea”, declarar la suspensión de cargos de algunos actores de la vida política y económica de nuestro país.  Para ello no manipularemos, ni haremos interpretaciones ilegales de la ley, sino que tomaremos, las “acepciones terminológicas de la real academia española” que para algunos “eruditos” (lo de eruditos es un decir) supera hasta la propia carta magna de nuestra amada República Bolivariana.   Además, para darle más solidez a nuestra decisión tomaremos una actitud sobrada y arrogante.

Ahora bien, al estilo adeco y chiripero (rancio) comenzaremos por dar la definición de abandonar: “Dejar solo algo o alguien alejándose de ello o dejando de cuidarlo.  Dejar una actividad u ocupación o no seguir realizándola.  Dejar un lugar, apartarse de  él. 

Descuidar las obligaciones o los intereses”. Con estos consistentes términos, la actitud ya señalada  y basados en los hechos de la vida real, tomaremos la decisión histórica de declarar el abandono del cargo y el cargo de conciencia de:

La Jerarquía de la Iglesia Católica: Por estar tan lejos del pueblo y tan cerca de la oposición, dejando de lado hasta al Papa Francisco, con tal de evitar el diálogo y la paz,  todo con el objetivo de alcanzar sus mezquinos y particulares  intereses.  Su cargo de conciencia  es: saber que en lugar de servir a Dios, están sirviendo al César.

Empresarios Pelucones  Por  producir, distribuir y bachaquear como y cuando les da la gana los productos de la cesta básica y cuidado personal,  descuidando sus obligaciones de contribuir con el desarrollo económico y social, con el fin de destruir la patria a través de especulación, usura y escasez.  Su conciencia carga con el peso de  poner a las familias venezolanas a pasar hambre y pesares.

Escualid@s enchufad@s, los mismos que Diosdado dijo que no deberían estar en puestos claves de la revolución, pero que siguen allí, ejerciendo sus funciones con ineficiencia y negligencia, hablando mal de gobierno y gozándose de primerit@s los logros de la revolución.  Su cargo de conciencia (en caso de tener conciencia) son la amarguras y maltratos que le han dado a l@s venezolan@s que con inocencia y por necesidad han osado solicitar su atención.

Diputad@s opositores:  Por manipular y engañar a sus seguidores, apartarse de los principios democráticos y patriotas, descuidar sus obligaciones y no entender que además de ganar, también hay que trabajar por la paz y el bien de todos y todas. En sus conciencia$ queda el enorme peso de no haberle cumplido a su máximo líder (Obama) en su deseo de tener  patio trasero a pesar de todas las “salidas” ilegales que le propusieron.

Disposiciones finales

Queda abierta la inclusión de nuevos abandonos, que el pueblo venezolano tenga a bien suscribir.  Asimismo, cabe destacar que, a diferencia de la oposición apátrida después de estas inconstitucionales declaratorias de abandono,   no asumiremos ninguna “voluntad violenta”,  declararemos crisis humanitarias o llamaremos al “pana”  Almagro para que, tomando en cuenta nuestras aspiraciones,  trate de convertirlas en  realidad.  
Por último declaramos que no abandonamos nuestra lealtad al legado de Chávez y mantenemos la conciencia limpia e íntegra para seguir en pie de lucha por la construcción de la patria socialista.
Dado, firmado y sellado en la patria grande por los hij@s de Bolívar y Chávez a los doce días del mes de enero de 2017.  ¡EJECÚTESE!

¡Chávez Vive, La Patria Sigue!

 

yamiladumont@gmail.com



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