Pildoritas 77 (año IX)

¿Cuándo será que la derecha deja de hacer el ridículo?

Definitivamente el comportamiento de la derecha venezolana que llega casi siempre a la categoría de incomprensible, pues llevan 17 años de error en error, incluso cuando pareciera que circunstancias ajenas  a su propia capacidad le favorecieran, como en el caso de  la obtención de una mayoría circunstancial,  en las AN, cuestión que en lugar de administrar para contribuir a mejorar el nivel de vida de los venezolanos, haciendo una oposición concienzuda, en la que no falte la crítica, pero sin que esta llegue al obstruccionismo y al sabotaje, como una estrategia  para intentar que sus objetivos de hacerse del poder se cumplan, no da sino para llegar a la conclusión, que esa oposición perdió irremediablemente el rumbo, demuestra en cada una de sus ejecutorias que desconoce que el pueblo venezolano ha evolucionado, es un pueblo informado, que sabe cómo actuar en las circunstancias en que sienta que sus derechos y logros están en peligro, que es verdad que a veces se ha equivocado dándoles como en el caso de lo sucedido el 06D, poder a quienes en pocos meses han demostrado que no se lo merecían y que lo han utilizado inexplicablemente para, ir contra sus electores como en el caso de las leyes que han aprobado y que inevitablemente han tenido que ser declaradas inconstitucionales por el máximo tribunal de la República, obligado por la fuerza y mandato de la carta fundamental que le impone hacer respetar su contenido, vengan de donde vengan las violaciones.

La vergonzosa oposición que aquí padecemos los venezolanos, casi que como caso único en el mundo civilizado, ha llegado a extremos de desconocimiento de la constitución, a la que por cierto invocan equivocadamente, cada vez que les conviene, por ejemplo cuando hablan del artículo 350 , interpretado de la manera más burda y errónea, que  sin medir las consecuencias, se han colocado en desacato, lo cual como diría el nefasto “gocho” en su segundo mandato, no es otra cosa que un “autosuicidio”, puesto que todo lo que de allí salga, el más insignificante hecho que se apruebe, o aun el que consideren más transcendente, padece de nulidad absoluta que obliga a los posibles ejecutores a hacer caso omiso para no colocarse al margen de la Ley.

Es lo que sucedió por ejemplo con la aprobación del Presupuesto Nacional para el 2017, que por ningún motivo podía ser presentado por el Presidente de la República, ante un órgano legislativo que no es apto para recibirlo y menos para discutirlo pues como hemos dicho por estar en flagrante desacato, carece de cualidad.

Afortunadamente el constituyente de la mejor y más completa constitución del mundo como es la Bolivariana, previó hechos como éste, del cual pareciera la bancada lacaya de la AN, no tenía conocimiento y dispuso que en circunstancias como esa, fuere el máximo órgano de justicia, quien recibiese  el proyecto de presupuesto y autorizase su ejecución.

Así sucedió y la República va a seguir su rumbo a partir de enero y no tendrá que pasar por dificultades mayores a las que ya le han venido causando a su pueblo, desde la derecha irracional, con  la llamada guerra económica, sin  contar todos los males a que nos han sometido con la violencia a través de guarimbas cruentas, con decenas de muertos, centenas de heridos y enormes pérdidas materiales para la Patria, siempre derrotados, derrotas que no les han servido para cambiar sus estrategias y seguir buscando motivos con el fin de justificar la violencia interna y una posible intervención armada como ya ha sucedido en no poco países del mundo.

Todo ello explica el enorme desapego que la oposición venezolana, tiene por el pueblo venezolano, pues con sus acciones que han obligado a las instituciones de del Estado a defender la Ley, no miden las consecuencias que de ellas se puedan desprender y que afectaría de manera grave a los habitantes del país.

Ejemplos sobran, el de Cuba el más emblemático, pueblo al que casi matan de hambre con el inclemente bloqueo que aun no levantan, pero en el que se encontraron una  resistencia tan fuerte, que ahora le está sirviendo para emularlo,  al pueblo venezolano, ya lo ha venido demostrando, contra los males artificiales que nos han venido aplicando los oligarcas de la derecha.

 Hemos dado muestras de que somos capaces de resistir, de emular el heroísmo cubano y salir adelante, afortunadamente estamos en mejores condiciones que la Cuba de hace 60 años, no estamos para nada aislados como lo pregona otra vez de manera errónea y vulgarmente mentirosa la derecha, hemos dejado claro que somos un hueso muy duro de roer, porque somos un pueblo al cual el mensaje bolivariano, rescatado por el padre de esta Revolución ha calado muy profundamente y si en el 2002, cuando apenas estábamos iniciando la senda de un nuevo amanecer, no pudieron ocultarnos el sol, ahora 17 años después hemos madurado, hemos acumulado experiencia y fuerza cívico militar, lo que más les duele,  y sabemos muy bien lo que debemos hacer para salvar la Patria en cualquier circunstancia.

Por ello lo de este domingo, otra pataleta más de los apátridas, se quedará en eso, en rabieta demostrativa de su mediocridad y falta de visión y de que desconocen al pueblo venezolano, que olvidan la reacción de ese pueblo el 13 de abril del 2002, que por cierto mostró  este domingo apenas un poquito de su capacidad de movilización, al plenar las adyacencias de la AN, a diferencia, por ejemplo de lo sucedido el día anterior, cuando con  amplia difusión un  grupo de damas de la oposición, convocaron a trancar avenidas en la Capital para quedar en ridículo una vez más.

Así que la consigna popular de que NO PASARÁN, NO VOLVERAN, van a tener los señores de la derecha, que buscar la forma de ingerirla, digerirla  y asimilarla para que no se lea atragante y de repente mueran por ahogamiento obstructivo de su aparato respiratorio superior.



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Saúl Molina


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